¿NUEVO PANORAMA?

Los realitys sustituyen a las telenovelas como género de menos prestigio

Los reality shows han sustituido como producto más desprestigiado por parte de la audiencia a las telenovelas, que suben puntos en la percepción de la audiencia

Por Redacción El 8 de Octubre 2006 | 11:48

Los reality shows han sustituido como producto más desprestigiado por parte de la audiencia a las telenovelas, que suben puntos en la percepción de la audiencia, así de rotundo se mostró ayer el ex director de TVE Juan Menor en la Cuarta Cumbre Mundial de la Telenovela.

Este pasado 5 y 6 de octubre, Madrid ha vuelto a acoger la sede de la Cumbre Mundial de la Industria de Telenovela y la Ficción, 'TVMasNovelas2006', que este año ha celebrado su cuarta edición, y en la que se ha dedicado un homenaje a la novelista española Corín Tellado, una de las originarias del género de la telenovela desde su trabajo creativo y literario con las Fotonovelas. Tellado ha escrito 4.000 novelas rosas y ha vendido más de 400 millones de ejemplares. Así, tras 56 años de carrera literaria, Corin Tellado es un referente para la industria de la telenovela.

Sin embargo, uno de los momentos más sigificativos lo protagonizó Juan Menor. El ex director de TVE estableció similitudes entre las telenovelas, y los realitys y aseguró que ambos tienen las mismas claves de éxito: la emoción y la vinculación con la audiencia.

En los realyties shows las emociones son de personas reales, "aunque estén manipuladas", y quedan encajadas en los espectadores, mientras en los seriales los protagonistas son personajes de ficción, añadió.

"El problema del desprestigio de las telenovelas es un problema de los periodistas", señaló Menor, quien aseguró que hace diez años las críticas hacia el genero calaron en la sociedad, incluso entre los seguidores de estas series de amores imposibles y finales felices.

A su juicio, la falta de legitimidad de las telenovelas "estaba condicionada por su horario y el público al que se dirigía: amas de casa de familias con pocos recursos".

El futuro de este producto televisivo, cuya audiencia global se estima en 2.000 millones de espectadores en todo el mundo, está en su renovación a través de la inclusión del humor o la diversificación de la audiencia, dirigiéndose también al público infantil y juvenil, así opina al menos Juan Menor.

En este sentido, avanzó que, conforme se diversifique la oferta televisiva en España llegaremos a ver más telenovelas en horario de máxima audiencia. Casualidad o no esta misma noche La Primera de TVE estrena en horario estelar 'La dársena de poniente', una gran producción nacional, heredera de las mejores series de la historia de la televisión, ambientada en el entorno de un imperio en el que se esconden inquietantes secretos. Hay que recordar que hace años Telecinco llegó a emitir con gran éxito en prime time telenovelas como 'La loba herida'.

Desde el punto de vista de los contenidos, Menor consideró un error utilizarlas "como herramienta de socialización o para difundir mensajes moralistas".

En sentido contrario se manifestó Fefi Toll, de la productora estadounidense Fefi Toll Entertainment, quien defendió la responsabilidad social de las telenovelas en el mercado hispano de EE.UU. al ser uno de los productos más vistos por este colectivo.

Fefi Toll señaló que las telenovelas son un vehículo de difusión de la cultura de sus mayores a los jóvenes hispanos estadounidenses que viven a caballo entre dos culturas así como un instrumento para difundir una imagen positiva de este grupo.

La directora de Ventas de la argentina Dori Media Distribution, Silvana D'Angelo, pidió erradicar los perjuicios a la hora de hablar de telenovelas y no sustituir esta denominación por otras como serie y reconoció que están cambiando.

"Antes eran fáciles de reconocer: eran culebrones dirigidos a las amas de casa, pero ahora el público se diversifica", señaló D'Angelo, quien considera por ello que no habría problemas de aceptación de productos hechos en España en el mercado latinoamericano.

En este contexto, la productora argentina defendió la universalidad de las historias de las telenovelas y aseguró que muchas han funcionado mejor en Asia o Europa del Este que en América Latina, o en Israel, donde algunos seriales fueron una forma de aprender español para muchos jóvenes.