ENTREVISTA

Gala Évora: "Siempre he admirado a Lola Flores e intentaré aprender de ella"

Gala Évora da vida a Lola Flores en 'Lola, la miniserie' que Antena 3 emite este 15 y 16 de septiembre, en prime time.

Por Redacción El 15 de Septiembre 2009 | 13:53

La protagonista de 'Lola, la miniserie', Gala Évora, nos habla, en esta entrevista realizada por Antena 3, del rodaje de la historia de Lola Flores desde los primeros años de su vida profesional, en su Cádiz natal, hasta la cumbre de su carrera artística. Gala también nos cuenta cómo fue el momento en el que le dijeron que iba a dar vida a "La Faraona" y cómo ve su parecido con ella.

¿Cómo te ofrecieron el papel?

Me enteré del casting de refilón porque una amiga mía se presentó y yo estaba un día de concierto en Jerez de la Frontera, y un amigo me preguntó "¿por qué no te presentas tú?". Aunque realmente me llega todo a través de una llamada de la directora del casting, me llaman para pedirme una entrevista y para ver cuando me podían hacer una prueba. Me preparé un monólogo que me enviaron en Sanlucar, y a los dos o tres días estaba en Madrid reuniéndome con Miguel Hermoso, el director de la película. Aluciné porque creo que esto sólo pasa una vez en la vida. Nada más llegar a Madrid conocí a Miguel Hermoso, durante tres días me contó el proyecto, me leí el guión y conocí a José Luis García, el actor que da vida a Manolo Caracol.

Llegué un jueves a Sanlúcar de Barrameda porque me dijeron "en 15 días te contestaremos", pero al día siguiente me llamaron para decirme que era yo la elegida. Recuerdo que me puse a llorar y a 'pelearme' con la persona que me llamó porque le decía "es mentira", es que no lo asimilaba, no me lo creía.

¿Cómo fue el rodaje de la película?

Fue como un sueño. Para mí era el primer trabajo y me sentía como una niña pequeña que, de repente, empieza a absorber información y a convivir con personas maravillosas como el director, los compañeros de reparto, el equipo...

Si hablamos del personaje, fue una experiencia conmovedora que me ponía a prueba en todos los sentidos. El rodaje fue un continuo aprendizaje y descubrimiento del personaje, del cine y la interpretación. Estaba 12-14 horas estudiando todos los días, cuando empezamos los ensayos con todo el reparto, era todo una sorpresa agradable cada día. Fue una experiencia maravillosa y el resultado a sido positivo en todos los sentidos.

¿Cómo te preparaste el papel?

A partir de que ellos me confirman que he sido la elegida hablé con mi familia, que había trabajado con Lola en varias ocasiones, y no paré de preguntarles cosas porque sé que yo estuve con ella cuando era pequeña, pero no me acuerdo. Ellos me contaron cosas, me documenté con muchas biografías, películas, actuaciones, recortes de prensa... cualquier cosa que hablara de Lola lo estudiaba.

¿Cuántas veces te han dicho que te pareces a Lola antes de la película? ¿y después?

Antes de hacer de Lola sólo una vez, cuando estuve en México de gira recuerdo haber trabajado con un fotógrafo que había estado con ella y me dijo que mi mirada recordaba un poco a Lola Flores. A Rosario sí que me lo habían dicho varias veces. Después de la película, me lo dijeron un montón de veces. Pero yo nunca me he visto el parecido, la verdad.

¿Hablaste con alguien de la familia Flores antes o después de la película?

Antes no, pero después sí. En el programa en el que estoy trabajando es de copla y una de las invitadas fue Carmen Flores. Tuve unas palabras preciosas con ella, es una señora de chapeau. La película dejó de un lado y alabó mi trabajo en ella, me lo agradeció y eso lo llevaré en mi corazón para siempre. Yo hice la película con el corazón, con todo el respeto y con todo el cariño.

¿Qué es lo que más admirabas de Lola?

Artísticamente siempre la he admirado desde muy pequeñita y siempre intentaré aprender de ella. Pero también me quedo con ella como persona y como mujer.

¿Qué fue lo más divertido y lo más complicado de rodarla?

Lo más divertido fue una de las secuencias en la que estamos Manolo Caracol (José Luis García) y yo y hay una discusión. En la escena salgo lanzándole platos, cajas... porque era una discusión. Una de las cosas que le lancé fue una percha y la tiré con tanta fuerza que la clavé en la pared de enfrente (risas), fue un momento que le quitó tensión al asunto. Es que estábamos los dos muy metidos en el papel, era una gran discusión.

Lo más complicado fue el principio, el hecho de asimilar todo lo que me estaba pasando, el personaje que estaba viviendo. Una vez que empezaron los días de ensayo y el rodaje el resto fue más sencillo. Otras escenas complicadas son las de sentimientos dolorosos, porque cuando yo lloro, lloro de verdad, saco fuera todos mis sufrimientos y lo que a mí me entristece. Y la escena de la cama también. Me dio mucha vergüenza rodarla (risas).

¿Qué te parece que adapten la película a la tele y ofrezcan muchas más imágenes?

Me parece genial sobre todo si la reciben con el cariño y el respeto que nosotros la hicimos, si reciben el mensaje que nosotros hemos querido transmitir me puedo sentir satisfecha. Además, no es la misma versión, hay una hora más de película que la que vieron en el cine, por eso la dividen en dos. Por ejemplo, las actuaciones las ponen completas e incluso se podrá ver la escena en al que se graba en un estudio el tema de la Zarzamora. Seguro que veo cosas que no recuerdo muy bien y, sobre todo, me emocionaré muchísimo.