Tal y como recogíamos esta mañana, Andreu Buenafuente ha rechazado mediante un comunicado en su página web el galardón a "Mejor presentador" que le concedía la revista FHM dentro de los Premios Comedia FHM. El presentador se ha negado a aceptar este premio porque la revista ha nombrado a su vez a Pablo Motos como "Peor comediante". "Como compañero, no puedo apoyar unos premios en los que se humilla innecesariamente la labor de otro cómico", asegura Buenafuente.
Tras este comunicado, la revista FHM ha decidido responder directamente a Buenafuente con otro comunicado en el que punto por punto intentan desmontar las razones que argumenta el presentador catalán.
Primero. "La revista FHM ha hecho un concurso...". No es un concurso. Es una votación online. FHM puso las categorías y los nominados en su web y el pueblo soberano -en este caso 25.000 internautas- votó libremente. No como los Goya, que parece que se dan por y para "amiguetes". Cuán diferente sería el resultado si votara la audiencia.
Segundo. "Siento decirles que no voy aceptar este premio". No hay premio físico, ni estatuilla ni gala ni nada de eso. Así que, por muy digno que se ponga, no nos hace un feo porque no hay nada que recoger ni, si nos apuran, nada que aceptar.
Tercero. "Como compañero no puedo apoyar unos premios...". ¿A qué viene tanto corporativismo/sectarismo?. ¿Como usted es un cómico no puede criticar a otro cómico? Entonces, ¿nosotros no podemos criticar a otros periodistas o medios? ¿Tenemos por narices que comulgar y/o defender a Salvador Sostres o a Elvira Lindo sólo porque son compañeros de gremio? Qué pereza, qué aburrimiento, qué corrección política.
Cuarto. "No verás una fórmula como esta en cualquier otra lista de premios". Está equivocado. Por ejemplo, en cine se conceden los Premios Razzies a lo Peor del Año. Actrices con Oscar como Halle Berry o Sandra Bullock incluso han ido a recoger -genio y figura- sus Razzies. Los Premios Darwin premian a las muertes más estúpidas del año. O, sin ir más lejos, el Premio Limón, que otorga la prensa española a los que son especialmente antipáticos.
Quinto. "Se humilla innecesariamente la labor de otro cómico". En 'El hormiguero' del Sr. comunicador Pablo Motos hay una sección titulada originalísimamente El Kiosco en la que se humilla innecesariamente (con tal de hacer gracia) la labor de otros comunicadores, en este caso los que hacen revistas, y en la que FHM ha aparecido en numerosas ocasiones. ¡Y estamos encantados! Eso por no hablar de las -celebradas, necesarias, geniales en muchas ocasiones- mofas, burlas y escarnios que, desde los diversos productos de la factoría El Terrat, han sido objeto todo tipo de profesionales de la comunicación, desde Punset a Iker Jiménez pasando por Raquel Revuelta y olé.
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Conclusión. El que hace un trabajo artístico está sometido a la consideración pública, para bien o para mal. Basta ya de comerse la porra unos a otros. ¡Viva Ricky Gervais! (Quien, por cierto, también es cómico y se ha llevado las críticas de Buenafuente en su Twitter)