Andoni Ferreño, conocido actor y presentador español, ha estrenado con éxito la serie '5 viudas sueltas', en Caracol TV, el 27 de mayo, y en Telemundo un día después. Se emite diariamente y cuenta la historia de cinco mujeres que solamente tienen una cosa en común: todos los domingos se encuentran en la cárcel cuando visitan a sus hombres, que por un error, por una injusticia o por un descuido, las hicieron viudas estando vivos...
El actor español Ferreño da vida a un ginecólogo de España: "Les gusté, me llamaron, yo fui encantado y escribieron la historia de un médico español que está casado con una mujer colombiana", cuenta en esta entrevista a FórmulaTV.com.No es este su primer papel en una producción latinoamericana; anteriormente ha trabajado en 'La Pola'. El actor asegura que "les parece algo tremendo hablar como lo hacemos nosotros, por la fuerza que tenemos hablando, por cómo matizamos... A mí en '5 viudas sueltas' me permitieron que introdujera mis giros españoles, que hablara con mi acento, porque si no, no hubiéramos podido hacerlo".
Conocido en nuestro país por presentar varios programas, este vasco se ha puesto al frente de formatos como 'Verano 3' (Antena 3), 'Entre amigos' (Telemadrid) o 'Bellezas al agua' (Telecinco). No obstante, ahora se decanta por el teatro y las series y prefiere dejar la presentación a las nuevas generaciones: "Creo que aportaría muy poco a eso. Hay gente muy buena ahora mismo y joven. En su día, irrumpí y sustituí a gente que no tenía nada que aportar ya y entré yo. Hay que saber retirarse a tiempo".
Gracias a Dios parece que sí [risas]. Primero fue RCN con 'La Pola', un éxito a nivel casi mundial, por desgracia no llegó a España, aunque quizá llegue algún día, y ahora ha sido Caracol, el otro canal fuerte, el que me ha llamado para hacer '5 viudas sueltas', que se estrenó con gran éxito.
Y en Estados Unidos se estrenó a través de Telemundo
Sí. Ellos tienen un mercado muy interesante, muy importante; producen para el propio país, pero pensando también en un mercado casi a nivel mundial. Grandes productoras como Warner, Fox y Sony ya están metidas ahí.
Das vida a un ginecólogo...
Sí, doy vida a un médico español. Este papel, en un principio, no estaba escrito para un actor español; ellos decidieron que, para hacer más internacional la serie, por qué no traer a un actor español. Me vieron en 'La Pola', les gusté, me llamaron, yo fui encantado y escribieron la historia de un médico español que está casado con una mujer colombiana. El hombre tiene un nivel social muy alto. En un momento dado, por una denuncia, acaba en la cárcel y todo su mundo se viene abajo.
Este señor se ve envuelto en una historia terrible: su familia y sus amigos le abandonan, él se queda ahí, es un desastre. Hay una visitadora médica, Marianela, interpretada por Andrea Gómez, una actriz preciosa y maravillosa, que intenta conectarle con el mundo exterior, sacarle de la cárcel... La historia se desarrolla durante toda la novela y ocurren muchas cosas. Hago un papel muy diferente al que hacía en 'La Pola'. Allí, era un personaje clásico, histórico, y aquí es un personaje actual.
En alguna ocasión has afirmado que dar vida al doctor Melguizo te ha cambiado, ¿en qué sentido?
Ha cambiado mi imagen en los países donde han visto 'La Pola'; ahí hacía un personaje clásico, del siglo XVII. Al hacer ahora un personaje actual, la imagen que tenían de mí ahí cambia. Me llegan whatsapps y tuits de gente que ha visto una serie y está viendo la siguiente y se congratulan del cambio, de la diferencia de registro en ese sentido. Y lo agradecen, porque que un español vaya ahí y pase por el periplo de ocho y diez meses rodando fuera... Ellos son muy agradecidos, muestran mucho cariño.
Tanto en 'La Pola' como en '5 viudas sueltas' das vida a personajes españoles. ¿Crees que te has convertido en una especie de comodín, en el sentido de que si hace falta un actor español, tienen tu curriculum y ya saben quién eres?
Como comodín no sé. Nosotros tenemos un acento muy duro, muy fuerte. O escriben diciendo que el personaje es para un español o no podríamos hacer nada. Yo no podría hacer de colombiano; el acento colombiano es muy difícil de imitar. El acento neutro, como lo llaman en México, para nosotros no deja de ser un acento mexicano. Que nosotros hablemos nuestro propio idioma con nuestro acento, o lo defines muy bien como un personaje español, o no merece la pena. Les parece algo tremendo hablar como lo hacemos nosotros, por la fuerza que tenemos hablando, por cómo matizamos... A mí en '5 viudas sueltas' me permitieron que introdujera mis giros españoles, que hablara con mi acento, porque si no, no hubiéramos podido hacerlo.
¿Cuál es el vínculo entre estas cinco viudas sueltas? A pesar del título, ¿hay algo en común?
