Crítica de 'El día de mañana': Una comercial historia de amor con la que descubrir nuestro pasado

En los últimos meses, la producción de ficción en Movistar+ se ha acelerado. En este tiempo han llegado 'Velvet colección', 'La peste', 'La zona', 'Félix' o 'Matar al padre', entre otras. Infinidad de historias distintas con las que la plataforma de pago ha querido demostrar que sabe hacer ficción de todo tipo. Se ha apostado por una estrategia basada en estrenar una serie cada mes, y como no podía ser menos, en junio aterriza una nueva: 'El día de mañana', una ficción que firma Mariano Barroso y que llega bajo la producción de Mod Producciones.

La serie está basada en la novela homónima de Ignacio Martínez de Pisón, cuenta con un guion de Alejandro Hernández y Mariano Barroso y narra la historia de Justo Gil, un joven aragonés que decide viajar a la Barcelona de la Transición para lograr mejorar la vida de su madre y labrarse un futuro más allá del pueblo en el que nació. Allí descubrirá una nueva vida, conocerá lo que es el verdadero amor y se verá obligado a entrar en una red de espionajes y delaciones. Amor, intriga, esperanza y política son los principales ingredientes de esta nueva producción de la plataforma.

La serie que Movistar+ necesitaba

Es innegable que 'El día de mañana' es una serie que Movistar+ necesitaba. Después de ficciones destinadas a un target mucho más cerrado y concreto, como ha sucedido con 'Matar al padre' o 'Félix', esta nueva ficción sí es comercial, es una serie fácilmente consumible por un abanico importante de espectadores. Y sí, Movistar+ necesita una ficción abierta, de la que se hable, necesita seguir creciendo en su intención de convertirse en una factoría de ficción nacional. Es importante crear series cuidadas, destinadas a un "nicho" concreto, pero es también es necesario producir historias más abiertas a un espectro grande, que provoquen una conversación social importante.

Una serie de personajes

Es precisamente lo que puede suceder con 'El día de mañana', y es que lejos de ser una serie puramente política, nos encontramos una serie de personajes. Sí, parece tópico y típico, pero es lo que sucede. Todo el trasfondo político lo conocemos a través de la visión de personas como Justo Gil (Oriol Pla), Carme Román (Aura Garrido), el Comisario Landa (Karra Elejalde), Mateo Moreno (Jesús Carroza) o Emili (Pere Ponce). Ellos y sus relaciones son el verdadero centro de 'El día de mañana', y es que lejos de ser una sucesión de momentos políticos de la época, simplemente estos actúan como detonantes de lo que les sucede a sus personajes.

Lo que a muchos sorprenderá en 'El día de mañana' es que todo se acaba resumiendo en la historia de amor de sus protagonistas. Sí, la relación de Justo y Carme es la gran trama continuada de la serie y sobre lo que todo gira. ¿Es un acierto? Posiblemente gracias a ello nos encontramos ante una serie mucho más comercial y abierta, por lo que podríamos pensar que sí. ¿El problema? La trama política se explota demasiado tarde, posiblemente hubiese sido mucho más acertado equilibrar ambos puntos y que conviviesen desde el primer minuto ya que son perfectamente complementarios.

Una época que necesitaba ser contada

¿España todavía no ha olvidado ni curado sus heridas? Posiblemente. Por ello épocas como la franquista y la posterior Transición no han sido excesivamente tratadas en nuestra pequeña pantalla. Esta vez sí ha sido un acierto por parte de Movistar+ el adaptar esta historia, es interesante darle un hueco a una época convulsa, que sin duda marcó nuestro país, es necesario incluso. Era importante hablar y recordar lo que pasó, posicionarnos en lo que sucedió y recordarnos de dónde venimos. Además, es interesante focalizar la acción en Barcelona, un lugar que marcó un antes y un después en nuestra sociedad y que a día de hoy es también núcleo de la evolución política de nuestro país.

Unos personajes que sí evolucionan

Otro de los grandes aciertos de la serie es la gran evolución que tienen sus personajes, especialmente Justo y Carme. Él es el centro de la historia y a través de su mirada vamos viviendo la evolución de un país pero también la suya propia. Es un personaje que cambia radicalmente, que sufre una enorme evolución (positiva y negativa), es alguien que encandila, enamora y atrapa, y que sin duda sí cumple con acierto la función protagónica. Logra mantener la atención del espectador por saber hacía donde irá su vida, es un ser carismático y Oriol Pla está sencillamente perfecto en el papel. Ha sabido llevarlo a su terreno y lo hace suyo desde el minuto uno.

Y al igual sucede con Carme, el personaje que posiblemente más cambia a lo largo de la historia. Poco tiene que ver la forma en la que actúa y afronta sus problemas en el último capítulo a la Carme dulce y complaciente del principio. El trabajo de Aura Garrido es impecable. No sorprende teniendo en cuenta su historial en teatro, cine y televisión pero es necesario recalcarlo. Garrido logra plasmar los cambios que sufre Carme, transmitir su dolor, su rabia, pero también el amor que siente hacía Justo, y es que la química entre Pla y Garrido es más que evidente.

Karra Elejalde, el gran acierto

Imposible no nombrar el excepcional papel que Elejalde realiza en esta serie. El suyo es sin duda el personaje más complejo y a la vez agradecido de la serie. Ácido, divertido y maquiavélico, el Comisario Landa es sin duda una auténtica revelación en 'El día de mañana'. Logra conectar con la historia de una forma perfecta y sin duda le da a la misma un toque diferencial muy importante. Elejalde no decepciona y nos logra enseñar una faceta irónica, divertida y canalla que le viene como anillo al dedo.

Estas tres piezas no funcionarían sin un grupo de secundarios que sin duda se convierten en complementos perfectos para que todo resulte. La historia que rodea a Justo, la imprescindible comisaría o el entorno de Carme, todos son elementos necesarios en la trama y por ello rostros como Diana Gómez, Jesús Carroza, Pere Pone o Nora Navas son sin duda imprescindibles en 'El día de mañana'. Sus personajes conectan con los protagonistas y ellos realizan trabajo especialmente destacables, sin duda.

Conclusión final: Una serie que sí funciona

En definitiva, 'El día de mañana' es una serie que funciona. Pese a no saber complementar a la perfección política y amor en los primeros capítulos y costarle arrancar la acción también en el primer tramo de la temporada, es una serie que perfectamente puede convertirse en todo un éxito en Movistar+. Tiene una historia que atrapa, está muy bien producida, cuenta con una banda sonora muy acertada y con un plantel de actores muy bien escogido. Es una ficción comercial que a algunos recordará incluso a 'Cuéntame cómo pasó' o 'Velvet', pero que sin duda cumple y engancha.