PROGRAMACIÓN ESPECIAL

La "fiebre del oro" llega a la parrilla de Cuatro con 'Callejeros' y '21 días'

'Callejeros' mostrará a quienes han decidido desprenderse de su patrimonio para poder afrontar la crisis.

Por Redacción El 18 de Abril 2013 | 08:11

La "fiebre del oro" será la protagonista de una programación especial diseñada por Cuatro y formada por los reportajes '21 días buscando oro' (jueves 18, 0:15 horas) y 'Callejeros. Vendo oro' (viernes 19, 23:30 horas).

El oro es el metal precioso más buscado de la historia. Símbolo de opulencia y de nobleza desde el principio de los tiempos, este elemento químico es hoy un objeto codiciado en nuestra sociedad, una sociedad dividida en este caso entre los que lo buscan arriesgando su vida y los que lo venden para intentar escapar de la crisis.

Adela Úcar viaja hasta Perú para buscar oro

Perú es el sexto productor mundial de oro y el primero de Latinoamérica, con 150 toneladas extraídas en 2011. Mientras en el resto del mundo, incluida España, los yacimientos auríferos están prácticamente agotados, en el país andino la extracción del oro es una actividad floreciente que en 2010 reportó al país más de 7.000 millones de dólares y que ha dado lugar a una economía sumergida formada por buscadores de oro artesanales, personas que intentan extraer el metal al margen de la ley en situaciones de extrema inseguridad.

'21 días buscando oro'

'21 días buscando oro' abordará la historia de Faustino Puquio y su esposa Fermina. Desde hace años, ambos viven y trabajan en Santa Filomena, un poblado minero ubicado en una cima aislada, inhóspita y desértica de Los Andes peruanos. La fiebre del oro ha llevado hasta allí a 5.000 personas dispuestas a soportar condiciones de vida muy duras, sin agua ni infraestructuras básicas. Como le cuenta Faustino a Adela, nadie viviría allí si no hubiera oro.

Fermina y Faustino se la juegan cada día, lo saben y lo aceptan sin reparos. Todo porque su único objetivo es que sus tres hijos puedan estudiar para que, como confiesa Faustino, "no sean como nosotros, para que sean algo el día de mañana".

Esa es también la lucha de Lucía, una mujer fuerte, a la que la vida ha jugado malas pasadas y la ha empujado a este paraje inhóspito. No hay futuro en la ciudad ni probabilidad de salir adelante. En estas montañas la vida es dura, pero poder encontrar oro es su pequeña parcela de esperanza.

'21 días buscando oro'

'Callejeros', vender oro para paliar la crisis

El programa de reportajes de Cuatro mostrará el próximo viernes en 'Vendo oro' la otra cara de la moneda: personas que en su día pudieron hacerse con piezas de oro de las que ahora están obligadas a desprenderse con el fin de burlar la crisis.

El negocio del oro ha experimentado un boom en el último lustro, llegando casi a los 18.000 establecimientos donde adquirir o desprenderse de este preciado metal. El motivo: "este país se está desangrando" según Julio, el propietario de uno de estos negocios. "Las familias tienen que vender el oro que tienen por casa para seguir adelante", llegando a situaciones extremas. "Me ha llegado una señora hace poco con un empaste de oro y me ha entregado la muela aún sangrando, se la había arrancado para venderla" relata la dependienta de otro compro-oro en Granada, mientras sostiene una dentadura de oro valorada en unos 460 euros.

Igual de angustioso es el caso de Carmen, quien tuvo que vender un collar de su abuela para poder subsistir. Ahora su joyero está vacío: "llegué a tener 2.000 o 3.000 euros en oro y todo lo he vendido para intentar salvar mi casa, al final no tengo ni el oro ni un techo propio". Tras tener que dejar su piso por un impago superior a los 7.000 euros, ella y su marido se han trasladado a vivir a casa de su madre, los tres están parados y sin ingresos. "Tener que vender tu oro para poder comer un trozo de carne es muy duro, hay que estirarla al máximo porque no sé cuándo podré volver a comer carne", confesó Carmen.

María del Socorro vive una situación similar a la de Carmen. Su madre falleció hace un par de semanas y ahora se encuentra en la desagradable tesitura de tener que vender el anillo de matrimonio que heredó de su madre "para poder comer porque somos cinco en casa, todos parados, y vivimos de la pensión por discapacidad de mi hija, una cantidad insuficiente".

"En los últimos años se ha producido una fiebre del oro", según uno de los principales mayoristas que operan en nuestro país. "Prefiero no dar la cara por miedo a que me vean en la tele y me puedan seguir", es uno de los riesgos de exportar a diario casi 30 kilos de oro, o lo que es lo mismo, facturar al año 48 millones de euros, ya que según cuenta la ganancia no es tan grande, apenas 100 o 200 euros brutos.