La corporación pública de Radio Televisión Española tendrá finalmente un presupuesto de 1000 millones de euros para este año 2012, y seguirá sin emitir publicidad en sus canales, según ha explicado la vicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría a la salida de la reunión celebrada ayer entre la vicepresidenta del Gobierno y el consejo de administración de RTVE.
Así pues se termina por confirmar el recorte de 200 millones en el presupuesto de la corporación que se había anunciado desde el Gobierno, y se cierra el controvertido debate de la vuelta de la publicidad a Televisión Española para hacer frente a la nueva situación económica de RTVE. "La principal conclusión es que el Gobierno ha insistido en que la situación es muy difícil y los recortes son necesarios", declaró Soraya Sáenz de Santamaría a la salida de la reunión celebrada ayer.
La decisión acerca de la continuidad del actual sistema sin ingresos publicitarios ha sido tomada, según ha aseverado la "número dos" del gobierno central, porque no se trata de buscar nuevas fórmulas de ingresos para la corporación, tanto como sí de reducir los gastos. Aún así, RTVE ingresará 1000 millones a sus arcas, y si superara esta cifra, tendría que devolver al Estado el excedente por imposición legal.
Los directivos expusieron las consecuencias que tendría el recorte previsto de 200 millones de euros, que tendría repercusión tanto en el cumplimiento de sus obligaciones como servicio público y como sobre la audiencia. Según la cúpula de RTVE, el recorte es inviable para este año, más allá de 80-90 millones, puesto que en 2012 existen ya compromisos de gasto para los Juegos Olímpicos de Londres y para la Eurocopa de fútbol, aunque dicha medida sí sería asumible a partir del próximo 2013.
Por otro lado, Sáenz de Santamaría se comprometió a estudiar las propuestas realizadas desde el consejo de administración de la corporación pública, como la financiación por parte del Gobierno de los derechos de la cita olímpica en un crédito extra, o la recuperación del anterior esquema fiscal de la corporación, que traería una reducción del IVA. El año pasado, la cifra que el Estado inyectó al grupo público fue de 575 millones de euros.
'Cuéntame' o 'Águila roja' estarían en peligro
La reunión mantenida por los representantes del grupo RTVE y la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría transcurrió estudiando los informes redactados por los directivos de la corporación, al respecto de los recortes y la limitación del gasto a 1000 millones que finalmente se va a producir.
Según salió de anteriores reuniones internas previas a la celebrada ayer con la vicepresidenta, se concluyó que la reducción en el número de directivos, el recorte en los sueldos y la supresión de otros gastos sería insuficiente sin tocar la programación, ya que no alcanzaría un ahorro superior a 35 millones de euros. Por este motivo, la corporación ha indicado que sería necesario prescindir de programas como 'Cuéntame cómo pasó' o 'Águila Roja', que son los más costosos para la corporación, y los que más audiencia le proporcionan.
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Los cálculos realizados en estos informes indican que la audiencia de La 1 descendería a un 8%, aunque otros consejeros consideran por otro lado que existen alternativas para que esto no se produzca, aunque se produzca esta limitación en las cuentas públicas. El camino para seguir por la misma línea sería confíando en el trabajo de la producción propia, que se cree que es el momento de abordar.