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Las puertas de la casa de Guadalix de la Sierra se abrieron de nuevo anoche para recibir a dos nuevos concursantes en el transcurso de la gala de 'Gran Hermano 12'. Los nuevos inquilinos, que entraron en sustitución de Julio y Flor -expulsados por la dirección del programa-, conocieron a sus compañeros e iniciaron ayer oficialmente su participación en el programa.
Una vez cerradas las líneas telefónicas, Mercedes Milá conectó anoche en directo con la casa de Guadalix de la Sierra para comunicar el veredicto de los espectadores. Los espectadores de 'GH 12' decidieron con sus sms y llamadas que el sexto expulsado del programa fuera Eduardo. Se salvaron, al menos por una semana, Terry, Catha y Lydia.Los nuevos inquilinos
Arturo García, el surfero
Arturo García es uno de los nuevos concursantes de 'Gran Hermano 12'. Tiene 20 años, es de Bilbao y se declara un verdadero amante del surf y de los viajes. Mochila al hombro, y con su autocaravana, se ha recorrido buena parte de Sudamérica, África y Europa. Como con el surf no gana dinero, de lunes a viernes es un reputado comercial, según dice él mismo, gracias a su "labia y simpatía".
Le encanta leer y salir al ligar con chicas, algo que, confiesa, se le da bastante bien. "Me encanta juguetear conn las chicas y la verdad es que no se me han resistido muchas", ha dicho en su vídeo de presentación, por lo que suponemos que entra en la casa con ganas de convertirse en el cesor de su tocayo, 'Arturo, pito duro'.
Pepa Beltrán, la madre marchosa
Pepa Beltrán es una de las nuevas concursantes de 'Gran Hermano 12' . Pepa tiene 51 años, es de Algeciras, está separada, tiene dos hijos y entra en el concurso porque, según confiesa ella misma, le encanta ser observada. Se define como una mujer "extrovertida, cabezota y emprendedora", ha sido dueña de varios negocioa e incluso llegó a presentarse como canadidata a la alcaldía de la ciudad en la que vive. Tiene dos grandes aficiones: la concina y salir de marcha con sus hijos y los amigos de sus hijos.
