La televisión convencional se mantiene como dispositivo favorito para los españoles, a pesar de la progresiva expansión se los servicios online. El 48% de los encuestados señala la televisión como el dispositivo más valorado durante el pasado año 2011, según los datos del último estudio anual elaborado por Deloitte sobre los hábitos de consumo, usos y expectativas de los consumidores y su interacción con los medios de comunicación. No obstante, hay que tener en cuenta que esta situación varía según la edad de los encuestados, manifestando los grupos más jóvenes su preferencia por el ordenador, con un porcentaje superior al 50% en el grupo comprendido entre los 14-28 años, y en menor medida por el smartphone, con porcentajes cercanos al 40%. Esta tendencia en los grupos de menor edad denota que empiezan a producirse cambios en las preferencias de los consumidores.
Esta preferencia se acentúa si atendemos al uso que se hace de los dispositivos. En este sentido, si se centra el análisis en el visionado de programas de televisión, los encuestados manifestaron:
· Un 73% de las veces acudieron a la televisión en directo para ver su programa favorito.
· El 70% lo señaló como su método preferido; lo que además, se incrementaba en los grupos de mayor edad.
· Un 57% considera la televisión como el método preferido para ver películas. No obstante, los grupos de menor edad de nuevo se desmarcaron de la tendencia generalizada y manifestaron su preferencia por acceder a los contenidos a través de dos servicios de vídeo en streaming gratuitos.
Dispositivo más valorado en el hogar en España
Estadísticas
Así la televisión se configura como el principal método utilizado para contenidos de vídeo, aunque se está viendo alcanzada por el resto de dispositivos e incluso superada en las categorías de menor edad.
Finalmente, entre otras posibles formas de consumir los contenidos de vídeo, destacaron las webs donde se comparten vídeos con uso del 33% de los entrevistados en los últimos 6 meses.
Dispositivo utilizado para ver los programas de televisión favoritos en España
En la gráfica inferior podemos observar como son los adultos, de 65 a 75 años, quienes ven más televisión, mientras que los más jóvenes prefieren el uso del ordenador o smatphones. Sin embargo, la televisión reina por encima de todos los medios.
La televisión conectada no es todavía una amenaza severa para las televisiones de pago. En 2011, el interés del consumidor español en comprar una TV conectada a la red fue todavía moderado y solamente uno de cada tres encuestados manifestó estar muy interesado en ello.
Si se atiende al efecto que pueden tener las nuevas formas de ver la televisión online en la televisión de pago, cabe señalar que la mitad de los consumidores no tenían planeado cancelar estos servicios de suscripción. No obstante, un tercio de los clientes ya lo había cancelado en 2011 por tener la posibilidad de ver sus programas online y un 18% declaró estar considerándolo. Esta situación difiere bastante de la de otros países como Reino Unido o Francia donde un 76% y 65% de los usuarios no tiene planeado cancelar sus servicios de televisión de pago.
El contenido televisivo cada vez más social
En España, más de la mitad de los consumidores realizan otras actividades mientras ven televisión, frente a un 43% que no realiza ninguna actividad adicional. Si comparásemos España con otros países, se observa cierta semejanza con Francia y Alemania, con un 46% y un 43% de consumo exclusivo de televisión, respectivamente, y una diferencia significativa con Reino Unido, donde el consumo exclusivo desciende hasta el 29% de los usuarios.
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Además la televisión es un importante nexo y elemento de socialización. En nuestras relaciones sociales, el contenido televisivo se configura como el principal elemento de interacción. Los programas de televisión siguen siendo a nivel global el principal tema de conversación referente a medios de comunicación entre los consumidores, seguido por los periódicos (impulsado mayoritariamente por los mayores de 46 años) y los sitios de redes sociales (impulsado con fuerza por los jóvenes entre 14 y 28 años).