ENTREVISTA CAMPANADAS A3

Carlos Sobera: "Debería pasar el testigo de las próximas Campanadas a Arturo Valls o Manel Fuentes"

El presentador ha hablado de su responsabilidad al dar las Campanadas de Antena 3.

Por Redacción El 29 de Diciembre 2011 | 12:53

Carlos Sobera y Carolina Cerezuela presentarán las Campanadas en Antena 3

El presentador del programa 'Atrapa un millón', que está siendo un éxito en la franja de tarde de Antena 3, Carlos Sobera, será el encargado de dar las campanadas este año en la cadena, acompañado de la integrante del jurado de 'Tu cara me suena', la actriz y presentadora Carolina Cerezuela.

Como ya adelantó en exclusiva FórmulaTV.com, Antena 3 ha decidido confiar los últimos minutos del año a esta pareja de éxito. Un hombre y una mujer que en sus respectivos programas gozan del respaldo de la audiencia, y que han sido los elegidos por la cadena de Planeta para dar las Campanadas desde la Puerta del Sol de Madrid este próximo 31 de diciembre.

Ahora, Carlos Sobera habla en una entrevista de la experiencia de ser el maestro de ceremonias en una de las noches más importantes del año, experiencia que ya protagonizó en una ocasión en TVE y que el presentador de Barakaldo vive de una manera muy familiar, y que este año será muy emocionante.

¿Qué supone para ti presentar las Campanadas 2011 en Antena 3?

Presentar las Campanadas en Antena 3 es un placer. Creo que es la culminación de un gran año y es un motivo de orgullo poder representar a todos los compañeros de la cadena en este momento, que es muy importante para Antena 3.

También he de reconocer que tengo un poco de nervios porque, aunque ya presenté unas Campanadas en TVE, no dejas de estar nervioso, es un momento puntual que merece la atención de todo el mundo, que todos ven aunque sea de pasada y que es un directo, y como todos los directos te pone nervioso, lo justo para que todo salga bien.

¿Cómo se lleva explicarle a toda España como funciona un reloj?

Durante un minuto y medio te sientes relojero [risas]. A veces me da un poco de reparo porque, salvo los muy niños, todos se han tomado las uvas unas cuantas veces, ya han visto cómo funciona el reloj de la Puerta del Sol y se lo saben de memoria.

Aunque no explicáramos nada e hiciéramos una retransmisión muda donde solamente se oyeran los cuartos y las campanadas, la gente se tomaría las uvas perfectamente. Entiendo que explicar cómo funciona el reloj es parte del ritual y es otra manera más de compartir ese momento.

¿Qué te parece tu compañera, Carolina Cerezuela?

Muy bien, hace algunos años hicimos una campaña publicitaria juntos que también se hizo por Navidad y nos hicimos fotos del estilo de este año brindando y con el árbol. Aparte de ser una chica guapísima y ser altísima, la gente se va a pensar que soy bajito ¡y no lo soy, pero es que ella es muy alta y va con tacones! (risas), además es una tía súper maja, muy buena profesional, nos lo vamos a pasar muy bien y va a ser un momento bonito de vivir.

¿Cómo sueles recibir el año nuevo?

En casa con la familia, excepto los últimos años que me toca trabajar, o con tele o teatro, y como no puedo estar con ellos, procuro estar en Nochebuena con la familia.

¿Alguna superstición como llevar algo rojo, el oro en la copa...?

Me estoy volviendo supersticioso con el tiempo, porque en esta profesión vives muchos éxitos y muchos fracasos, cuando tienes un fracaso, algo que te has puesto lo asocias y no lo quieres volver a ver, y cuando tienes un éxito, algo que has usado lo agarras y lo quieres tener toda tu vida.

¿Cómo te tomas las uvas normalmente, las pelas, les quitas los pipos, las tomas tal cual?