'5 viudas sueltas' significa "cinco viudas solas", o sea, cinco mujeres solas. Son cinco mujeres que tienen a sus maridos en la cárcel.
"Aportaría muy poco si presentara programas hoy. Hay gente muy buena ahora mismo"
¿Cuánto tiempo te ha costado rodar esta novela?
He estado ocho meses a las órdenes del gran Peto, el director. Es uno de los inventores de 'Sin senos no hay paraíso', allí se decía así; a España llegó como 'Sin tetas no hay paraíso'. Es el hombre de los grandes éxitos en Caracol, junto con Dago, el gran director de cine. He tenido la suerte de trabajar con Sergio Cabrera y con Peto, dos de los grandes directores que hay no solo en Colombia, sino en el mundo latinoamericano.
¿Qué te llevó a aceptar esta experiencia?
Para hacer 'La Pola' me llevó Sergio. Quería que yo hiciera un personaje, me llevó para siete meses y me quedé quince. Era una serie complicada, con muchos exteriores, una superproducción... Se les fue de las manos por muchos motivos y estuvimos más tiempo. En cambio, en 5 viudas sueltas' estuve ocho meses, lo que estaba previsto. Ha sido un auténtico privilegio trabajar con esta gente; muchos de ellos compaginan Hollywood con Colombia. Trabajan en España, en Italia, en muchos países... Ha sido una gran suerte haber coincidido con ellos y que me llevaran.
Decías que estas dos telenovelas en las que has trabajado no han llegado a España, ¿crees que las veremos aquí?
'La Pola' ha sido un éxito mundial, con capítulos que superaban el 50% de share. Los actores, no solo colombianos, son "top ten". Segio es un director que se maneja en ese ámbito. Tanto en Estados Unidos como en Latinoamérica ha sido un escándalo de audiencia. Nosotros éramos los de 'La '; no Andoni Ferreño, etc., sino "los de 'La Pola'". Y eso marca. Cuando llegué a Caracol a hacer '5 viudas sueltas', llevaba el marchamo de "el de 'La Pola'". No sé si he dado el nivel o no que se me ha exigido, pero llevabas esa especie de insignia detrás. Creo que llegará a España, espero que se vea este trabajo en el que siete protagonistas éramos españoles.
En España las cadenas no apuestan mucho por las telenovelas, salvo Nova, en la que este género es el más visto de su franja en la TDT...
En España se menosprecia el término "telenovela". Nosotros lo que hemos hecho allí no son telenovelas; están a un nivel muy por encima de lo que la gente entiende aquí por culebrón o telenovela. Eso es más venezolano, mexicano, de Miami... Colombia ha descubierto que haciendo grandes producciones pueden exportarlas al resto del mundo, es su gran mercado.;
Por eso, actores como Diego Cadavid o César Mora son estrellas casi mundiales, están trabajando en Hollywood. Estamos acostumbrados a que todo lo latinoamericano es como algo menor, cuando estamos en un craso error porque ellos, a nivel de venta mundial, están muy muy por delante de nosotros. Nosotros hacemos cosas más locales, más nuestras, para España. En Colombia, no en Venezuela, han descubierto que el mercado latinoamericano es muy amplio y que internacionalizando el producto, llega a gran parte del mundo y tiene más proyección.
"En España se menosprecia el término 'telenovela'
Has dicho en alguna ocasión que en España no se escribe para actores como tú, por la edad...
Sí y no. No como yo. Todos pasamos por un proceso generacional, donde ni somos los galanes de 25 años ni todavía estamos como para hacer de padres de los protagonistas. Eso le ha pasado a todos los grandes actores de este país. Echo de menos series en las que se hable más de problemas de adultos; también tenemos derecho a contar nuestras historias. Es una opinión muy personal. En Colombia los protagonistas son siempre gente de una cierta edad, donde se cuentan historias de una cierta edad y donde los jóvenes están ahí aprendiendo. Yo aprendí de mis mayores; los protagonistas no éramos los jóvenes, sino los mayores. Echo en falta eso, que cuenten historias para gente de nuestra edad también.
Aquí ocurre todo lo contrario: se encuentra una pareja joven protagonista que tenga tirón y todas las historias giran en torno a ellos, como si estuvieran totalmente en un segundo plano.
Sí, puede ser. En España se hace una gran ficción, hay grandes series. Adolezco que se cuenten historias para gente de entre 40 y 60 años, que también tenemos cosas que decir. No todo historias de gente joven porque no deja de ser una sucesión de historias de gente joven, que me parece fantástico, mis hijos las ven encantados, tienen su público, pero también yo quiero que me cuenten cosas de la problemática que tenemos la gente de nuestra edad.
Entre producción y producción, teatro.
Sí, siempre. Soy un hombre de teatro.
Y te arriesgas como director de teatro. ¿Uno tiene que dar ese paso para decir "estoy aquí"?
