Telecinco estrena este jueves, 4 de julio, en prime time, el primero de los dos episodios de la TV movie 'Mario Conde. Los días de gloria'. La intervención de Banesto en 1993, presidido en ese momento por Mario Conde, fue la primera realizada en la historia de España. Dos décadas después, los entramados político-financieros vuelven a estar de actualidad, debido a la crisis económica y financiera, es por ello por lo que Mediaset España ha decidido lanzar ahora esta película para televisión que la cadena rodó hace ya dos años.
Este thriller político-económico tratará de aproximarse a la figura de Conde y responder a interrogantes como los siguientes: cómo un brillante abogado del Estado logró llevar a cabo la mayor operación financiera hasta el momento en España, cuáles fueron las claves para que un inteligente joven de origen humilde pudiera acceder a la presidencia de Banesto y convertirse en uno de los hombres más poderosos del país, cómo se hacían los negocios en las altas esferas de la economía española en los años ochenta y noventa, quiénes controlaban el "sistema" o qué papel desempeñaron el Gobierno y la oposición en la intervención de la entidad bancaria.
Intrigas financieras, luchas de poder, ambición, operaciones arriesgadas y conspiraciones al más alto
nivel se dan cita en esta TV movie de dos entregas, dirigida por Salvador Calvo ('La duquesa I y II', 'Alakrana', 'Paquirri') y producida por la cadena en colaboración con José Manuel Lorenzo (DLO Producciones), en la que Daniel Grao ('Isabel', 'Luna. El misterio de Calenda') encarna a Mario Conde, paradigma del triunfo empresarial en las décadas de los ochenta y noventa que a los 39 años ocupó la presidencia de una de las siete entidades más importantes de la banca española.
Completan el elenco de protagonistas Francesc Orella ('Alakrana', "Smoking Room"), Mariona Ribas ('Hospital Central', 'El internado') y Juan Carlos Vellido ("Piratas del Caribe. En mareas misteriosas", 'La duquesa II'), como Juan Abelló, Lourdes Arroyo -la mujer de Conde- y Arturo Romaní, respectivamente.
Esta ficción, con guion de Helena Medina ('23-F. El día más difícil del rey', 'Operación Jaque'), cuenta también con la participación de conocidos intérpretes del panorama nacional como Pedro Casablanc ('Motivos personales', 'Hospital Central'), Mikel Tello ('Los misterios de Laura', 'Amar en tiempos revueltos'), Manolo Solo ("El laberinto del fauno", "Celda 211"), Berta Gómez ('Hospital Central', 'El comisario') y Ángel Hidalgo ("Los fantasmas de Goya", 'La duquesa II'), entre otros actores.
Rodada en escenarios naturales y urbanos de la Comunidad de Madrid y basada en el libro homónimo del famoso empresario gallego, 'Mario Conde. Los días de gloria' recrea la incesante búsqueda del éxito en los negocios, el complejo entramado financiero y el acecho del poder político que marcaron su vida, desde su asociación con Juan Abelló hasta su ingreso en prisión.
Mario Conde, de símbolo del triunfo empresarial a acabar en prisión
Mario Conde, número uno de su promoción como abogado del Estado con la calificación más alta de la historia de ese cuerpo, se convierte en 1984 en accionista de Antiobióticos S.A. con un 23% del capital social, firma de la que Juan Abelló posee algo menos del 50% y los hermanos Jaime y Emilio Botín, otro 23%. Junto a sus socios, culmina en 1987 la venta de la empresa a la multinacional italiana Montedison por 450 millones de dólares, la operación económica más importante realizada en España hasta la fecha y punto de arranque de la TV movie.
Conde y Abelló invierten el dinero ganado en la operación en la compra de una importante participación del capital de Banesto, entidad de la que son nombrados vicepresidentes. Poco después, el Banco Bilbao Vizcaya lanza una OPA (oferta pública de adquisición) hostil sobre Banesto, la primera en la historia de la banca española, situación que el gallego logra ganar tras convencer al consejo.
En 1987 es nombrado presidente de Banesto, pero poco después de su llegada al banco, su amigo y socio Juan Abelló decide salir de la entidad. Su carisma y su talento para las relaciones sociales y los negocios le convierten en una destacada personalidad de la sociedad española.
