Francisco Santiago, alcalde de la localidad de Telde en Gran Canaria, ha reclamado al gobierno de Canarias y al de España que actúen contra la miniserie que Telecinco está preparando sobre el accidente de avión de Spanair ocurrido en Barajas hace ahora dos años. Asegura que es "innecesaria" y "no aporta más que dolor a las familias y repudio al resto de la sociedad".
El mandatario se ha erigido como portavoz de su pueblo, lugar de donde eran algunas de las víctimas fallecidas en el siniestro. Advierte de que el proyecto es "insensible" con decenas de familias canarias y cuestiona que se le permita a la cadena realizar unn proyecto así mientras aún no se han aclarado judicialmente las responsabilidades del accidente. Lo compara con el 11S, atentado del que no se pudo hacer ninguna película o serie hasta años después por decreto del gobierno de George Bush.El alcalde ha manifestado estas palabras en un comunicado en el que además reclama a Paulino Rivero, presidente canario, que presente una reclamación a Telecinco y se dirija a la Administración Central del Estado para tomar las medidas legales necesarias para impedir la emisión de la miniserie que produce Mecanismo Films.
Las víctimas tampoco están conformes
El alcalde de Telde no es el único que se ha manifestado en contra de la miniserie sobre el accidente de Spanair. Como ya informó FormulaTV.com, la Asociación de Afectados del Vuelo JK 5022 presentó una queja a Telecinco en el que aseguraban que no le ofrecían ni su "consentimiento personal" ni su "permiso moral". Aseguraban que Telecinco vulneraba la intimidad y la propia imagen de las víctimas, además de los derechos morales de los afectados que están "luchado para honrar su memoria".
Además, avisaban de que si fuera necesario tomarían las medidas legales oportunas y creían que el proyecto podía resultar engañoso para la sociedad porque carecía de la necesaria seriedad y verdad. "La Constitución nos hace iguales, pero nuestros derechos, como ciudadanos afectados por esta tragedia que nos ha marcado la vida, se verán pisoteados por el ejercicio de una hipotética libertad de expresión tras la que se esconde un reprobable y condenable afán materialista", concluían en su comunicado.
