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Álex Barahona, el actor que da vida a Berto en la ficción de Antena 3 se mete en la piel de los cocineros del restaurante "El 18" de Madrid y comprobamos si se le da mejor la cocina a él o a su personaje en 'Física o Química'.
Después de tu experiencia en la serie y en el restaurante 'El 18' ¿en casa eres muy cocinillas?(Risas) Mi mejor plato es una ensalada, con todos los ingredientes. No soy cocinillas porque, aparte de no saber, no me gusta trastear mucho con la comida.
¿Se te conquista por el estómago?
A mí si, pero yo no conquisto por el estómago (risas), es la diferencia.
¿Cuál es tu plato estrella?
Lo más básico, una ensalada de pasta... aunque la verdad es que nunca me he planteado cual es mi plato estrella porque todo es muy básico. Una ensalada con queso de cabra y poco más.
¿Qué te parece que le hayan dado el Premio Ondas a 'Física o Química' como mejor serie?
No podría ser otro que a la 'Mejor serie' porque es un éxito grupal. Equipo artístico, guión, dirección, producción ejecutiva, producción, arte, equipo técnico... no hay protagonistas, somos un engranaje, el cual la audiencia, y en este caso el Premio Ondas, nos hace reivindicarnos en un trabajo bien hecho.
Tu eres de la generación EGB ¿qué crees en que ha cambiado respecto a la generación ESO?
Creo que ahora la juventud tiene mucha prisa por crecer, por hacerse mayor, disfrutan poco de la infancia y no se dan cuenta que mayor se es mas tiempo que pequeño. Esa prisa por dejar de jugar, de soñar, de hacer cosas propias de la edad pues creo que es el cambio no se por qué. No se si será producido por la sociedad, medios de comunicación, sociedad de consumo... no lo sé, pero queremos dejar de ser niños cuanto antes.
¿Qué hacías cuando tenías la edad de los personajes de 'Física o Química', 16 ó 17 años?
Yo jugaba en un equipo de fútbol, entrenaba tres días a la semana y jugaba en el equipo del colegio San Viator el domingo, hacía mi vida en el colegio. Todos los amigos nos reuníamos para jugar. También salíamos, en mi grupo había de todo, mucho de lo que enseña 'Física o Química', pero teníamos un sueño. El mío era ser futbolista. Nuestra vida estaba orientada a qué queríamos ser de mayor... uno informático, otro químico... teníamos una dirección, ahora está todo más disperso.
¿Qué te hizo cambiar tu destino de futbolista a actor?
No sé, el sueño de ser futbolista es como el de cualquier niño, les ves en la tele y piensas "yo también quiero", pero en realidad yo nunca he querido ser profesional, sólo jugaba por diversión.
Pero el espíritu de sacrificio de vida sana sí que perdura en ti: hacer deporte, no beber, no fumar...
Yo hago lo que me gusta y no bebo ni fumo por el sabor, es algo que no me gusta. El deporte no es un sacrificio para mi, me viene fenomenal para liberar estrés y por eso es necesario en mi vida. No me cuesta trabajo hacerlo.
De los personajes que hay en la serie ¿cuál se parecería más a tu juventud?
No sabría decirte porque no se las aspiraciones de cada uno. En 'Física o Química' no se nos muestran las aspiraciones de ninguno de los chavales. En su día a día no me puedo comparar con ninguno. Con 17 y 18 yo tocaba la guitarra, pero no me veo como Quino porque él es muy bueno, no tiene picardía y yo era un poco más gamberrete (risas).
¿Qué te parecen las críticas que recibe la serie?
Yo he hecho botellón con mis amigos, pero a parte hacíamos más cosas. En la serie se ven los problemas que se viven en la juventud, pero es verdad que hay falta de dirección, falta de sueños. Defiendo 'Física o Química' porque aunque yo no he vivido muchas de las cosas que ahí reflejan no quiere decir que no ocurran. Soy de la idea de que aunque no ocurra en mi casa o en la del vecino las cosas existen. Hay un montón de gente alrededor que pasa cosas peores. Me creo todas las historias que pasan porque son posibles.
