El Vicesecretario de Estudios y Programas del Partido Popular, Esteban González Pons, ha realizado una entrevista al programa 'La linterna' de la cadena COPE, en la que ha apuntado que, "tal como ha anunciado el presidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, la televisión autonómica murciana 7RM va a cerrar sus puertas mañana o pasado".
Las afirmaciones llegaron la noche del lunes 30 de julio, horas después de que ambos políticos se reunieran en la sede nacional del PP con Mariano Rajoy y el resto de presidentes autonómicos, los llamados 'barones'.
Sin embargo, debido al revuelo generado por las declaraciones de Pons, éste se ha apresurado ha pedir disculpas unas pocas horas más tarde a través de la red social Twitter, ya que considera que todo se debe a un "malentendido".
A primera hora de la mañana se podía leer que el vicesecretario había publicado un tweet que decía: "Pido disculpas a los trabajadores de la tele de Murcia y al presidente Valcárcel. De mi entrevista de anoche en @cope_es se ha derivado un malentendido que quiero atajar. No tengo más información sobre ese asunto que la que es pública. Lamento haber provocado confusión esta noche".
González Pons en Twitter
Por su parte, el director general de Radiotelevisión de la Región de Murcia (RTRM), José Daniel Martín, ha señalado a EFE que a él no le constaba que hubiera alguna decisión tomada sobre el futuro de la televisión murciana, "y menos aún que esa decisión sea de cierre".
Ejemplo para capear la crisis
En el momento en que Pons anunciaba el posible cierre de 7RM, fue utilizándolo como un ejemplo de los esfuerzos que están llevando a cabo las Comunidades Autónomas gobernadas por dirigentes populares para reducir el gasto público y conseguir "una administración más llevadera" y "sin cargas que los ciudadanos no puedan asumir".
Por su parte, el Congreso de los Diputados aprobó el pasado 18 de julio la nueva ley audiovisual, que permite la privatización de las televisiones públicas autonómicas. No sería de extrañar por tanto que la concesión de 7RM, que estaba en manos del consorcio GTM y expira a finales de 2012, pasase a manos privadas ya que, debido a la crisis, la asignación que el canal ha recibido de los presupuestos ha ido reduciéndose año tras año.
En 2011, GTM que mantiene 300 puestos directos y 80 indirectos, había acumulado una volumen de deuda de alrededor de 30 millones de euros debido a los impagos de la Comunidad. Dicha deuda fue incluida por el Gobierno regional en el reciente plan de pago de proveedores y a principios de año 7RM, que está constando 26 millones de euros a las arcas públicas anualmente, había reducido la deuda hasta los 17 millones de euros.
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Pero los problemas de Murcia no son los únicos. Entre otros, Canarias ya ha anunciado el cierre de uno de sus canales, mientras que Valencia ha tenido que acogerse a un ERE debido a las deudas de Canal9 y los rumores sobre la precaria situación de Telemadrid no paran de sucederse.