ENTREVISTA FORMULATV.COM

Miriam Sánchez: "Mi despido de 'Mujeres y hombres y viceversa' ha sido cruel y humillante, no han tenido humanidad conmigo"

La exasesora del amor de Telecinco repasa en exclusiva su trayectoria televisiva, dejando clara su indignación por el despido del espacio que conduce Emma García.

Por Berto Molina El 6 de Abril 2013 | 08:33

Miriam Sánchez inició su carrera televisiva bajo el nombre de Lucía Lapiedra, nombre artístico del que consiguió deshacerse tras abandonar la industria del cine para adultos y centrarse en programas de entretenimiento.

Ha trabajado con Javier Sardá, Ana Rosa Quintana o Emma García, fue la ganadora de 'Supervivientes 2008', y actualmente tras rechazar un reality show se encuentra estudiando nuevas ofertas profesionales. La que fuera asesora del amor junto a su expareja Pipi Estrada en 'Mujeres y hombres y viceversa' de Telecinco, se sincera en exclusiva para FórmulaTV.com.

Miriam Sánchez, colaboradora de televisión

Comenzaste en la pequeña pantalla de la mano de Javier Sardá desnudándote por las calles de Barcelona ¿cómo llegaste a 'Crónicas marcianas'?

Javier Sardá buscaba una chica que hiciera reportajes de actualidad, política, deportes... con el requisito de que al preguntar por la calle se quedara con los pechos al aire, y decidí lanzarme a la aventura.

¿Qué recuerdas de aquella etapa?

Lo recuerdo como una etapa intensa y divertida donde perdí la timidez de golpe. Echo mucho de menos el programa, era un gran show televisivo.

¿Fueron tus colaboraciones posteriores en 'TNT' tu gran oportunidad televisiva?

Todos y cada uno de los programas en los que he trabajado han supuesto para mí mucho más que una carrera profesional en la pequeña pantalla. La espontaneidad y naturalidad no se aprenden en las escuelas, se aprenden con el rodaje, y he tenido la suerte de estar en grandes formatos. Pasé unos meses maravillosos colaborando en 'TNT' con Yolanda Flores.

Al poco tiempo enterrabas a Lucía Lapiedra para convertirte en Miriam Sánchez y participar en 'Supervivientes'. ¿Cómo fueron esos meses en la isla?

Fue una época muy feliz en mi vida que traspasó la pantalla y llegó al público. Al ser una persona muy deportista a la que le gusta la naturaleza lo llevé bastante bien. La gente pudo descrubrir a Miriam Sánchez y no a Lucía Lapiedra, que era el personaje que hasta entonces aparecía en televisión.

¿Realmente es tan duro estar allí tanto tiempo?

Mi edición, la del año 2008, fue muy dura. Se me cortó la menstruación y llegué a estar hasta nueve días sin comer absolutamente nada. Tiempo después al ser colaboradora de todos los debates de las ediciones posteriores, menos el que presentó Emma García, me di cuenta como habían rebajado la dureza con los concursantes. El triunfo de Rosa Benito para mí fue virtual.

No conservo ninguna amistad ni enemistad. Con Karmele, Leo, Nekal o Lely me escribo alguna vez por mensajería instantánea. Si les veo alguna vez por algún sitio saludo a todos sin problema, pero ninguno forma parte de mi círculo de amistades.

Miriam Sánchez en 'Mujeres y hombres y viceversa'

Si me vuelven a ofrecer 'Supervivientes' me lo tendría que pensar, pero no podría por ejemplo estar encerrada en una casa con gente muy intensa, soy claustrofóbica. Aceptaría realities deportivos tipo 'Pekin express' o 'Expedición imposible', e incluso me iría con Calleja a 'Desafío extremo' [risas]. Me encantaría participar en '¡Más que baile!', y más ahora que tengo profesor particular en casa.

¿Qué crees que te llevó a ganar el concurso?

Tras el reality llegaron otros programas como 'El programa de Ana Rosa', 'Enemigos íntimos' o 'De buena ley'. ¿En cuál de ellos te encontrabas más a gusto?

¿Cómo definirías a Ana Rosa Quintana, Santi Acosa y Sandra Barneda?

Ana Rosa es una mujer diez, muy inquieta profesionalmente. Santi Acosta es un gran profesional que siempre tiene en cuenta los valores humanos. Y Sandra Barneda es una mujer cercana, empática y humilde, características que no abundan en personajes televisivos.

Compaginaste todas estas colaboraciones con tu puesto fijo en 'Mujeres y hombres y viceversa'. ¿Qué ha supuesto este programa para ti?

En los cuatro años y medio que he estado en el programa he vivido prácticamente más tiempo en ese plató que en mi casa, me he dejado profesional y personalmente las vísceras, he llorado, he reído, y por supuesto he sido completamente leal, honesta y obediente al programa y a su dirección.

Ni me consta ni lo creo. Los futbolistas no necesitan la ayuda de Pipi para conseguir ningún teléfono, ha sido una excusa para echarnos. Algún día me gustaría saber el verdadero motivo.

¿Crees que tu despido, de forma individual, ha sido injusto?

Muchísimo. Ha sido cruel y humillante, no han tenido ningún tipo de humanidad conmigo, no me merecía el trato que me dieron. Me lo tomé con mucha rabia e indignación, pero cuando nos confirmaron que nunca más volveríamos, me dio todavía mucha más rabia e indignación.

¿Emma García apostó por vuestro regreso?

[Risas] Si yo hablara... pero nunca lo haré.

Eres una habitual de los programas de corazón y/o entretenimiento. ¿Por qué crees que la gente es tan crítica con este tipo de formatos?

La culpa la tienen los colaboradores o tertulianos que radicalizan, hacen juicios de valor injustos, inventan noticias, vamos, que se pasan de la raya. Deberían ceñirse más a la verdad, contrastar sus datos y tomárselo todo con más humor. En la llamada prensa rosa se miente mucho.

¿Qué es lo mejor y lo peor de tu profesión?

Lo mejor es hacer lo que me gusta, me encanta comunicar, me encanta el show, me encanta todo lo que conlleva la televisión. El don de comunicar se tiene o no se tiene. Lo peor es la envidia que tiene la gente.

¿Cuál es el objetivo de Miriam Sánchez en televisión?

Desarrollar mi bis cómica, que últimamente se ha visto bastante impedida por los acontecimientos que todo el mundo sabe, y ¿por qué no? llegar a tener mi propio espacio y ser presentadora.

¿Tienes algún proyecto del que nos puedas adelantar algo?

Tengo varios sobre la mesa que estoy rechazando o posponiendo. He dicho que no a un reality show porque estoy en medio de una catarsis personal que necesito solucionar. En unas semanas podré contar algo en lo que estoy involucrada, pero también estoy haciendo cosillas de publicidad.