Mariano Rajoy, Presidente del Gobierno.
Mariano Rajoy quiere tener pronto Presidente de RTVE, tenga consenso o no con el resto de partidos políticos. Según informa El Confidencial, el Gobierno está estudiando distintas fórmulas para elegir este importante cargo, algunas de ellas muy polémicas solo con plantearlas.La que más parece va a disgustar a todo el mundo es la modificación de la ley que regula TVE con un decreto ley. Rajoy cambiaría la exigencia de elegir Presidente con el apoyo de dos tercios del Congreso que ahora existe por una mayoría simple.
De esta manera, el Partido Popular se evitaría tener que pactar con otros diputados para conseguir el nombre que ellos quieran. Con la formación actual del Congreso, la mayoría simple la tienen dados sus 186 diputados conseguidos el pasado 20 de noviembre, mientras que con dos tercios tendrían que dialogar con el PSOE para llegar al apoyo necesario.
Esta decisión parece muy complicada ya que generaría muchas críticas en el entorno socialista. De aprobarse, Mariano Rajoy tendrá muchos problemas para elegir otros cargos que tienen que pactar tras romper el consenso.
Modificación de los estatutos de RTVE, otra de las soluciones
El Gobierno del Partido Popular se plantea otras opciones para conseguir nombrar pronto un nuevo Presidente de RTVE. Una de ellas sería la modificación de los estatutos de la Corporación para permitir elegir este cargo de entre los miembros del Consejo de Adminitración.
Aún así, aún creen que pueden pactar un nuevo Presidente con el Alfredo Pérez Rubalcaba, líder de la oposición con quien se propuso renovar todos los órganos antes del mes de junio. Uno de los últimos nombres que está en la mesa es el de Luis Blasco, la apuesta de Rajoy en este campo.
El Presidente del Gobierno prefiere que sea un gestor económico en lugar de un periodista quien presida RTVE. Hasta la fecha, la Corporación está regida por un sistema de presidencia rotatorio entre los miembros del consejo de administración, que también está pendiente de ser renovado.
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Desde que Oliart abandonase la presidencia, el presidente de turno no puede tomar decisiones que comprometan a la Corporación en materias financieras o de cambios de parrilla. La designación de su sucesor se ha convertido en algo prioritario, más aún teniendo en cuenta el recorte presupuestario que el gobierno de Rajoy ha anunciado para la Corporación.