El Padre Apeles se encuentra en estos momentos ingresado en un hospital de Barcelona después de haber ingerido gran cantidad de fármacos, según las primeras informaciones. Por el momento, se desconoce el estado de salud en el que se encuentra el popular sacerdote.
Este ingreso se produce apenas siete meses después de que públicamente manifestara que no tenía ganas de seguir viviendo. El pasado mes de octubre el padre Apeles reapareció en el programa 'La noria' de Telecinco para confesar el mal momento por el que estaba pasando.
"Cada día le pido a Dios que sea el último de mi vida"
Apeles aseguró entonces estar sufriendo una profunda depresión y haber perdido las ganas de vivir. "Cada día le pido a Dios que sea el último de mi vida", aseguró en el programa de Telecinco. Según contó Terelu Campos, Apeles apenas salía a la calle para ir al cine o para beber y olvidar. Apeles reconoció también que estaba la mayor parte del tiempo medicado, que dormía hasta la noche, que sus ventanas estaban bajadas y no sabía ni qué día ni la hora que era.
Pese a todo, no perdió la oportunidad de pedir un puesto de trabajo en Telecinco, algo que le alegraría la vida: "Si un día hay un debate sobre algo, si tuviese yo una silla en 'La noria' como siempre me hubiese gustado a lo mejor no estaría tan deprimido".
"Muchas veces bebo mucho"
"Yo estoy medicado, tratado por los médicos y encima muchas veces bebo", confesó en el programa de Jordi González. Sin embargo, matizó que "en ningún momento yo he dicho que quiera suicidarme".
"He dicho que se cierran todas las puertas y espero que se abran las del cielo, que mi vida puede acabar como la de Carmina Ordoñez. Ella no se suicidó, acabo mal por las cosas que tomaba. Yo acabaré mal por culpa de las mezclas que muchas veces hago".
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Según declaraciones del Padre Apeles, "suicidarse implica una voluntad de que alguien se quiere matar, yo le pido a Dios cada día que sea el último día de mi vida, porque en este mundo yo ya no tengo objetivos ni ilusiones ni nada que hacer, sentenció. "Por tanto, a mi la vida me resulta una carga, me resulta pesada, no signifca por eso que yo me quiera matar. No me he suicidado porque pienso que hay un infierno y sigo creyendo en eso".