Investido doctor honoris causa por la Universidad Complutense de Madrid en un acto presidido por el rey, Mario Conde goza de gran popularidad en una época en la que el Gobierno de Felipe González (PSOE) atraviesa por sus peores momentos, al tiempo que comienza a ser visto en algunos círculos como una auténtica amenaza.
Los escenarios de la ficción
El Banco de España, el Palacio de la Moncloa, las sedes de Banesto y de JP Morgan, lujosos restaurantes y fincas fastuosas son algunas de las localizaciones que 'Mario Conde. Los días de gloria' ha recreado en diversos enclaves naturales y urbanos de la Comunidad de Madrid y Segovia (Castilla y León).
Encabeza la lista de localizaciones de este thriller la antigua sede de Banesto en la madrileña calle de Alcalá, que volvió a abrir sus puertas para acoger algunas de las secuencias de la ficción. Asimismo, los despachos y salas de reuniones del banco que presidió Mario Conde entre 1987 y 1993 han sido ambientados en la Casa de América.
"Grabar en la antigua casa de Mario Conde y en la exsede de Banesto fue algo mágico", asegura Salvador Calvo, director de 'Mario Conde. Los días de gloria'. "Aunque estábamos llevando a cabo una ficción, rodar donde realmente sucedieron los hechos fue especial. Fue algo que sintió todo el equipo y que dotó de gran energía al rodaje", señala. Por otra parte, la grabación en el inmueble de la calle de Triana fue muy compleja, debido a la gran cantidad de obras de arte que alberga la propiedad y que había que tener permanentemente presentes.
El equipo también ha podido grabar en la que fue la casa del exbanquero en la calle de Triana y ha recreado la finca La Salceda en Toledo y la residencia veraniega de Conde en C'an Poleta (Mallorca) en Las Jarillas, finca de principios del siglo XX situada en el municipio de Alcobendas (Madrid), y en un inmueble de una urbanización de Torrelodones (Madrid), respectivamente. Por otra parte, el Instituto de la Ingeniería de España y el Palacio de Congresos y Exposiciones de Madrid han simulado el Palacio de la Moncloa y el banco de inversión JP Morgan, respectivamente.
Completan los escenarios de la ficción la antigua cárcel provincial de Segovia, inmueble que ha simulado la cárcel de Alcalá-Meco en la que ingresó el empresario gallego, tras ser condenado a prisión, así como diversos hangares de los aeródromos madrileños de Cuatro Vientos y Torrejón de Ardoz, que han representado aeropuertos nacionales e internacionales a los que viajaba Conde en su jet privado para cerrar importantes negocios.
Ejecutivos con pelo engominado y con el rostro bronceado dirigían las altas finanzas de la economía española a finales de los ochenta y principios de los noventa. Esta imagen tan representativa de dicha época ha sido incorporada en la caracterización de algunos de los actores de la TV movie. De manera previa al rodaje, se pidió a Daniel Grao y Juan Carlos Vellido, actores que encarnan en la ficción al presidente y vicepresidente de Banesto, respectivamente, que se sometieron a sesiones de rayos UVA. A partir de este tono bronceado de la piel, el equipo ha llevado a cabo un proceso de caracterización de ambos intérpretes que ha requerido un maquillaje cuidado y gran cantidad de gomina.
Cerca de mil cambios de ropa conforman el vestuario del biopic, en el que destacan los 60 trajes lucidos por Daniel Grao. Tonos oscuros (gris marengo y azul marino) y estampados clásicos (príncipe de Gales) predominan en los trajes del fondo de armario del protagonista, que incluye también ropa de sport (bermudas y polos para las secuencias de las vacaciones estivales en Mallorca) y atuendos de caza (prendas acolchadas y conjuntos en tonos marrones y verdosos). En los distintos consejos de Administración de Banesto, Daniel Grao lleva siempre una prenda fetiche: una corbata granate con motivos de elefantes con la trompa hacia arriba, que simbolizan la buena suerte, un accesorio cedido por Mario Conde, que siempre lucía en esas importantes jornadas.