Yo tengo problemas de amígdalas, las tengo muy grandes, y no trago con facilidad. De pequeño no quería tomar uvas y mi madre me ponía aceitunas rellenas, por supuesto, por que con hueso no me daba tiempo (risas) y ahora lo hago con uvas, por aquello que una vez las tomé y me fue muy bien el año, eso sí, tienen que estar peladas y sin pipos, que si no no puedo tragar.

¿La cena de Nochevieja es como una carrera contrareloj para terminar antes de las doce?

Es que yo siempre como muy rápido [risas]. Yo he tenido el problema contrario, empezábamos a cenar a las diez, a las diez y media ya había acabado y se me hacía un mundo hasta que llegaban las uvas, entonces empezaba a comer turrones y así engordaba en Navidad... (risas). Estos últimos años, que organizamos cenas multitudinarias, llegamos con tiempo para hacer unas flexiones y concentrarnos antes de tomar las uvas [risas].

¿Impresiona estar en el balcón de la Puerta del Sol con toda la gente abajo?

La vez que estuve me lo pasé muy bien porque lo viví con mucha intensidad. Siempre he visto las Campanadas en televisión y, de repente, cuando te ves ahí arriba, narrando las Campanadas para toda al gente que en ese instante está en su casa con sus uvas, deseando entrar con buen pie en el año nuevo, contentos, felices, superando todas las adversidades del mundo, te sientes muy bien y una persona privilegiada.

Esto te da mucha energía, y el momento es muy bonito porque es una fiesta absoluta la que se vive en la Puerta del Sol, es increíble. Aunque hay gente pasada de rosca, el ambiente es muy sano y se vive muy colectivamente, un momento de alegría colectiva y no te cuesta nada meterte en la fiesta. Luego, el momento de los cuartos y las campanadas, no sé que tienen, pero es emocionante e intenso. Me lo pasé muy bien en su momento e intuyo que me lo voy a pasar muy bien esta vez.

¿En qué lugar te gustaría recibir el año nuevo?

Siempre he querido celebrarlo en Copacabana, es uno de mis sueños. Adoro Río, he estado varias veces y adoro esa ciudad, ahora hay más seguridad que antes, pero tampoco se puede ir tanto como antes porque se ha vuelto muy cara, parece París. Siempre me ha gustado la costumbre que tienen, en Nochevieja se visten de blanco y juntos de la mano se meten en el mar, que está calentito en esa época del año, y así reciben el año nuevo. ¡Siempre he querido hacer eso!

Independientemente de lo que suceda este año ¿te gustaría repetir?

Soy partidario de ceder el testigo porque creo que dar las Campanadas tiene cierto simbolismo. Cuando las di la otra vez me entusiasmó, pero a la vez pensé: "una y no más". Y aquí me pasa lo mismo, estas Campanadas son significativas por lo bien que ha ido este año de cambio en el modo de hacer televisión, de pasar al modelo blanco con "Atrapa un millón" o '¡Ahora caigo!'.

Creo que el próximo año, lo ideal sería pasar el testigo a Arturo Valls o a Manel Fuentes, por ejemplo. También te digo que si tuviera que presentarlas otra vez, lo haría sin ningún problema, y si me llevan a darlas a Copacabana ¡encantado! Y no dejo que las de en mi lugar nadie (risas).

Una nochevieja que recuerdes especialmente.

La imagen que tengo de la Nochevieja es aburrida, me explico: he salido bastante toda mi vida, y esa noche está llena de "domingueros" que no salen nunca y en Nochevieja van con las trompetas y el matasuegras que piensas "te podías quedar en casa...". Siempre he asociado la Nochevieja a una fiesta un poco forzada y siempre he preferido vivirla en familia y el día 1, salir yo. Es que esa noche, si sales, es muy difícil disfrutar porque todo esta lleno, hay cola para entrar, para el baño, para pedir algo en la barra... Como consecuencia de eso la noche la paso en casa y no tengo ninguna anécdota memorable.

Sí que me gusta hacer cosas diferentes en Nochevieja, suelo empezar el año escuchando música y leyendo un libro, me parece una forma muy mágica de entrar en le año nuevo, simbólicamente hablando.