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Telecinco precipitará durante el mes de agosto el final de 'Maneras de sobrevivir', emitiendo todos los capítulos grabados hasta la fecha. Así, el domingo 7 de agosto, la cadena repondrá a las 22:00 horas un capítulo de la serie '7 vidas', seguido por tres capítulos de estreno de 'Maneras de sobrevivir' (números 4, 5 y 6). De esta forma, la cadena agotará durante el verano todas las emisiones de su nueva serie.
'Maneras de sobrevivir', producida por Telespan, pretendía repetir el éxito logrado en cine por las comedias "Al otro lado de la cama" y "Días de fútbol". No obstante, la serie no logró convencer a los directivos de la cadena, que decidieron posponer su estreno hasta el verano.Telecinco estrenaba la serie el pasado domingo 17 de julio tras el último capítulo de la temporada de '7 vidas'. Un total de 2.403.000 personas, el 20,7% de la audiencia, siguieron el primer capítulo de la nueva comedia. El desplome llegó este pasado domingo en el segundo capítulo, que bajó hasta el 12,8% con 1.361.000 fieles. Es decir, en 7 días, 1.042.000 personas decidieron dejar de ver la serie, que perdió 7,9 puntos.
La desconfianza de la cadena en el nuevo producto se ha notado también a la hora de programarla: no sólo fue apoyada en su estreno por el último capítulo de '7 vidas', también en su segunda emisión por un especial de 'Latrelevisión', y en su tercera por un especial con lo mejor de Carlos Latre.
Así es 'Maneras de sobrevivir'
El protagonista de 'Maneras de sobrevivir' es Salvador (Juan Sanz), un chico de 33 años que sufre el derrumbe de su matrimonio cuando su mujer, Estela (María Esteve), se entera de que le ha sido infiel y que ha tenido como amante a su mejor amiga. Separado, con un hijo y con la obligación de pagar una pensión a la que no puede hacer frente, no le queda otra alternativa que regresar al lugar del que creía haber escapado: el barrio de su adolescencia.
La vuelta al barrio supone el reencuentro con sus amigos, un grupo de "perdedores" que no han logrado hacer con sus vidas nada en especial, pero que valoran su amistad por encima de todo. No son especialmente guapos, inteligentes ni brillantes, pero son capaces de perseverar en su sueño de formar un grupo de rock. Por sus amigos estarían dispuestos a hacer cualquier cosa: sobornar a un tribunal de oposiciones, robar un cerdo o amenazar a alguien con partirle las piernas.