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Begoña Mencía y Ares Teixidó son las reporteras de 'Summertime', el programa que laSexta estrenó el pasado 10 de julio en prime time. Las dos jóvenes han hablado con FórmulaTV.com para contarnos cómo están viviendo el programa, la relación que hay entre ellas y cómo se ven cuando terminen las grabaciones.
Begoña Mencía: Son 50 minutos de reportajes muy dinámicos, cortitos y sobre todo muy frescos. Lo que principalmente nos vamos a encontrar son sensaciones. Veremos cómo vive la gente las cosas. Sobre todo, es muy cercano.
Ares Teixidó: Es un programa con dos reporteras que no sólo mostramos al espectador un plan ideal para este verano, sino que también lo vivimos y lo sentimos. Somos parte activa del reportaje. No sólo vamos a ver playa y arena. Nos alejamos un poco del tópico de los españoles bebiendo sangría y estando en el chiringuito tomando el sol. Intentamos recorrer España viendo otro tipo de cosas. Mostramos un poco los extremos. Vemos el lujo, pero también lo popular. No nos distribuimos tanto por zonas como por ambientes. No es el mismo ambiente el de una playa que un hotel de cinco estrellas que pueda estar al lado de esa playa.
¿Qué le va a diferenciar del resto de programas de este estilo?
BM: Lo que vas a ver es lo que quieres saber cuando estás viendo otros programas en tu casa. Al ser tan cercano y tan curioso recibes lo que estás buscando. La diferencia también está en que somos dos reporteras y además preguntamos mucho.
AT: Lo que marca el programa somos Begoña y yo. Es la principal diferencia. Somos dos reporteras que salimos en pantalla, y eso no siempre ocurre. Tenemos la suerte de no tener un guión estipulado. Simplemente somos dos chicas muy diferentes entre nosotras y que podemos ser como somos porque no tenemos a nadie que nos diga qué es lo que tenemos que buscar en un reportaje en concreto. Somos nosotras con nuestras curiosidades y nuestra forma de ser. No es lo mismo un reportaje mío en Igualada a como lo podría hacer Begoña. Ella con su forma de ser lo haría distinto.
BM: Tenemos dos equipos: el de Madrid, en el que estoy yo; y el de Barcelona, en el que está Ares. Los de Madrid hemos visitado Marbella, Valencia, Barcelona y ahora nos vamos a Almería, pero por culpa de un accidente de moto que he tenido, hasta la semana que viene no vamos a poder hacer nada. Afortunadamente, fue poca cosa y vamos a poder seguir grabando con normalidad.
AT: Intentamos que durante los ocho programas que vamos a estar en emisión en laSexta quede reflejada toda España. Hasta ahora llevamos unos dos meses trabajando. Yo soy la reportera del equipo de Barcelona y he recorrido toda Cataluña, me fui a Ibiza, a Andalucía... y seguimos yéndonos de viaje pero no sé ni donde voy a ir la semana que viene (risas).
¿Qué situaciones intentáis reflejar?
BM: Ésta es otra de las diferencias con el resto de programas de verano. No hay sólo playa, piscinas y fiesta. Aparte de esas tres cosas, hay música, hoteles, deporte, personajes... Los reportajes reflejan la forma de vida de algunas personas. Hay un poco de todo: desde acompañar a un grupo de música para ver cómo vive el momento en que se está tomando unas cañas y después se sube al escenario del Rock in Río hasta cómo vive una gogó o una multimillonaria.
AT: Hay un poco de todo porque en verano hay tiempo para todo. No le damos tanta importancia al marco de la situación, que en la mayoría de las ocasiones es inigualable; sino más a la gente. Hablo de un amanecer o un atardecer en sitios tan diferentes como una fiesta, un hotel de cinco estrellas o en una playa alejada en Ibiza. Son situaciones increíbles, pero nos sirven como contexto para buscar a esa gente que hace especiales las situaciones. A veces nos encontramos con gente que, a simple vista, no parecía gustarle que estuviésemos por allí y después nos vamos con la sensación de que podríamos hacerle programas enteros a esa persona.
¿En cuáles os lo estáis pasando mejor?
BM: Me lo estoy pasando muy bien con todo porque estoy descubriendo cosas diferentes. Lo movido tiene su gracia, aunque acabas hecho polvo. Los otros son más tranquilos, como ir a una exposición fotográfica, pero también me parecen muy interesantes. Como hay un poco de todo, no nos cansamos.
AT: No me quedo con nada porque me gusta todo. Tengo la suerte de estar viviendo un verano que sería un sueño para cualquier persona. Estoy haciendo de todo. Miro hacia atrás y veo que he estado en todos los sitios habidos y por haber. La semana pasada, por ejemplo, estuve en la playa, fui a una fiesta de cócteles, etc. Pienso y digo: es un verano perfecto. Me gustan las playas, me gustan las fiestas, la tranquilidad, los hoteles... Un poco de todo.
¿Os estáis implicando mucho en los reportajes?
