La nueva tv-movie que Antena 3 estrenará próximamente está protagonizada por Belén Rueda, Hugo Silva y Eduard Fernández y dirigida por Belén Macías, nominada a cuatro Premios Goya por "El patio de mi cárcel" y galardonada con el Premio de la Academia de las Artes y las Ciencias de la Televisión a la Mejor Realización por 'La Señora'.
El reparto de la producción lo completan, entre otros, Roberto Enríquez, Michelle Jenner, Nathalie Poza, Álex Angulo, Pedro Casablanc, Petra Martínez, Nuría Mencía y Ferrán Rañé. La miniserie, de dos capítulos, se ha rodado con cámaras RedOne para su emisión en HD.Documentación y localizaciones
El equipo de producción de la miniserie ha realizado una gran labor de documentación para poder reflejar de la forma más realista posible (con pequeñas licencias artísticas) cómo eran el vestuario, el maquillaje y la peluquería del siglo XVI. Para el rodaje de 'La princesa de Éboli', se trajeron expresamente pelucas y postizos desde Italia y se hicieron más de 100 cambios de vestuario.
La nueva tv-movie d Antena 3 se ha rodado en localizaciones como el Palacio Ducal de Pastrana, donde estuvo retenida y prisionera la princesa de Éboli; el Castillo de los Mendoza de Manzanares El Real, donde se ha presentado la producción a los medios; el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial y La Granjilla de la Fresneda.
La princesa de Éboli, una mujer adelantada a su época
Esta miniserie es una ficción sobre la historia de Ana de Mendoza (Belén Rueda), una mujer adelantada a su época y que fue centro de atención en la corte de Felipe II (Eduard Fernández). Tras dar a luz a 10 hijos y enviudar, vivió una apasionada historia de amor con Antonio Pérez (Hugo Silva), secretario del rey. Felipe II, loco de celos y sintiéndose engañado y traicionado por la Princesa de Éboli, terminó con ella de la forma más cruel.
El romance que mantuvo con Antonio Pérez rescató a Ana de la vida tranquila que llevaba, le permitió ser ella misma y manifestarse contra la moral de su tiempo, e incluso contra el monarca, sobre quien Ana tenía gran influencia que no dudó en utilizar para inmiscuirse en las decisiones de estado.
En tono intimista, a través de los sentimientos de esta mujer admirable, los espectadores asistirán a las intrigas de la corte, que incluso la implican en el asesinato de Juan de Escobedo (Roberto Enríquez), secretario de Juan de Austria y hermano bastardo del rey, y la conducen a la cárcel, para acabar su vida, sola, alejada de todos, desposeída de sus bienes y de la custodia de sus hijos y alejada de su amante. No obstante, algunas de las situaciones y actitudes que se presentan se deben a una libre interpretación de los hechos. Sobre todo de aquellos que, aún hoy, permanecen oscuros en los libros de historia.
Belén Rueda interpreta a Ana de Mendoza
Pertenece a una de las familias castellanas más poderosas de la época: los Mendoza. Hija única del matrimonio entre Diego Hurtado de Mendoza y de la Cerda, virrey de Aragón y Cataluña, y doña Catalina de Silva. Se casó a los doce años con Rui Gómez de Silva, Príncipe de Éboli. Tuvo 10 hijos, pero sólo vivieron 6. Según la leyenda, a los 9 o 10 años, perdió el ojo derecho durante un entrenamiento de esgrima. A pesar de esa pérdida, era considerada una de las damas más hermosas de la corte española.
En 'La princesa de Éboli', Doña Ana ya es viuda. Tiene 36 años. Y, por fin, después de un largo matrimonio y de haber parido 10 hijos, descubre el amor y la pasión. Está enamorada de Antonio Pérez. Lo que siente por él, y lo que siente con él, nada tiene que ver con su vida de casada. Será una mujer vital, alegre, inteligente y atrevida.
Una mujer sin complejos, segura de sí misma, que utiliza todas sus armas para defenderse y sobrevivir en un mundo de hombres. Una mujer capaz de opinar sobre política. Doña Ana respeta al Rey, pero no le da miedo cuestionar sus decisiones. La relación de Doña Ana con el Rey es una relación que viene de lejos, una relación estrecha, de confidencias y complicidades. Juntos han pasado por momentos difíciles (los problemas de Doña Ana con su padre –un maltratador-, la muerte del príncipe Carlos y la de la reina Isabel de Valois) y siempre han estado el uno junto al otro. Para Doña Ana, Felipe II, es el Rey, su Rey, y le debe fidelidad, respeto y amor.
Para Felipe II, Doña Ana es la mujer que siempre ha amado, la mujer que aún desea, y con la que únicamente tuvo una breve aventura, hace ya muchos años. De aquella aventura nació don Rodrigo, el primogénito de la Princesa. Y éste es un secreto a voces. Doña Ana sabe lo que el Monarca siente por ella. Y sabe también lo mucho que le dolería descubrir que ama a otro hombre. Doña Ana teme la reacción del Rey. No quiere hacerle daño.
El Rey siempre ha protegido a los hijos de la Princesa, y ella no quiere que deje de hacerlo. Por su parte, Felipe II considera que Doña Ana, después de enviudar, se debe tan solo a su hacienda y a sus hijos, para ella el amor ya no ha de contar. Doña Ana no está implicada en el crimen de Escobedo. No es una traidora. En realidad, es sólo una víctima de la tiranía de Felipe II. Se la acusa de haber conspirado para ser Reina Regente en Portugal. Pero no es cierto. Su único "crimen" es estar junto a Pérez. Sólo por eso, la Princesa sufrirá la crueldad extrema del Rey.
Hugo Silva es Antonio Pérez
Es secretario de Felipe II. Su padre, Gonzalo Pérez, ya fue secretario de Carlos I. Pérez poseía la nacionalidad aragonesa, a la que se acogió para escapar de la persecución del Rey. Casado con Juana de Coello, de la que nunca estuvo enamorado, y padre de 8 hijos. Era un hombre culto, amante de la literatura y, en especial, de la poesía. Ya en el exilio, escribió y publicó algunos libros. Presumido, mujeriego, bebedor.
También se dice que ayudó a la Princesa a preparar el matrimonio de su hija pequeña con un hijo de la Duquesa de Braganza, candidata a ocupar el trono de Portugal y, por lo tanto, rival y enemiga de Felipe II.
Pérez es un hombre bueno que tien 36 años. Es culto, apasionado, honesto y fiel al Rey. Es cierto que mantiene contactos con los rebeldes en Flandes, pero su única intención es conseguir que la guerra se acabe, una guerra que ha costado ya muchas vidas y mucho dinero. El deseo de Antonio Pérez es conseguir que los rebeldes propongan una negociación a Felipe II. Pérez está enamorado de la Princesa. El amor que siente por ella es sincero y profundo. La Princesa le ha hecho olvidar a todas las otras mujeres y abandonar cualquier aventura.
El Rey confía plenamente en Pérez, y por eso, sólo a él, puede encargarle la organización del crimen de Escobedo. En el crimen, están implicados los dos. El Rey es quien da la orden. Y Pérez es quien lo organiza. Parece que ese secreto deberá unirles para siempre, pero no será así. Cuando el Rey descubra la relación de Pérez con la Princesa de Éboli, se considerará traicionado por su Secretario y decidirá actuar contra él. Antonio Pérez, es otra víctima del Rey. Y tal y como él se describe en su libro "Relaciones": un instrumento de los designios reales.
