'Curso del 63' ha cerrado sus puertas. Los alumnos de San Severo hacen balance de su paso por este internado.
¿Qué fue lo mejor y lo peor de tu estancia allí?
Lo mejor fue cuando vino la familia, y lo peor dormir, y ciertas incomodidades con algunas personas.
¿Repetirías la experiencia? ¿Se la aconsejarías a otros jóvenes?
Me pensaría más de una vez repetir la experiencia, ya que no es tan fácil como se puede ver desde fuera, y con gente que sepa adaptarse a esos años. Por supuesto que se lo aconsejo a otros jóvenes para que aprendan a valorar cosas de fuera, y ver que no es tan fácil como parece.
¿Cuál fue tu profesor favorito y por qué? ¿Y el peor?
Doña Julia, Doña Alicia y Don Luis en ese orden para mi son los mejores, el peor, pues yo lo siento, pero Don José, por el mero echo de expulsarnos con los cuadros cuando nos podía haber castigado.
¿Qué fue lo que más te sorprendió de los años sesenta?
Que el pan de molde se inventara en el 1964... eso me llegó...
¿Te gustó llevar uniforme?
No, para nada, y menos el pelo ese que nos hacían llevar. Pienso que con la ropa cada uno puede definir su estilo, y con uniforme no se puede, y con esas gafas menos.
¿Qué ha cambiado en ti tras tu paso por San Severo?
A controlar los impulsos, y no dejarme guiar por las influencias de nadie porque los actos de otro han llegado a perjudicar mí estancia en San Severo como por ejemplo haber estado hasta el final.
De tus compañeros ¿Con quién conectaste más?
De chicos Dani, y con las chicas Laura, Jenny, Carmen, Gema, Deseada y Claudia.