La crisis económica que ronda y amenaza constantemente a la cadena de comunicación autonómica madrileña va sumando dificultades y obstáculos a una lista repleta de ellos. Los trabajadores de Telemadrid, cuya situación laboral está en el aire, manifestaron su descontento este pasado lunes reclamando la atención de José Antonio Sánchez, director general de la cadena, y terminó con la intervención de la policía de forma pacífica.
Los empleados de Telemadrid se manifiestan contra Sánchez, Director General @salvemostelema
Tras no conseguir la polémica reunión, los trabajadores de Telemadrid, hicieron guardias por turnos frente al despacho del Director General con el único objetivo de hacerse oír y reclamar la atención de éste. Ante esta situación, José Antonio Sanchez se encerró en su despacho más de siete horas para no tratar con sus propios empleados. Finalmente, la policía intervino de manera conciliadora con la llegada de cinco furgones y elogiaron la actitud de los trabajadores, ya que ni impedían la salida del Director ni utilizaron malas palabras o la violencia para conseguir sus propósitos.
Los empleados de Telemadrid quieren respuestas
El personal, tanto de Telemadrid como de Onda Madrid, dio un comunicado tras el suceso, donde apuntaban que José Antonio Sánchez ha accedido a reunirse con los representantes sindicales el martes a las 12:30 para tratar la disputa respecto al expediente de regulación de empleo que podría alcanzar la cifra de 900 despidos.
Además, el citado comunicado también solicita el cese del responsable de Telemadrid por su irresponsabilidad, incapacidad y la falta de respeto hacía los propios trabajadores. Ni cortos ni perezosos, apuntan desde su total convencimiento que detrás de los despidos no hay un ahorro de dinero público, sino un trasvase de ese dinero a manos privadas.
Telemadrid tiene una deuda de 245 millones de euros
El periódico El Mundo, publica que según sus fuentes, el ente público matiza que esta estructura no tiene por qué implicar un ERE, aunque se da por hecho que lo habrá, aclarando que despedir al 75% de la plantilla actual, sería una barbaridad.
Con una deuda de 245 millones de euros, y tras pedir varios créditos para poder mantener el canal, la Comunidad de Madrid es partidaria de privatizarlo, lo que hace indicar que este nuevo rumbo financiero, suponga un saneamiento de las cuentas y la imagen.
Varias empresas audiovisuales privadas, como el grupo Secuoya, ya han mostrado interés por el canal madrileño.