Este domingo, 'Salvados' regresa a laSexta y lo hace con un cara a cara entre dos importantes figuras de la política española, Artur Mas, president de la Generalitat de Catalunya, y Felipe González, expresidente del Gobierno.
Por ello, el conductor del programa, Jordi Évole ha charlado este jueves con 'Espejo público'. "No fue fácil convencerles, las agendas tanto del uno como del otro son muy bestias, además en el caso de González tuvo que desplazarse a Barcelona, porque queríamos que estuviesen en el lugar de los hechos", ha explicado Évole.
"Hay muchas ganas de dialogar, pero no sé si se dan los pasos para el diálogo, incluso cuando en la mesa hay uno de los dos 'contendientes' que es protagonista principal, y otro que aunque está retirado de la política participa en los debates. El primer paso es hablar, y es lo que el programa ha pretendido. Y que sobre todo lo hagan delante del ciudadano para que pueda percibir lo que se piensa en esas alturas políticas", ha declarado Évole.
El presentador ha señalado que les hubiera gustado un cara a cara entre Mas y Rajoy, sin embargo, destacan lo conseguido por el programa, ya que González es el presidente que más años ha estado en democracia. "Y diré una cosa, igual González puede variar en algunas formas o fórmulas, pero en otras coincide con el mensaje que está mandando Rajoy. Cuando el presidente vea el programa, si lo ve, creo que se sentirá identificado con lo que diga el expresidente González".
Jordi Évole
"Tenemos un programa dedicado a la reinserción de presos y otro a la pobreza extrema"
En esta charla con Susanna Griso, el presentador también ha hablado sobre lo que les deparará a los espectadores la nueva temporada. "Tenemos un programa dedicado a la reinserción de presos. Especialmente centrado en el alboroto que causaron las salidas de prisión de muchos presos tras la derogación de la doctrina Parot. También hemos intentado ver cómo los medios de comunicación tratamos ciertos temas, y cómo esto genera alarmas sociales".
Curiosamente, Cake Minuesa, presentador de 'Daños colaterales' en Intereconomía TV, dedicó un programa a este tema ("La derogación de la doctrina Parot: Un ataque a las víctimas"). El periodista también estuvo presente en la rueda de prensa que los expresos dieron en Durango (Bizkaia). Aunque no se aceptaban preguntas, al término del acto, Minuesa se les encaró y les preguntó si sentían arrepentimiento alguno por los crímenes cometidos. El presentador les instó incluso a pedir perdón delante de "todas las cámaras". Este "encontronazo" no pasó desapercibido para nadie, de hecho, pocos días después Minuesa fue amenazado.
Otro de los programas de 'Salvados' estará centrado en la pobreza extrema. Évole y su equipo han acudido a un bloque de viviendas en Parla donde siete vecinos, de treinta y dos, están enganchados a la luz de forma fraudulenta "no porque no quieran pagar, sino porque no pueden hacerlo".
"Me sentí muy satisfecho con la reapertura del caso"
Uno de los programas más conocidos de 'Salvados' es "Los olvidados", dedicado a la tragedia del metro de Valencia, el accidente de metro más grave ocurrido en España con 43 muertos y casi 50 heridos. Tal ha sido la repercusión que ha provocado la reapertura del caso.
"Me sentí muy satisfecho, no sólo por poner un granito de arena en esa historia, ya que antes que nosotros había muchos periodistas que escribían sobre lo ocurrido pero se les ignoraba, la satisfacción me llegó por la gente que pertenece a la asociación de víctimas. Nosotros no podemos inventarnos un programa, si ellos no hubieran luchado día a día, si ellos no hubiesen continuado ahí, no hubiera habido nada que decir", ha señalado Évole.
Antes de despedir a Évole, 'Espejo público' ha recordado una parte del encuentro que el periodista mantuvo con el president de les Corts Valencianes, Juan Cotino, entonces consejero de Agricultura de la Generalitat Valenciana.
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En ese breve acercamiento, Cotino se negó a responder a las preguntas de Évole lo que provocó la exaltación de varios viandantes que pasaban por la zona. "El silencio de Juan Cotino en ese vídeo se proyectó a mucha gente, porque fue un silencio hacia los espectadores, las víctimas y miembros de la asociación".