BM: La verdad es que sí. El otro día estuvimos grabando en la playa de Barcelona. Estuvimos haciendo mortales y dije: "es fácil". ¡Al final acabé en la Cruz Roja! (risas). Todo lo que hacemos es intentar vivir con el personaje lo que él está viviendo, y esperamos que eso sea lo que haga la gente desde casa. Estarán viéndolo y no estarán ahí, pero les llegará muy fácilmente. No es como si estuvieras haciendo submarinismo, por ejemplo, pero lo hemos hecho de una forma en la que el espectador lo disfrutará igual aunque no esté ahí.
AT: Nos estamos implicando al máximo. Vamos con buen rollo porque no es un programa de denuncia, y al buscar eso nos podemos involucrar más. Buscamos la diversión, y no nos olvidemos de que es verano. La gente en estas fechas está mucho más abierta, tiene un tono mucho más desenfadado. Lo llevamos bien por eso. Es un programa muy "fresquito", muy veraniego y muy limpio porque todo el mundo está de buen rollo. No es lo mismo coger a alguien que va a trabajar un lunes por la mañana con su traje que si le ves en la playa. Tiene "actitud de bañador" y está más tranquilo. Además, en este programa estamos comprobando que en la playa no hay crisis. Es otro mundo. Es verano y la gente nos permite acercarnos más a ellos.
¿Son muy diferentes los reportajes de cada una?
BM: Cada una hace un reportaje distinto, nunca juntas. Y además, tenemos un estilo diferente, aunque el humor y la naturalidad siempre están en los reportajes. Evidentemente, hay diferencias, pero también hay ingredientes que están en las dos.
AT: Somos muy diferentes. Una complementa a la otra y así sale el genial resultado que se emite. Begoña, en según qué momentos, es mucho más formal y más correcta. Yo tengo un punto más "punkie", probablemente por mi edad, que me hace ser más guerrera. Begoña lo tiene también, pero tal vez no tanto porque tiene esa corrección. Es más risueña que yo y no tan alocada.
¿En ningún reportaje estáis las dos juntas? ¿Siempre hacéis reportajes independientes?
BM: No hemos hecho ninguno, pero se podría proponer. Se tienen que cubrir muchas zonas y aprovechamos para diversificarnos.
AT: Prácticamente, no nos vemos. Tenemos contacto por teléfono. Yo pienso mucho en ella y ella piensa mucho en mí, pero todo por separado. Yo estoy viviendo un verano y ella está viviendo otro distinto, y los dos son el verano de ensueño de cualquier español. Pero intentamos, aunque estemos cada una por nuestro lado, hablar entre rodaje y rodaje. Begoña es mi confidente, pero en los últimos meses nos hemos visto dos veces a pesar de que somos las dos de Lleida y ya nos conocíamos. Ella tiene una zona y yo otra, y el contacto es básicamente por teléfono. Creo que eso es básico.
¿Qué historias os han llamado más la atención?
BM: Por ejemplo, en Marbella estuvimos con una mujer que tiene mucho dinero y descubrimos su forma de vida y justo después vivimos unas horas con el grupo Mägo de Oz, algo muy diferente. Son muchas historias con las que me estoy quedando. Recuerdo también una persona que se dedica a alquilar coches de lujo y barcos, pero que no vive como la millonaria de Marbella, o cuando estuvimos en el Orgullo que fue impresionante ver a un millón de personas llenando Gran Vía mientras nosotros íbamos en una carroza. Creo que ha habido mucho acierto con el encuentro de personajes y el encuentro de historias. Son todas muy diferentes entre ellas y muy variadas. No te da tiempo a aburrirte ni tampoco te paras a pensar cuál te gusta más porque nos gustan todas.
AT: Me gustó mucho cuando me encontré comiendo en el restaurante de Sant Pol de Mar de Carme Ruscalleda, que tiene tres estrellas Michelín. Es la única mujer del mundo que tiene cinco estrellas Michelín, tres por este local y otras dos por otro que tiene en Tokio. De repente, me encuentro ahí y tengo la suerte de poder catar el menú degustación que ofrecen en este restaurante, que no quiero ni pensar lo que vale. Es un momento en el que te paras a pensar, porque es corto pero intenso.
También recuerdo cuando fuimos a una playa de Ibiza y vimos el atardecer con unos chicos que despiden al sol de una forma muy peculiar con unos timbales y bailando. Se crea un rollo muy bueno en una cala donde de repente estás sentada tranquilamente para ver cómo se esconde el sol. Son momentos que te hacen sentir muy viva. 'Summertime' es muchas veces encontrarte con el gusanillo en la barriga de no saber si vas a poder hacer lo que quieres grabar, y al final hacerlo. Cosas que no había vivido antes y que era impensable que fuera a hacer. Cada día hay alguna historia especial. Cuando me voy a la cama pienso en todo lo que he hecho y recapacito porque hay días realmente buenos.
