Acción trepidante, guiones que reproducen los entresijos de la profesión forense, interpretaciones brillantes y las calles de Miami y Manhattan como telón de fondo: éstas son las claves del éxito de las secuelas de 'CSI', hablamos de 'CSI: Miami' y 'CSI: Nueva York'. Telecinco ofrecerá este próximo lunes los finales de la cuarta y la segunda entrega, respectivamente.
Con una audiencia media de 5.162.000 espectadores (27,5% de share), la cuarta entrega del equipo de Miami es la más vista en número de espectadores de la saga 'CSI' en nuestro país (seguida muy de cerca por la segunda de 'CSI: Las Vegas', que registró 5.121.000 espectadores y un 28,1% de cuota de pantalla).
En su franja de emisión, supera ampliamente a las ofertas de la competencia y se sitúa 8 puntos por delante de TVE1 (19,5%) y 13 puntos sobre Antena 3 TV (14,5%). En lo que respecta al target comercial, incrementa en 6,6 puntos su cuota media de pantalla hasta anotar un 34,1% de share.
Por comunidades autónomas, registra un seguimiento mayoritario en Euskadi (32,3%), Canarias (31,9%), Valencia (31,2%), Madrid (30,9%) y Cataluña (30,7%).
Además, con la emisión del episodio titulado "Furia" emitido el pasado lunes 12 de febrero, batió su récord de audiencia de la temporada con 5.905.000 espectadores. Este episodio se convirtió en el más visto de la saga desde 2003 y superó en número de espectadores a la película con mayor audiencia de 2006, "Ice Aged" (5.658.000 espectadores), confirmando su excelente rendimiento de audiencia.
'CSI: Nueva York', otro gran éxito
Los casos de la segunda entrega del equipo de Nueva York han fidelizado a una media de 4.668.000 seguidores, dato que supone un 28% de la cuota de pantalla, y han superado la audiencia obtenida a nivel nacional en Valencia (32,4%), Euskadi (32,1%), Canarias (32,1%), Cataluña (31,6%) y Madrid (29,4%).
En lo que respecta al target comercial, la serie protagonizada por Gary Sinise y Melina Kanakaredes ha registrado un 34,4% de share.
Casos impactantes
Durante su cuarta temporada, el equipo capitaneado por Horatio Caine en Miami ha tenido que hacer frente a asesinatos en diversos escenarios, como fiestas, un seminario para aprender a seducir, un yate o un spa femenino; a casos especialmente complicados como asesinatos en serie, crímenes inspirados en la trama de un videojuego, secuestros y desapariciones a bordo de un barco; y a peligrosos asesinos, como el responsable de la muerte de la mujer de Horatio, jefes de bandas marginales y un criminal al que Caine intentó capturar -sin éxito- en el pasado.
Por su parte, el equipo de Nueva York se ha trasladado a localizaciones emblemáticas de la Gran Manzana, como Central Park, el Museo de Historia Natural, el zoo metropolitano y la bahía de Nueva York; y ha investigado crímenes relacionados con personajes como el regente de un "hospital de muñecas", un playboy neoyorquino, un agente de bolsa o un individuo disfrazado de superhéroe.
Cierre de temporada (Miami)
En el último episodio de la temporada de 'CSI: Miami', titulado "Uno de los nuestros", Antonio Riaz, el asesino que disparó a Marisol el día de su boda con Horatio, continúa en paradero desconocido. "H" y el agente Delko, hermano de la fallecida, siguen su pista. Cinco miembros de la organización Mala Noche están reunidos en una mansión de Miami. Un asistente desconocido llega a la casa e hiere a algunos de los asistentes. Los agentes llegan a la escena y Horatio espera que uno de los fallecidos sea Riaz, pero el criminal ha salido ileso.
Siguiendo diversas pistas, Caine descubre que el asesino de su esposa trabajaba junto a un hombre llamado Rafik Ohmad. El forense consigue localizarlo y Ohmad admite que disparó contra Riaz en la mansión y que puede encontrarlo en el distrito financiero de la ciudad. Delko consigue las cintas de las cámaras de seguridad de la zona y en ellas observan a quien nunca hubieran esperado encontrarse: Marisol. Impactado, Horatio descubre que Riaz solía comprar droga para el grupo de enfermos de cáncer al que Marisol pertenecía y que la usaba para llegar hasta él. Lleno de ira, Caine dispara al asesino de su mujer.
Cierre de temporada (Nueva York)
Por otra parte, en la último entrega de la segunda temporada de 'CSI: Nueva York', que lleva por título "Ataque en Nueva York", el equipo se desplaza a un edificio de oficinas en el que un responsable de seguridad ha sido apuñalado. Mientras investigan el asesinato, una bomba explota y dos agentes quedan atrapados. Durante la explosión, Flack resulta herido y es trasladado en estado grave al hospital.
El equipo rastrea el lugar para reconstruir la explosión y encontrar algún indicio que les lleve a localizar a la persona que hizo explosionar la bomba. Los investigadores descubren que el artefacto era un explosivo militar y, examinando las heridas de Flack, encuentran fragmentos de teléfono móvil. Mac confirma que el asesino usó un teléfono como gatillo: cuando sonó, explosionó la bomba.
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Taylor recibe una llamada del terrorista: el agente será la próxima víctima de una bomba que se activará en las próximas tres horas. El teléfono de Mac vuelve a sonar. Su interlocutor le llama desde la biblioteca de la Universidad de Chelsea. Los forenses consiguen desactivar el artefacto y evitar una masacre, pero no será la única sorpresa que les tiene reservado el misterioso bombardero.