Jordi Évole ('Salvados'), que recibió el galardón al mejor reportero en los XV Premios Iris, explica en una entrevista concedida a la revista de la Academia de Televisión sus comienzos en este medio de comunicación, como periodista en el informativo del canal catalán local Súper 8: "Lo que hacíamos en Viladecans [Barcelona] era lo mismo que hacemos ahora [en 'Salvados' en laSexta], pero con menos medios. El espíritu era el mismo: salir a buscar historias e intentar contarlas".
En el año 2000 entró a formar parte de la productora El Terrat, propiedad de Andreu Buenafuente, como guionista; lo que le hizo "ilusión" porque él era espectador de los programas del humorista catalán "y también fan". "Me apetecía mucho irme al otro lado, en el sentido de pasar de contar las noticias en serio a reírme de ellas. Fue una experiencia fantástica", reconoce.
Jordi Évole
Évole lo tiene claro: sus referentes periodísticos son Iñaki Gabilondo ('Iñaki', 'Hoy'), Julia Otero ('Entrevista a la carta', 'Las cerezas'), con una línea que considera "muy coherente dentro de la profesión", y Xavier Vinader, "un periodista de investigación tremendo, un ejemplo de perseverancia". Y personas como Pablo Motos, Jorge Salvador o Tinet Rubira, "que han exportado formatos a Estados Unidos o China", merecen su "reconocimiento absoluto".
"El traje de cómico estricto me venía bastante grande"
Asimismo, el conductor de 'Salvados' explica cómo surgió el personaje de "El Follonero", característico de las primeras temporadas del programa de laSexta. "Fue durante unos ensayos en los que Jose Corbacho empieza a meterse con Andreu. A todos nos hizo mucha gracia, pero él no podía hacer el papel porque ya era conocido". Llamaron a un actor que pidió demasiado por hacerlo y Andreu le dijo a Évole: "Lo vas a hacer tú y gratis". No se lo pensó mucho y decidió interpretar ese personaje. "Creo que gracias a mi 'gratuidad' conseguí el papel", bromea.
A Buenafuente le gustó el personaje de "El Follonero", por lo que tenía que seguir saliendo. "Ahí es cuando se complicó porque yo a veces no dominaba la escena", aunque agradece que el humorista fuera "generoso" con él y no le "ridiculizara" demasiado. "Con la perspectiva del tiempo, creo que el traje de cómico estricto me venía bastante grande".
"El Follonero dejó de ser la voz del espectador y pasó a ser la voz de la calle"
Sobre el momento en el que en el programa 'Buenafuente' "El Follonero" deja de ser la voz del espectador y pasa a ser la voz de la calle, Évole comenta que esta transición fue "bastante casual". "Un día decidimos que El Follonero saliera a la calle a hacer reportajes". Funcionaban y fueron ampliando su tiempo en el programa. "Pensamos que, a lo mejor, podían convertirse en formato. Con las elecciones generales de 2008 llegó 'Salvados por la campaña'" y hasta hoy.
"Nos juntamos algunos compañeros", algunos pertenecían a 'Buenafuente', "de una manera un poco 'amateur'". Así, experimentaron lo que era hacer un programa "desde nuestra propia responsabilidad". "Cuando estábamos con Andreu siempre había alguien que te salvaba un poco los muebles. A partir de ahí, éramos nosotros los que teníamos que dar la cara por cualquier contenido que hacíamos".
"En 'Salvados' entrábamos en los sitios de una manera poco habitual en televisión"
También en esta etapa experimental de 'Salvados' hubo entrevistas difíciles: "En 'Salvados por la Iglesia', hubo grupos ultracatólicos que se enfadaron mucho. Boicotearon la publicidad de 'Salvados' y consiguieron que algunas marcas retiraran sus anuncios". Fue en este momento cuando pensaron que "no iba a ser nada fácil". "Entrábamos en los sitios de una manera poco habitual en televisión", relata, "utilizábamos infiltrados, hacíamos preguntas muy directas".
