Borja Capponi regresa a la parrilla de Cuatro. El coach sobre conducta canina vuelve con nuevos casos en una segunda temporada. En la primera temporada la cadena emitió un total de 7 entregas. Aunque la productora grabó más programasa debido a los partidos de fútbol del Mundial de Sudáfrica la cadena no tuvo más remedio que guardar esas entregas que ahora emitirá en una nueva etapa.
En esta nueva temporada de 'Malas pulgas', el educador canino tendrá que vérselas de nuevo con perros fuera de control, todo un desafío para este experto en conducta animal, que, como en ocasiones anteriores, dará con la solución en tiempo récord.
'Malas pulgas' presentará a lo largo de 50 minutos tres casos en los que se trabaja tanto con los animales como con sus dueños. Cada programa analizará las particularidades de cada caso, el tipo de perro y el entorno en que vive, y ofrecerá unas pautas básicas que ayudarán a corregir su comportamiento. Todo esto es posible gracias al talento natural de Borja Capponi para empatizar con los animales. Su método natural, en el que prima la genética de la mascota, desactivará, una vez más, a los perros con Malas Pulgas...
En el primer programa
Un perro estrella, cuya dueña es todo un personaje. Anakin, como se llama esta chihuahua, tiene hasta página en Facebook y acude con su dueña a los acontecimientos sociales y de espectáculos más rutilantes de Madrid. Pero la fama se le ha subido a la cabeza. No deja que nadie se acerque a su dueña, quien le mima y cuida de manera insólita, con un vestuario propio, un dormitorio digno de una princesa y los accesorios más fashion del mercado.
En otro entorno, un idílico valle navarro, perros y gatos se mostrarán como enemigos irreconciliables. Por último, una perrita y una fobia que no le deja vivir en paz ni a ella ni a sus dueños. Estos son los primeros casos de la segunda temporada de Malas Pulgas.
Babel, pánico en la calle
Ana y Fernando recogieron a una preciosa perra de la calle llamada Babel. Pronto vieron que Babel tenía un problema sobre todo en la calle: cada vez que oye un ruido de cualquier tipo se asusta y quiere salir huyendo. Esto provoca que pasearla sea un infierno para Ana, algo que se acabó convirtiendo en un verdadero problema para la pareja, que acabó separándose. Borja empieza la rehabilitación de Babel enseñando a Ana a manejar bien la correa. Cuando ya está preparada dirige a la perra directamente a la guerra: a una calle en obras. Con una buena dirección la perra aprende a reaccionar mejor ante los ruidos, y Ana se sentirá capaz de pasear con sus dos perros a la vez.
Alai y Luna, la verdad sobre perros y gatos
Gure Sustraiak es una preciosa granja escuela en el valle del Ollo, Navarra. Allí viven Raúl, Gorka y Pedro en armonía con sus animales. Armonía sólo interrumpida por las continuas cacerías de sus perros Alai y Luna que no consienten que los gatos hagan también su trabajo en la granja. Borja tendrá que emplearse a fondo para conseguir reprimir el primario instinto de los perros por perseguir a los gatos. Lo primero es relajar a los dos perros, que están acostumbrados a dominar el territorio de la granja y a estar en permanente estado de alerta. Una vez más tranquilos llegará el momento de que Alai y Luna se encuentren con su ancestral enemigo, el gato, de una manera distinta.
Anakin Superstar
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La relación de Anakin con su dueña Carmen es muy distinta a las demás. Además de la dueña de la perrita, Carmen es su representante artística. Y es que Anakin es una preciosa chihuahua modelo y habitual en acontecimientos sociales de perros. El problema es que la fama se le ha subido a la cabeza y se comporta como una diva agresiva con todo aquél que se le acerca. Lo más difícil para Borja en este caso será acabar con la dependencia que Anakin tiene de su dueña, y con la forma tan humanizada que Carmen tiene de tratar a su perro. Por suerte, a Carmen no le costará mucho trabajo darse cuenta de que ha impedido que su perro se comporte como tal, y que por eso no se relaciona con sus congéneres.