El historiador José Liberto López de la Franca se ha encargado durante todo este verano de enseñar oratoria y protocolo en la escuela de 'Las joyas de la corona'. En la actualidad, es el jefe de la casa del polémico infante real Leandro Alfonso de Borbón, personaje del que Telecinco prepara también una TV movie.
El profesor se muestra satisfecho de su paso por el programa, aunque no comparte la dinámica que finalmente se ha llevado a cabo. "No me pareció bien eliminar cada semana a uno de los chavales porque interrumpíamos su formación". Asegura estar dispuesto a seguir "formando joyas", pero tiene muy claro que no repetiría la experiencia si no se dieran las condiciones para evitar enfrentamientos como los que se han dado en esta primera edición. "Debo de decir que no estoy muy ilusionado". Critica además que "la sombra envidiosa de los profesores se unificó para que estuviera marginado".
Finalizado ya el reality show e iniciada ya la nueva temporada, FórmulaTV.com ha querido charlar con el ex profesor de 'Las joyas de la corona' para analizar su paso por el programa y conocer ahora sus impresiones sobre el formato.
¿Cómo valoras tu paso por 'Las Joyas de la corona', una vez finalizado el programa?
Yo hubiera hecho otro tipo de programa. No me pareció bien eliminar cada semana a uno de los chavales porque interrumpíamos la formación que estábamos intentando inculcarle a cada uno de ellos. El proyecto de esa joya se quedaba a medias, y Lara que fue la última, salió más preparada que Pablo que fue el primer expulsado. El programa podía haberse mejorado, pienso que ha sido un meteorito.
¿Crees que se han completado todos los objetivos iniciales?
No, porque me hubiera gustado incidir en algunas materias y haberles enseñado muchas más cosas que por falta de tiempo no ha podido ser.
¿Qué tal te has sentido enseñando y normas de protocolo por televisión?
Muy bien. El protocolo es algo glorioso pero también es cruel porque es la careta que se ponen muchas personas y la imposición de una dictadura para colocar a las personas, que realmente pueden valer o no valer, en el lugar que no les corresponde. Esto no es glamour, esto es una escuela de la elegancia y del humanismo, cuyas enseñanzas nunca se han dado en televisión. Por todo ello me siento satisfecho al haber podido participar en este tipo de programa.
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¿Qué tal te ha aportado personal y profesionalmente este trabajo?
Muchísimo. He conocido a Carmen Lomana, a todos los profesionales de Zeppelin y todo el alumnado que ha conformado el programa. Me ha enriquecido muchísimo humanamente e intelectualmente, mucho más de lo que podía imaginar y, sin duda, ha sido el detonante que ha hecho que pasara de ser una persona medianamente conocida como escritor y como Jefe de la Real Casa Borbón Austria a una persona mediática y salir en la televisión. Sabía a lo que me sometía y sabía que esta situación iba a suponer un antes y un después en mi vida.
¿Te gustaría volver a repetir la experiencia?
Bueno, si volviera a repetir la experiencia seria de modo distinto y sólo si se dieran las condiciones para evitar enfrentamientos y circunstancias que han hecho ciertas desavenencias provocadas a los alumnos y al profesorado. Debo de decir que no estoy muy ilusionado en volver a repetir, más que nada por la situación que se me ha dado en momentos muy puntuales en el plato y en el profesorado. Sin embargo, formar joyas lo haría todas las veces que fuera necesario.
En las últimas semanas hubo una gran tirantez con el resto de profesores, especialmente con Nacho Montes. ¿Cuál fue la verdadera razón?
Bueno, la razón creo que es obvia para quienes hayan seguido el programa. El magisterio necesita un militar, no un "terrorista", y en el proceso de enseñanza, se requiere un respeto al alumnado que debe quedar impoluto; si nosotros enseñamos buenas maneras debemos dar ejemplo. Cariño, confianza y disciplina, son la base de la enseñanza, y la disciplina no es vejar, ridiculizar e ironizar, es hacerle ver por la naturaleza de la bondad lo que son todos los principios de la vida. No hay que perder los papeles y por ello no he estado de acuerdo y he chocado con esta persona.
Habéis llegado a "atacaros" en diferentes programas de Telecinco ¿No es contradictorio esos ataques con los buenos modales?
No llegué a atacar, solo quería poner a una persona donde se merece, denunciar esas salidas de tono y comportamiento ya que no es lo que queremos ver en esa enseñanza. Juan Domingo Perón dijo una vez "La violencia que mana del pueblo no es violencia, es justicia".
Parece que Nacho Montes la tomó contigo...
Esto es importante. Nacho Montes y el resto de profesores se creían que por entrar a 'Gran hermano' o ser Miss Mundo pensaban ser mediáticos. Yo no era mediático, y yo estaba dispuesto a dar mucho juego. Todos los alumnos se me acercaron y me dijeron tras las cámaras "Liberto, nos hemos dado cuenta de que te están marginando" y uno se da cuenta de que el fallo no es tuyo, sino que la sombra envidiosa de los profesores se unificó para que yo estuviera apartado. Hay una compensación: la gente me para, me pregunta, me saluda y me da ánimos.
¿Te parece justa ganadora Azahara?
Sobre justicia no hay nada escrito. No era mi candidata. Los profesores no podemos responder de una formación determinada. Si ha ganado Azahara ha sido porque ha sido la más astuta o la más limpia. En el reino de los ciegos, el tuerto es el Rey. Azahara entró como una diplodocus de la ordinariez y ha salido como una chica mucho más refinada, dándolo todo por su hija tal y como dijo al principio del programa.