El vestuario que luce el protagonista es clásico, sobrio y elegante, al tiempo que incorpora un toque de modernidad. "A la elección de las distintas prendas se ha sumado la distinción y el porte con los que las llevaba Daniel Grao. Su aplomo, su manera de caminar erguido y su seguridad en sí mismo llevaron a muchos viandantes a creer, mientras se llevaba a cabo la grabación de la TV movie, que se encontraban ante el mismo Mario Conde", asegura Mediaset España.
"Intentamos mostrar las estructuras del poder y su forma de vida"
"En medio de la tempestad económica en la que nos hayamos actualmente, la idea era hacer un proyecto que explicara el funcionamiento de lo quese ha denominado el 'sistema'. Fue por ello por lo que pensamos en ahondar en un periodo similar de la historia reciente de nuestro país, en el que lográramos encontrar paralelismos y situaciones similares de las que poder aprender alguna lección", explica Salvador Calvo, director de esta TV movie. "Un momento histórico de crisis no solo económica, sino también de valores. El periodo elegido fue de 1987 a 1993, seis años en los que en España se produjo la revolución de todo un sistema y se gestó la 'cultura del pelotazo'".
"La historia de Mario Conde no deja indiferente a sus detractores ni a sus seguidores"
"Para abordar este periodo haciendo un retrato de la clase dirigente del momento, nos basamos en el libro 'Los días de gloria', escrito por Mario Conde, personaje polémico y controvertido que vivió aquella época en primera persona. En él se recoge el ascenso hasta la mayor de las cumbres de una persona de origen humilde y su posterior caída hasta lo más hondo de los infiernos: la cárcel. Es una historia apasionante, que no deja indiferente a nadie, tanto a sus detractores como a sus seguidores", opina Calvo.
"El punto de vista de la TV movie es el de su protagonista, Mario Conde, un joven inteligente, guapo y rico que, a pesar de su extracción humilde, logró alcanzar el poder y la riqueza: el sueño americano a la española. Aunque la historia fluye en torno a él, también se recogen otras opiniones y puntos de vista para intentar comprender las motivaciones de todos los personajes", expresa. "Mostramos a un protagonista con sus ambiciones, flaquezas, errores y aciertos, que para unos se transformarán en virtudes y para otros en defectos".
"La clave ha sido encontrar un personaje sólido como Conde y conflictos universales"
"El referente para contar la historia ha sido la película 'Wall Street' [EE.UU., 1987, dir.: Oliver Stone], mientras que el principal reto al que nos hemos enfrentado ha sido conseguir que los espectadores que carecen de conocimientos económicos puedan seguir la ficción sin problemas y con el máximo interés. La clave ha sido encontrar un personaje sólido como Mario Conde y conflictos universales como la amistad, la traición, los celos o la crisis familiar", añade.
"Algunos movimientos de cámara y encuadres están inspirados en la serie 'El ala oeste de la Casa Blanca' [EE.UU., Aaron Sorkin], pero a nivel fotográfico hemos tenido como referentes largometrajes de finales de los ochenta como 'Nueve semanas y media' [EE.UU., 1986, dir.: Adrian Lyne], 'Al filo de la noticia' [EE.UU., 1987, James L. Brooks], 'La escalera de Jacob' [EE.UU., 1990, Adrian Lyne] o 'Wall Street', título de donde hemos rescatado la importancia de la ciudad como una protagonista más", relata. "Si en la película de Oliver Stone se mostraba el sur de Manhattan [Nueva York, EE.UU.], en la nuestra se muestra la zona entre la calle de Alcalá y el paseo del Prado del Madrid de los ochenta, centro neurálgico en el que se concentraba el poder económico del país".
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"Estos personajes valen más por lo que callan que por lo que dicen"
"Para encarnar a los protagonistas de la TV movie se requería un extraordinario grado de sutileza, ya que en estos personajes siempre es más importante lo que ocultan que lo que dicen. Las miradas, la ironía y los dobles sentidos son muy importantes en esta historia y, por ello, era imprescindible rodearse de grandes actores", indica. "Daniel Grao no solo ha realizado una gran interpretación, sino que el modo de acercarse a la figura de Mario Conde fue curioso", considera. "Dado que por su edad no conocía a Mario Conde, se enfrentó al personaje desde una visión limpia consiguiendo reencarnar a una de las figuras más complejas de nuestra historia", concluye Calvo.