Ha sido duro, pero ya ha llegado el final. Poco imaginaban las tres familias españolas que se embarcaron en 'Perdidos en la tribu' cuánto darían de si 21 días en compañía de algunas de las comunidades más remotas de la tierra. Durante dos meses les hemos visto sufrir, divertirse, esforzarse por ser uno más de la tribu, compartir las costumbres, la indumentaria, los ritos y la comida de sus anfitriones...
Ahora llega el momento de la verdad. El reto era transformarse en miembros de la tribu y adoptar los roles que cada uno de los poblados tenga históricamente asignados a los padres de familia, a las mujeres y a los hijos. El premio, 150.000 euros, será para la familia (o las familias, si lo con sigue más de una) cuyos miembros se hayan mimetizado plenamente y hayan sido aceptados por los indígenas. Este domingo 5 de julio sabremos en Cuatro si alguna de ellas lo ha conseguido.
Esta semana las familias regresan a sus casas, pero antes de hacerlo tendrán que enfrentarse al momento más difícil de toda la aventura: saber si son o no aceptados por los miembros de la tribu con la que han convivido durante todo el programa. Algunas familias no lo tienen nada fácil pero ya nada pueden hacer, la decisión está en manos de los Consejos Tribales y es la hora de saber cuál es su veredicto.
Además llega el momento de las despedidas. La emotividad cubre la vasta extensión del norte de Namibia, el desierto del Kalahari e Indonesia, pero será en la tribu mentawai en la que la despedida se vivirá de una forma más dramática. Para los Recuero-Oliva la estancia en la tribu ha sido especialmente dura pero se han creado ciertos lazos que será difícil olvidar, y el regreso a casa se convertirá en un vaivén de sensaciones. En el norte de Namibia, los Carrión-Roldán tampoco podrán olvidar a una tribu de la que tanto han aprendido, y en el desierto del Kalahari, los tinerfeños Molina-Herrera descubren que han conseguido terminar la aventura más unidos que nunca.
Cuatro prepara ya la segunda edición
Cuatro se lanza a la búsqueda de nuevas familias que quieran vivir el que sin duda será el viaje de sus vidas. La cadena ha puesto en marcha el casting de selección de familias para la segunda temporada del exitoso 'Perdidos en la tribu'. Cuatro renovó el formato a falta de dos programas para conocer a los ganadores de esta primera edición.
El docu-reality presentado por Nuria Roca ha sido uno de los éxitos de la temporada cosechando, a falta de dos programas, una media de 13,6% de share en su primera edición.
En la segunda temporada habrá nuevos destinos y nuevas tribus. Todos aquellos que deseen vivir una aventura en familia sólo tienen que ponerse en contacto con la productora o entrar en el site de Cuatro.
'Callejeros Viajeros' cierra su primera temporada en Londres
Este domingo 'Callejeros Viajeros' se traslada a Londres con los reporteros Noemí Redondo y Raúl Vaquero, en el que será el último programa de esta temporada. Londres es la cuna del Imperio Británico, es una ciudad sin medias tintas: O se ama, o se odia o te acoge o te destruye. Los ingleses comparten las maravillas de su tierra con cerca de treinta millones de turistas al año. Junto a Cristina, una ejecutiva de cuentas reciclada desde hace unos meses en dependienta de ropa, los reporteros conocen los lugares imprescindibles de la ciudad: Trafalgar Square, Picadilly, el cambio de Guardia Real, o Westminster donde, frente al Parlamento, manifestantes tamiles luchan por robarle protagonismo al Big Ben.
La mayoría de la población se mueve en transporte público: trece líneas de metro, miles de licencias de los famosos taxis (cabs) y autobuses rojos de dos pisos.
Con ocho parques reales y miles de jardines, en cuanto el tiempo lo permite y deja de llover los ingleses se desnudan y se lanzan a la calle. Algo posible en un lugar en el que la vergüenza no existe y la libertad de ser uno mismo se respira en cada barrio. Luna, amante del fetichismo demuestra ante las cámaras que en Londres pasear vestida de los pies a la cabeza con látex puede llegar a pasar desapercibido.
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Capital de Reino Unido es también la capital económica de Europa y una de las cuatro potencias financieras del mundo. En La City, apenas una milla cuadrada, 300.000 trabajadores generan al año cerca de un billón y medio de euros al día. Miguel Ángel recorre cada recoveco de la City y comparte uno de los mayores entretenimientos de los ingleses: ahogar el estrés con pintas de cerveza.
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De la mano de tres au-pairs (niñeras) recorremos el río Tamésis. Pero también Pere nos invita a navegar por el único canal de la ciudad: el Regent's Canal, una forma de vida alternativa, sostenible y mucho más barata que el resto de opciones.