Parejas felices, sorpresas finales y decepciones en el desenlace de la segunda temporada de '¿Quién quiere casarse con mi hijo?'

El docu reality de madres que buscan casar a sus hijos por televisión, y que emite Cuatro de la mano de Luján Argüelles, ha cerrado las puertas de su segunda edición con parejas felices, sorpresas de última hora, madres no muy de acuerdo con las decisiones de sus hijos, y enfados monumentales.

En el ya habitual corrillo pre-gala final de '¿Quién quiere casarse con mi hijo?', todas las madres con Luján como anfitriona, hacían balance de los candidatos de sus hijos, y se despachaban a gusto sobre ellos. Entre las interminables charlas de la emotiva y tierna Dolores, madre de Javi, Mary confesaba que no conocía la faceta pendón de su hijo, mientras Toñi, Paqui e Isabel, dejaban claro a quienes aceptarían en su casa, y a quienes no.

Isidoro se marcha con su alma gemela y Pedriño regresa con su madre

El vendedor ambulante de zapatos, llegaba al altar del programa dispuesto a elegir entre su madre y Natalia, su candidata favorita. Tras ver aparecer a su madre por la puerta, tan guapa y bien vestida, no podía evitar reaccionar con la expresión "hostia puta chaval, que guapa", palabras más que habituales en su día a día. Tras las amenazantes pero cariñosas palabras de Dolores, pidiéndole que no le eligiera, le ponía el anillo a su alma gemela, tal y como la define su madre, ya que aparentemente son iguales, y están hechos el uno para el otro.

Manu, el actor porno, aparecía en el último momento para luchar por Pedriño

Pedriño decidía llegar solo a la fase final del programa tras descartar al último candidato que le quedaba, pero la visita de Manu a última hora, le brindaba la oportunidad de encontrar pareja. Ante la sorpresa y la alegría de Mary, Pedro tenía opciones de quedarse con el actor porno, pero seguramente esta faceta, le hizo volver a los brazos de su madre, y seguir esperando a que llegue su media naranja.

Gaby encuentra a su princesita, mientras Javi cambia el amor de su madre por el de Rocío

El concursante más fino y elegante de la edición, tenía la dura tarea de elegir entre su princesita Patricia, o regresar a los brazos de su madre. Y aunque Toñi le transmitió su deseo de que se quedara con ella, finalmente Gaby se marchaba con la rubia estudiante, ante los ojos de Jia Liu, la consejera china de la mujer que le trajo al mundo.

Uno de los momentos más complicados de la noche llegaba con la elección de Javi, el escupe-fuegos. Rocío entraba en la zona del altar bajo la mirada desafiante de Isabel, que antes de que su hijo tomara su decisión final, le advertía que si se marchaba con ella, se olvidara de su madre, ya que no la quiere en su vida bajo ningún concepto. Jugándosela una vez más por una chica, Javi se decantaba por Rocío, situación que llevó a que su madre se marchara antes de tiempo, muy enfadada y dolida con la supuesta mala elección de su pequeño.

El mellizo Álvaro sustituye a Sara por la descartada Ana en pleno altar

Entre bambalinas pudimos observar como Javi abrazaba a su madre, y le pedía que diera un beso a su nueva pareja, intentando crear un acercamiento entre ellas.

Luis Carlos disgusta a su madre con su elección, mientras que la descartada Ana se queda con Álvaro

Los mellizos se marchaban del programa con su objetivo cumplido, encontrar novia. Luis Carlos se decidía en contra de su madre por Miriam, la fogosa candidata que le encandiló desde el primer día, mientras que Álvaro descartaba delante de todo el mundo a Sara, para quedarse con Ana, candidata que fue expulsada por su hermano y su madre, al creer que no tendrían mucho futuro como pareja.

Al melli bueno, Álvaro, le costaba mucho rechazar a su madre, pero decía que estaba enamorado de Ana y se quería marchar con ella.

Bajo el magistral trabajo de efectos sonoros por parte del equipo del programa, y con actitudes muy dispares por parte de las madres, esta segunda edición termina casi con un pleno, ya que todos los solteros, a excepción de Pedriño, se marchan con pareja.