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La cadena vasca estrena desde esta semana los 16 nuevos capítulos correspondientes a la cuarta temporada de esta serie. La nueva temporada se emitirá antes del 'Teleberri'.
Euskal Telebista estrena este lunes la cuarta temporada de la teleserie 'Monk'. Los nuevos casos del neurótico detective de San Francisco se podrán seguir cada tarde de lunes a viernes en el segundo canal de ETB a partir de las 20:10 horas. La serie viene a cubrir el hueco dejado este verano por el concurso 'Intuición', del cual tan sólo se emitieron algunos programas debido a su pésima audiecnia.En esta nueva temporada, que consta de 16 episodios, Monk seguirá investigando los casos más enrevesados mientras lucha contras sus innumerables fobias. En el primer episodio titulado El Señor Monk y el otro detective, trabajará con el detective Marty Eels en el caso de asesinato de un guardia de seguridad, el robo de una joyería y la desaparición de su dueño.
Además, este año el actor Tony Shalhoub que interpreta el personaje de Adrian Monk, ha sido reconocido por tercera vez como mejor actor de comedia por su papel en dicha serie al recibir un Emmy, premio que ya había logrado la temporada pasada y en el año 2003.
Adrian Monk fue en su día la estrella en auge del departamento de policía de San Francisco, legendario por utilizar unos medios poco convencionales para resolver los casos más desconcertantes del departamento. Pero después del trágico asesinato de su esposa, aún sin resolver, el devastado Monk se convirtió en un maniático compulsivo. Su desorden psicológico le ha provocado un miedo anormal a prácticamente todo; gérmenes, a las alturas, a las multitudes... Finalmente, estas excentricidades de Monk le acabaron costando su trabajo.
Monk, finalmente, decidió contratar a una enfermera profesional, Sharona Fleming, quien se mostraba siempre dispuesta a ofrecer su ayuda, incluso cuando la más simple de las tareas. Mientras le ayudaba con estas cosas, Sharona se convirtió también en ayudante de sus investigaciones.
Cuando Sharona le abandona para mudarse a Nueva Jersey, Monk se ve una vez más incapaz de hacer las labores cotidianas del día a día, centrándose sólo en sus investigaciones. Poco a poco se iba volviendo loco hasta que conoce a Natalie Teeger, una madre soltera que trabaja de camarera. Ella será ahora su ayudante.
Trabajando ahora como detective privado, Monk continúa investigando casos de forma poco convencional. Aunque ya no es un miembro del cuerpo de policía, su antiguo jefe, el capitán Leland Stottlemeyer, sigue consultando con él para que le ofrezca su punto de vista único en casos donde la policía está en un callejón sin salida.
Stottlemeyer es un detective altamente condecorado, pero sabe que nunca será tan bueno como el ilustre Monk. Mientras, el teniente Randall Disher aspira a convertirse en el nuevo hombre fuerte del departamento y aprovecha cada oportunidad para adorar a su oficial jefe.