El presidente catalán, Artur Mas, y Jordi Évole, en 'Salvados'
"El espectador también quiere ver contenidos alternativos"
Según Évole, en televisión, hay que "desterrar la frase 'Le damos al espectador lo que quiere ver'", pues, asegura, "se demuestra, temporada tras temporada, que el espectador también quiere ver contenidos alternativos. Lo único que falta es voluntad de riesgo por parte de las cadenas y por parte de los que hacemos programas, para desmarcarnos de las líneas más experimentadas e ir por las más experimentales".
Ellos experimentaron con otro tipo de entrevistas en "Borrando a ETA" y "Reiniciando Euskadi". "Seguramente no estaríamos donde estamos, si no hubiéramos arriesgado en determinados momentos". Évole considera que la entrevista a Arnaldo Otegi no le "entusiasmó demasiado" a ninguno de los dos; "podríamos haber hecho una mejor entrevista". "Veníamos de un programa de entretenimiento, de humor y, de golpe y porrazo, nos enfrentábamos a auténticos 'miuras' como Otegi o José Barrionuevo. El formato ha ido creciendo con nosotros y quizás ahora somos un poco más responsables y menos gamberros. El programa ha crecido lo que necesitaba para que nosotros nos lo siguiéramos creyendo".
"Hemos tenido la carambola de que la filosofía del programa coincide con los gustos de los espectadores"
'Salvados' alcanzó su máximo histórico de audiencia el domingo 3 de febrero ("Cuestión de educación"), con la llegada de la nueva temporada: 4.307.000 espectadores (19,8%) siguieron el programa. Un programa que logró el minuto de oro, con 5.307.000 telespectadores (23,6%) a las 22:22 horas. Ese mismo día la audiencia media de laSexta fue de un 7,6% de share.
Este "excepcional" momento lo han vivido "casi como una anomalía". "No es normal que un programa con un contenido como el que tenemos nosotros esté alcanzando esas cuotas". "Mientras dure hay que aprovecharlo y, sobre todo, no bajar la guardia". Para mantener ese nivel de audiencia, considera prioritario "no cambiar los objetivos del programa". "Hemos tenido la carambola de que la filosofía del programa coincide con los gustos de los espectadores. Estamos haciendo lo que nos apetece y con un seguimiento que no esperábamos. Eso ahora mismo es un lujo".
Para Évole, lo más sorprendente que han vivido es la inclusión de la entrevista al expresidente de Baleares, Jaume Matas, en el sumario del caso Nóos. "La repercusión no la buscas. Muchas veces te genera días de estrés, de sobreexposición, en los que no siempre estás cómodo. En esos casos, el programa siempre ha decidido dar un paso atrás".
Jordi Évole, en una entrevista en la entrega de 'Salvados' dedicada a la educación
"No nos pagan más por dedicarle más horas, pero hay ganas de dedicarle más horas"
Las cabeceras de su programa son diferentes en cada entrega; lo que conlleva más trabajo: "Que haya esa calidad cinematográfica en las cabeceras que tiene 'Salvados' es mérito del equipo de realización, de posproducción, de guion y de contenidos. Es para quitarse el sombrero. No nos pagan más por dedicarle más horas, pero hay ganas de dedicarle más horas".
Sobre el equipo que trabaja con él en el espacio de laSexta, destaca su "implicación con el proyecto". "Le han dotado de alma. Para mí, que un formato televisivo, que un trabajo periodístico, tenga alma es fundamental porque eso se acaba transmitiendo al espectador".
Lo más leído
Por lo que respecta a proyectos televisivos que le gustaría desarrollar, Évole se decanta por "volver a estar detrás de las cámaras y tener más tiempo para hacer un programa documental. No ir con el ritmo que te impone la producción televisiva, que es una auténtica locura. Hacer lo que hacemos en 'Salvados', pero con mucho más tiempo"