No, no es necesario. Uno lo hace por una serie de circunstancias. Con "Hay que deshacer la casa" di el salto a la dirección porque era una versión mía de una función de mi maestro Sebastián Junyent y quise dirigirla yo porque, ya que que había hecho la versión, me sentía en la obligación de respetar eso que había escrito. Quizá otro director lo hubiera hecho mejor que yo, sin duda, pero yo me sentía en la obligación moral de respetar el recuerdo de mi maestro Sebastián Junyent. Creo que no dirigí la obra del todo mal, eso ha dicho la profesión. Pero no lo hice por decir "yo estoy aquí, os voy a demostrar que también soy director y productor"... Yo, a nivel personal, tengo las medallas suficientes; lo que quiero es trabajar y divertirme con mi trabajo, que es lo que más me gusta en el mundo y demostrar a la gente que puedo aportar algo más, pero sin ser el adalid de nada.
¿En qué estás inmerso ahora?
En un proyecto muy ilusionante con Arturo Fernández. Es la consecuencia y la sucesión de una serie de acontecimientos, de citas, de reuniones y de persecución desde hace tiempo por parte de ambos. Espero que tenga un buen final. Y sigo con el teatro: acabando la gira de "Hay que deshacer la casa" y preparando mi próximo proyecto teatral, que va a ser una comedia.
¿Cómo va a ser esa comedia?
Será alta comedia, creo que falta ese salto a la alta comedia que sí se hace en Estados Unidos, en Inglaterra... En España hay una comedia fantástica en la televisión, pero existe un espacio para la alta comedia. En eso estoy. Y en el teatro, también. Quiero ser el gran imitador de Arturo Fernández.
Ahora mismo sí la tendría clara porque llevo tres años en Colombia y tengo familia, mujer y dos hijos. Han sido tres años muy duros, esto es como la mili. Cuento mis aventuras en Colombia como otros cuentan sus aventuras en la mili: los cinco minutos divertidos, pero nadie cuenta lo que es la soledad de una persona. Ahora mismo, yo me quedo con mis 13 capítulos en España; y dentro de dos años, igual los 150 de Colombia. Quiero seguir en España, creo que tengo un público aquí, la gente en la calle me lo demuestra y me sigue reconociendo y queriendo. Me tratan con mucho respeto. Y tengo un público latinoamericano en España que me reconoce por esos trabajos que he hecho fuera. Se lo agradezco; son como mis hermanos.
¿Notas mucho cambio en la televisión de hoy en día respecto a esa televisión que tú conociste muy bien?
No soy un estudioso de la televisión; soy un profesional de la televisión, pero no un estudioso. Hay cosas que son muy malas y otras que son realmente muy buenas. Y creo que hay cosas más buenas en la televisión en España, a nivel nacional, que malas. Hay cosas que a ninguno nos gustan, todos sabemos de lo que estamos hablando. Están ahí, tienen su público... Pero hay cosas realmente muy buenas, como la ficción. Está a unos niveles espectaculares. Creo que habría que hacerlo más internacional; sobre todo dirigido a ese mercado latinoamericano. Hablamos el mismo idioma, tenemos esa virtud. Yo no puedo hacer una cosa para los ingleses, pero sí podemos hacerla para Latinoamérica y gran parte de Estados Unidos. Creo que se podrían hacer cosas menos localistas y más internacionales. Aun así, hay series en España que son un prodigio, desde mi punto de vista.
¿Ya no te atrae presentar programas?
Creo que aportaría muy poco a eso. Hay gente muy buena ahora mismo y joven. En su día, irrumpí y sustituí a gente que no tenía nada que aportar ya y entré yo. Ahora yo me he tenido que ir y entra otra gente; ellos son los que aportan y yo no. Hay que saber retirarse a tiempo. Creo que sí podría presentar bien una gala, pero dudo que aportara más de lo que ya hice: he cantado, he bailado... Si hay que hacerlo otra vez, lo hago, pero hay gente joven, con mucho talento, guapa, que puede hacerlo, y lo hace, estupendamente.
Los de siempre siguen en la televisión...
[Risas]. No creo...
Jesús Vázquez, Agustín Bravo... empezaron contigo.
Sí, pero yo hablo por mí. Los jóvenes tienen otra frescura, como la que propusimos nosotros en los noventa. Hay que asumir el paso del tiempo y uno tiene que dedicarse a otras cosas. Puedo aportar más en el teatro o en las series de televisión que en la presentación de programas.
¿Crees que '5 viudas solas' podría tener una adaptación en España?
Sí. De hecho, las últimas series colombianas se están adaptando en todo el mundo. Trabajé para Fernando Gaitán, el autor real de 'Yo soy Betty, la fea', la serie que se ha vendido en todo el mundo, que fue el que nos llevó junto con Sergio Cabrera a hacer 'La Pola'. Ahora está esta gente de Caracol, Peto, Dago... que son los inventores de 'Sin senos no hay paraíso', 'Pablo Escobar'... Deberíamos fijarnos más en lo que están haciendo en Latinoamérica, cosas realmente buenas.