¿Qué es lo que más te llena de tu personaje de 'FOQ'?
Lo que más me llena de Berto es que es un tío de ideas fijas. El sale de la cárcel, no ha tenido amigos de verdad y en el momento que ha encontrado algo que quiere como Blanca o ahora la hostelería, va a por todas.
¿Crees que Berto va a tirar la toalla con Blanca ante su inminente boda?
Berto no puede tirar la toalla con Blanca mientras vea un resquicio. Mi personaje es muy sentido, muy sentimental y muy trasparente... hoy en día es muy difícil encontrarse a alguien tan trasparente. Tiene un punto de baja autoestima por falta de referentes y apoyos, pero poco a poco va encontrando su camino, lo que le gusta y lo que sabe hacer bien.
¿Le podríamos ver dando clases de Hostelería en el Zurbarán?
Yo creo que una Master Class sí que podría dar (risas).
¿Qué te parece 'Curso del 63'?
He visto algo del programa, no voy a decir que nosotros fuéramos mejor o peor que lo que hay ahora, pero sí que era diferente. Lo que he visto en las promos y eso me ha llamado bastante la atención.
Cuando vuelves a tu barrio, ¿cómo te ves?
Soy del sur de Madrid, he nacido y crecido en Orcasitas. La zona donde yo he pasado mi juventud era cuatro bloques y en medio había una plaza de arena con una mesa rota en el centro, un espacio para jugar. Ahí pasé los mejores momentos de mi vida, con mis amigos, jugábamos al fútbol, la gente paseando... el otro día me asomé a la terraza de la casa de mis padres y vi una plaza totalmente cambiada con columpios de última generación, asfaltada... pero no había nadie, sólo un grupo de chavales bien vestiditos, que yo bajaba de cualquier manera, muy pintadas las chicas, sentados y la primera frase que escuché fue "me debes cuatro pavos para el botellón". A lo mejor ese chaval está empezando una carrera o se dedica a algo más productivo que a lo que me dedico yo. Que conste que no lo critico, pero ha cambiado mucho y eso me llama la atención.
¿Sigues en contacto con tus compañeros y amigos del colegio?
Mis amigos del colegio siguen siendo mis amigos ahora. El ambiente que se generó en aquellos momentos en el colegio para mi es el que mejor recuerdo.
Siempre que estreno obra de teatro invito a un viejo profesor con el que tengo contacto porque me gusta que venga. Siempre es un honor volver al colegio donde crecí y donde lo pasé tan bien porque guardo buenos recuerdos de mis profesores.
¿Es diferente la relación que hay ahora entre alumno y profesor que la que había antes?
Sé que hay muchos profesores que tienen problemas de ansiedad por dar clase y su autoridad se ha visto disminuida casi al límite, es una pena. En mi época había de todo, cuando yo iba a EGB y BUP había profesores de todo tipo, pero guardo buenos recuerdos de mis profesores. No entiendo como un chaval puede pegar a un profesor, a mi lo máximo que se me pasó por la cabeza fue pincharle las ruedas (risas), pero nunca lo hice, era todo de boquilla. Agresión sea a quien sea, de alumno a profesor o viceversa, es mala. Cualquier tipo de agresión me parece mal.
¿De qué profesor guardas un recuerdo especial?
Hubo profesores a los que les hice un poco la vida imposible porque era un poco trasto, pero tengo buen recuerdo de casi todos. Con el que mejor me llevaba era con el de Biología, con el que sigo en contacto. Nos hacía estudiar lo que el quería que estudiáramos. Se preocupó por enseñarnos y hacer hincapié en lo que podía caer en el examen de Selectividad.
¿Eras de Ciencias o de Letras?
Quería Ciencias y siempre estuve entre Física o Química. Nunca pensé en las Matemáticas (risas). Empecé Químicas pero lo dejé. Luego me puse a currar como actor, al principio como hobbie, y poco después como profesión. Ser actor es el paso más difícil, ahora las Químicas han cambiado tanto que no podría retomarlo, también es cierto que ya no me acuerdo de mucho.
