Programa relacionado
También ha querido tratar temas relacionados con 'Las joyas'. González afirma que la situación de la educación pública en España no es preocupante porque la culpa es de la gente que no se lo toma en serio. Asegura tener una gran consideración de su compañera Carmen Lomana, y cree que hay muchos tipos de aristocracia que no deben ser seguidos como modelo.
¿Cómo te enfrentas a un proyecto como 'Las joyas de la corona'?He llegado con la ilusión de estar en un programa que es diferente. Eso, hoy en día en televisión, da un plus de entusiasmo porque llevo muchos años en el oficio y géneros y contenidos nuevos no hay tantos. Por otra parte, me hace mucha gracia esta combinación surrealista de pijas y chonis, gente con mundo y gente que no ha subido nunca a un avión... Me hace gracia por el contraste, pero no me río de ello. También el hecho de tener que arbitrar en un plató con tanta gente "me pone". Tanto, que he renunciado este verano a vacaciones para hacer el programa. Mi disposición es total.
¿Qué piensas de Carmen Lomana?
Carmen me parece un ser irrepetible. Me gusta porque dice lo que piensa, aunque casi nunca piensa lo que dice. Es espontánea y fresca. Espero y deseo que el tiempo no la cambie y siga siendo así. Dice las cosas como son, como ella las ve. Está bien porque es políticamente incorrecta. No es, en este sentido ni en ningún otro, una hipócrita.
¿Cómo esperáis que sea el ganador?
Espero que sea alguien que aproveche el tiempo y la oportunidad que tiene de prepararse para enfrentarse a situaciones complicadas a nivel social. Quiero que saque partido de esta experiencia. Así va a ser el ganador porque son los propios profesores los que determinan quién merece, por lo bien que ha aprovechado las clases, llevarse el premio.
¿Por qué no tienen un papel más decisivo los espectadores de 'Las joyas de la corona'?
El programa se ha diseñado para que todo lo que ocurra tenga lugar en la escuela y el plató. El formato no contempla ni expulsiones por parte de la audiencia ni que elijan al ganador. El espectador hace de espectador.
¿En qué asignaturas de las que se imparten en la escuela crees que detacarías?
En ninguna. Tengo el conocimiento que me da la experiencia. Hace 20 años no tenía ni idea de cómo usar un cuchillo de pescado y ahora he aprendido porque he tenido que usarlo. Lo haces muchas veces por obligación. Ya tengo una edad y he tenido que ir a muchas bodas y eventos, y no te queda más remedio que saber desde la disposición de los cubiertos hasta el orden de las copas; o dónde hay que poner el agua y dónde el cava.
Todo eso me lo ha dado la experiencia. Nunca he ido a una escuela de modales y no me considero capaz de impartir esa docencia. No soy experto. Tampoco de oratoria. Hay muchísima gente que habla con más y mejor vocabulario que yo porque ha leído más y ha aprovechado más. Soy un periodista que presenta programas de televisión, no tengo más.
¿Qué tipo de comportamientos corregirías en los demás?
Me da grima, por ejemplo, la gente pedante. Esa gente que sabe un poco de algo y tiene que lucir cada vez que puede sus pocos conocimientos. Me repelen bastante. Tampoco puedo con los cursis. Los desterraría directamente. Van de algo que en realidad no son.
¿Cómo definirías tu estilo personal?
Mi estilo se basa en una higiene extraordinariamente meticulosa. Luego procuro, como todos, ponerme la ropa que creo que me da mejor aspecto. En la tele, me dejo aconsejar porque tengo una estilista buenísima. En la vida, elijo yo la ropa. Me gusta ese tema y gasto mucho dinero. Trabajo en la tele. Si fuera actor de doblaje, seguramente gastaría menos.
¿Qué famoso crees que necesitaría clases de protocolo, de educación, de oratoria...? ¿A quién meterías en una escuela como ésta?
Al 90% de los famosos que por dinero van a hacer el show a los programas de televisión habría que pulirlos. Casi todos los que por dinero venden a su padre, su hermana o la gente con la que se han acostado. Necesitarían no sólo una escuela de glamour, sino probablemente un reformatorio desde mi puntos.
Carmen declaró que creía que el programa era una muestra de lo mal que estaba la educación pública en España. ¿Compartes su opinión?
No sé cómo está la educación pública en España. Hace mucho que no la piso. Me eduqué en escuelas e institutos públicos. También en la universidad. No creo que sea peor en España que en Alemania, Francia o Estados Unidos. La educación en españa es obligatoria y gratuita, pero luego hay gente que no va a clase. También hay gente que va a clase y no atiende, o que va muerta de sueño o "emporrada". ¿De quién es culpa? ¿De la educación? ¿O de que vas a clase hecho polvo o no te interesa nada de lo que te están contando?
No me parece que haya que achacar a la educación pública española el hecho de que haya personas con carencias culturales. También las hay en países como Suecia o Noruega que son el paradigma de la educación. Creo que la mayoría de la gente no es así. La mayoría de la gente ve una foto de Angela Merkel y sabe quién es. O ve una foto del Dalai Lama y sabe reconocerlo. No lo confunde con el chino de su barrio. Estoy seguro de eso.
¿Es compatible pertenecer a una clase baja o media-baja y comportarte con modales?
Se trata de saber estar en los sitios. No sólamente en cenas donde hay 80 cubiertos por persona. Se trata de poder desenvolverte con una cierta soltura en una entrevista de trabajo, que es una cosa que tarde o temprano todo el mundo tiene que hacer. Los concursantes tienen entre 18 y 25 años. La mayoría no trabaja, pero creo que quiere hacerlo. Les enseñamos a prepararse para la entrevista a nivel estético y de imagen, qué decir, cómo plantear su discurso... Son herramientas que les resultarán prácticas cuando salgan de la escuela. No se trata de que se comporten como la aristocracia. Hay aristocracia que se comporta de manera ejemplar, que es la que no es popular como por ejemplo la familia del Conde de Godó; y también hay aristocracia que da un poco de pena, como por ejemplo la Baronesa Thyssen. Es aristócrata y mírala. Qué cosa tan hortera.