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¿Crees que es la persona que realmente se merecía el título?
Mi candidato era Julián, pero cometió un gran error. Luego cambié a Pepe o a Jorge, los dos me parecían buenas elecciones.
Tras el programa... ¿ahora qué? ¿Qué va a hacer Liberto tras 'Las joyas de la corona'?
Pues voy a seguir con mi trabajo, escribiendo, viajando, estando al servicio de su Infante de España y si voy a la televisión no será para conversar en debates frívolos, sino será porque realmente tenga algo importante que decir. He comprado una serie de libros sobre los Borbones, otros sobre glamour, otro sobre protocolo y quiero seguir aprendiendo. Tengo algunas ofertas para trabajar en televisión y otros medios, pero mi cargo tiene prioridad ante todo.
Se ha criticado al programa y se ha dicho que ha habido grandes favoritismos tanto por parte de profesores y, sobre todo, por parte de Carmen Lomana...
Yo si he tenido algo, y es que he querido a todos por igual. He tenido un contacto con todos y no he pretendido tener más acierto con unos que con otros. A unos no se les pueden regalar cinturones por valor de 1.500 euros y a otros llevarlos al Jarama. Yo entiendo la estructura del programa, pero como espectador no estoy de acuerdo que se le compense a ciertos alumnos y a otros no. De ir a Ibiza y dar un paseo por Chueca hay un trecho.
¿Que es lo que más te ha llamado del programa? ¿Con qué te quedas y qué descartarías?
Ha habido muchos momentos preciosos, uno de ellos fue cuando al "humilde profesor" se le dio una lección por parte de una alumna sobre la descripción de qué es ser una madre. Hay muchos momentos con los que me quedo. Situaciones que no me han gustado son los momentos en los que oyes las ordinarieces y barbaridades que decían estos chicos. Sin embargo, han aprendido a perdonarse y a saber ser ellos mismos desde un punto de vista mucho más respetuoso.
¿Ha sido la experiencia tal y como al preveías en un primer momento?
Bueno, cuando me llamaron para hacer este programa, dije que no, sin embargo, insistieron muchísimo, asegurando que esto no iba a ser un 'Gran hermano' y que iba a haber seriedad. Cuando salgo a la calle la gente me saluda, quiere hacerse fotos... y eso sí que es algo que no me esperaba. Las chicas han sido las más entregadas a pararme por la calle, pasando algún que otro momento curioso. Muchísimas son las peticiones de amistad que tengo en el Facebook y cada día me quedo sin habla al observar la pantalla del ordenador.
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¿Cómo ves de modales a la gente de la tele? ¿Sobra o falta educación?Falta muchísima. Vivimos en la carencia y en la época de la cultura y la educación inexistente. Falta pensamiento y la culpa es sin duda del abandono de las personas. Hay mucho miedo e incultura por muchos frentes y el mundo de la televisión es en gran parte un espejo de él.
¿Algún ejemplo?
Nada más pongas la televisión en cierta cadena y a determinadas horas. Quien viva en igualdad y honestamente, estará conforme en la vida, en la tele no se vive de esa forma y se hace un daño irreparable constante y continuo a muchas personas. Utilizar la tele para ello es denigrante.
¿Es Carmen Lomana tal cual aparenta en televisión?
Carmen Lomana es una mujer que vive enamorada de una estrella que brilla en el cielo, Guillermo Capdevila, su único y verdadero amor. Es una mujer esencialista y que piensa lo que dice. Es una mujer con muchas aristas, que puede parecer vacía, sin embargo, tiene unos principios muy sólidos. Ella es muy fiel a sí misma, es divertida, generosa, auténtica y que despierta muchas envidias. Es espontánea y si le parece que tal persona importante y respetada está mal vestida, ella lo dice. Es una mujer sorpresa, no para de girar el timón. Es una gran conocida y a la vez una profunda desconocida.
¿Y Liberto? ¿Cómo es Liberto?
Es una persona afable, con una permanente lucha por ser el mejor. No tolera la hipocresía y la falsedad, es amante de la cultura, y súbdito del respeto. Siempre estoy intentado superarme y mi ilusión es no triunfar en el sentido de ganar dinero, porque el triunfo es mirar atrás en un momento y ver que has sembrado cosas. El triunfo es que digan tu nombre y se dibuje una sonrisa en la cara de la persona. Yo me he hecho a mí mismo, y todo lo que le debo a la vida son producto de mis padres; su humildad, su cariño y apoyo han hecho que esté donde esté. Liberto es una persona cercana y afectiva que desconecta con el sexo, viajando y leyendo. Es una persona normal con defectos como todo el mundo.
Y por curiosidad... ¿Escuchar Camela es glamouroso?
No, eso es atentar contra la dignidad directa del mal gusto. Camela y los que siguen a Camela hacen más daño que Pinochet a una democracia.
¿Se puede ser glamouroso sin tener dinero?
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Por supuesto. Coges a una chica del extrarradio, la vistes con cuatro trapos y puede perfectamente ser glamourosa, como también puedes coger a cualquier señora del barrio de Salamanca y verla vestida horriblemente con cara de malfollada. El glamour no se consigue con dinero, es algo natural con lo que se nace. No por ser hija de una duquesa, tiene que ser glamourosa. Si ponemos a una Carmen Lomana con cuatro harapos seguirá siendo glamourosa. El glamour son valores, cultura, madurez y elegancia, no es algo que se pueda comprar.