Lo mejor de todo está siendo la relación con la gente, no las historias en sí. Hace poco grabamos la elección de "Míster España Gay 2010" y al día siguiente me los encontré y cómo si me conocieran de toda la vida. Te pasas un día entero con ellos y el rollo es muy natural.
BM: Yo creo que es un buen horario. Por suerte, ya ha terminado el Mundial y lo vamos a tener mejor, porque si no hubiera sido más complicado. Coincidimos con programas bastante potentes, pero es muy diferente a ellos. El horario es bueno y la gente tiene ganas de ver algo diferente. Creo que vamos a estar ahí dando caña.
AT: Sí, no creo que sea mal día. Mi planning de sábado por la noche es, con los tiempos que corren y con la crisis, quedarme en casa de algún amigo y poner la tele. Si hay algo que nos gusta, muchas veces la cena transcurre en torno a comentar lo que estás viendo. Si no te interesa, lo normal es que bajemos el sonido y sigamos hablando. Pero yo creo que es bueno para eso. Se puede ver el programa con tu grupo de amigos o tu familia mientras cenas, y luego irte de fiesta. Cuando me dijeron que íbamos a ir en esa franja, no me pareció mal por eso.
Si triunfa, ¿os veis dando el salto internacional como ha ocurrido por ejemplo con 'Arena Mix'?
AT: Por gustarme, me gustaría. Pero es una asignatura pendiente que tengo porque tendría que mejorar mucho mi inglés. Ojalá 'Summertime' siguiera en invierno y también saltáramos fuera de las fronteras como ha hecho 'Arena Mix Internacional'. Pero en mi caso, he de ser honesta, y tengo que mejorar eso. Cuando acabemos de rodar lo primero que haré es irme fuera para mejorar mi inglés.
¿Te gustaría verte tras 'Summertime' en otros programas de laSexta como le ha ocurrido, por ejemplo, a Paula Prendes?
Ojalá. Lo peor de este programa es que se acaba el mes que viene. No sé si continuaremos tras el verano modificando el programa. Depende de la audiencia, pero me gustaría hacer un 'Otoño Time'. En principio, es un formato creado para el verano, y si funciona a lo mejor sí. Nosotras terminamos de grabar en un mes. Si luego me puedo quedar en laSexta, bienvenido sea. Es un canal que me gusta y donde se hacen cosas que van conmigo.
AT: Lo que espero y deseo es seguir trabajando, que me den la oportunidad de seguir haciendo lo que hago ahora y como lo hago ahora. Me gustaría mucho seguir en laSexta porque es una cadena que me encanta. Sería genial terminar, por ejemplo, en 'Sé lo que hicisteis'. Es un programa que como espectadora disfruto muchísimo y no me imagino lo que sería estar dentro. Pero lo que me importa ahora es que a mediados de agosto, cuando acabe con 'Summertime', me voy a coger unos días de vacaciones, pero espero que sean pocos porque querrá decir que en septiembre vuelvo con algo y con la misma fuerza y las mismas ganas.
AT: En los dos me he sentido muy bien. No hay nada de lo que he hecho hasta ahora que me haya hecho pensar que estuve mal. Tengo muy buen recuerdo de los dos porque adoro mi trabajo. La diferencia con 'Mientras duermes' es que eran reportajes de noche, lo cual puede que me limitara más. Las cosas que vivo en 'Summertime' puedo hacerlas las 24 horas del día. No me limita en cuanto a horarios.
En 'Mientras duermes' estaba encantada y disfruté muchísimo. Creo que hicimos un gran trabajo. Estuve muy bien, igual que estoy ahora. Me encanta la calle y en estos programas me siento muy cómoda.
Has trabajado tanto en tele como en radio. ¿Te sientes más cómoda delante de una cámara?
AT: Es difícil elegir, pero creo que prefiero la televisión. Me gusta mucho más, pero de la radio guardo muy buenos recuerdos también y no descarto volver cuando pueda allí. Son medios muy diferentes. La tele me aporta mucho más, pero cuando estaba en la radio no la echaba de menos. Ahora estoy tan encantada con 'Summertime' que tampoco echo de menos la radio. Pero sí es verdad que, sobre todo en las madrugadas de Onda Cero, con la luz tenue en el estudio, mis cascos y el micro, era la más feliz del mundo. Pasaban las horas y no necesitaba nada más. Pero, como soy un "culo inquieto" que hoy estoy aquí y mañana allí, no sé lo que va a pasar.
Begoña, estuviste también de reportera en 'En ruta con la guía'. ¿Es muy diferente tu papel aquí?
En 'En ruta con la guía' me centraba más en los lugares. Aquí descubrimos personas, así que todo es diferente. Estuvimos con una señora en Palencia que tiene un restaurante con una estrella Michelín. Pasamos el día con ella y nos habló mucho de su vida. Me emocioné mucho. En 'En ruta con la guía' no nos hubieramos centrado en la historia de la mujer, sino en el lugar donde estábamos, y ahora he podido darle este nuevo enfoque. Cambia mucho el reportaje de esta manera.