La guerra que mantienen la redacción de ETB con el equipo directivo se ha cobrado una nueva víctima: Ester Udaondo. La dirección del ente público vasco ha decidido que Udaondo cese de sus funciones como subdirectora de informativos de la televisión autonómica.
Las razones que explican esta decisión se centran únicamente a las fuertes discrepancias que desde hace meses mantiene la redacción de ETB con sus altos cargos. Esas desavenencias editoriales e ideológicas que se meterializan en diferencias a la hora de trabajar y de tratar la información han traído consigo despidos, sanciones, apercibimientos... y una guerra interna que ha provocado mínimos históricos de audiencia para los servicios informativos de la cadena.
En esta ocasión es la subdirectora de informativos la que tiene que recoger sus cosas dentro del ente público. Udaondo mantenía serias diferencias con Roberto Montalvillo, director de informativos y con el nuevo jefe de Política, Juan Carlos Viloria. Llama la atención estas discrepancias tan profundas y que tanto daño han hecho a la cadena teniendo en cuenta que todos ellos han sido nombrados y elegidos por Alberto Surio, director de EITB.
Una polémica que viene de atrás
El punto más álgido de las discrepancias entre Udaondo – que en cierta medida mantiene la postura de la mayoría de la redacción - y sus superiores se vivió el pasado 25 de octubre de 2010. En esta fecha se procedió a la apertura de expediente a dos periodistas por negarse a editar una información encargada por Juan Carlos Viloria sobre las contradicciones del PNV en relación al Estatuto de Gernika y su celebración.
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Por aquel entonces, la editora de los informativos de ETB-1 y ETB-2 en la edición de mediodía era Ester Udaondo. Y durante el tiempo en el que Udaondo ostentó esta responsabilidad los informativos de estas ediciones aparecieron sin firmar por nadie, algo sin precedentes en la historia de las dos cadenas y que muchos trabajadores y directivos de la casa consideraron el hecho como un acto de rebeldía silenciosa.
Algunos de los redactores de los informativos de ETB se quejan – y así lo han hecho saber a varios medios – de que el equipo de Montalvillo y Viloria pretenden decirles el texto exacto que tienen que locutar, con el enfoque que eso lleva implícito, y que, sin embargo, la información venga firmada por los propios redactores como si fuera algo de elaboración suya. Al no hacerlo así, denuncian, vienen las sanciones.
"Los más radicales tienen el control interno"
Pero no solo estas sanciones por negarse a firmar informaciones de otros molestan a la ya ex subdirectora de informativos, Ester, Udaondo. También provocó mucho malestar unas declaraciones del director de ETB - el hombre fuerte de Surio en la televisión pública vasca -, Miguel Ángel Idígoras en una entrevista concedida el pasado mes de noviembre al diario El Correo.
En dicha entrevista - de la que FormulaTV.com se hizo eco -, Idígoras acusaba a parte de la redacción de radicales políticos que impedían que el trabajo se realizase con normalidad por estar en desacuerdo con la línea del nuevo equipo directivo nombrado por el primer gobierno no nacionalista de la historia de Euskadi desde 1976: "Parte de la plantilla la forma gente que no quiere el enfrentamiento, que mira para otro lado y da la callada por respuesta, mientras otro sector, instigado desde fuera y por propia ideología, no permite que nadie ejerza la dirección. Los más radicales tienen el control interno".
En esta sorprendente entrevista que significaba un capítulo más en la batalla mantenida en el seno de ETB, su director añadía: "el mundo nacionalista siente cierta desafección por el cambio de Gobierno y porque determinados sectores que militan contra el Ejecutivo actual han fomentado un boicot"
Crisis de audiencia
Todo este enfrentamiento interno en EITB y su transcendencia a la escena pública no ha pasado desapercibida para la audiencia de Euskadi y ha pasado factura a los números y porcentajes de cuota de pantalla.
Los datos de los informativos tanto de ETB-1 como de ETB-2 al cierre de 2010 son históricos, desde un punto de vista negativo. En 2009 eran líderes y la primera opción del pueblo vasco para informarse de la actualidad en televisión. Un año después, no sólo abandonaron la primera posición sino que cayeron hasta la tercera.
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