Bea, la marquesa de 'Gran hermano 7', se declara en la ruina tras ser desahuciada de su casa

Un nuevo caso de una exconcursante de 'Gran hermano' a la que la vida no le está tratando muy bien sale a la luz. En esta ocasión se trata de Bea la marquesa, participante de 'Gran hermano 7', que tal y como le declara a Kiko Hernández en El Confesionario de Kiko está desahuciada y arruinada.

Bea explica a Kiko como ha sido vícima de una estafa que ha desembocado en un desahucio, encontrándose actualmente en una mala situación: "Sin casa, sin dinero, sin tarjetas... Mi hijo y yo nos hemos quedado en la calle. Estoy en una situación límite."

Llevándose a cabo el deshaucio de la siguiente manera: "Me han hecho un lanzamiento acusándome por impago porque yo dejé de pagar a la propietaria del piso porque quería recuperar el dinero de los 6 meses por adelantado que pagué, pero el contrato estaba hecho de tal manera que ese dinero estaba a fin de cuentas a fondo perdido. No servía para cubrir meses, se lo embolsaba como penalización."

Tras pasar unos días en casa de su madre, sus intenciones en este momento son las de "buscar una casa. Antes pagaba 1.200 euros que reconozco que es mucho dinero, así que ahora tendré que buscar algo más económico pero de 800 euros no te puedes imaginar los agujeros y las cutreces que estoy viendo... Por Internet parecen una monada, pero cuando vas a verlo está dentro de una corrala."

"En ese tipo de cosas haber salido en la tele me ha perjudicado más que beneficiado"

La marquesa afirma no tener trabajo ni buscarlo: "Tengo 50 años y con esta edad no te cogen en ningún sitio. Tener una imagen creada es un arma de doble filo, la propietaria de mi casa me hizo la vida imposible en cuanto supo quién era."

Más tarde reflexionaba sobre su paso por televisión: "En ese tipo de cosas haber salido en la tele me ha perjudicado más que beneficiado, porque en la tele más vale caer en gracia que ser gracioso, y mi fama en el medio nunca ha sido buena, por eso me daba miedo contar mi situación actual..."

En cuanto la exhabitante de Guadalix de la Sierra cobre la indemnización que cree que le otorgará un juez tras la estafa que sufrió por parte de dos personas que se hacían pasar por médicos y le destrozaron el vientre al realizarle una liposucción, quiere abrir una tienda de ropa e intentar salir de esta situación.