Licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad Autónoma de Barcelona en 1992, Susanna Griso comenzó su carrera profesional dos años antes en Catalunya Ràdio. En 1995, presentó en TV3 el informativo 'Telenotícies' y el programa especial 'Resumen de l'any'. En TVE, en Catalunya, se encargó de presentar el informativo de mediodía.
Llegó a Antena 3 en septiembre de 1998 para presentar junto a Matías Prats la primera edición de 'Antena 3 Noticias' y, posteriormente pasó a conducir Antena 3 Noticias 2. En mayo de 2006 volvió a presentar la primera edición de Noticias, en esta ocasión junto a Roberto Arce, alcanzando el liderazgo de audiencia en esa franja horaria.
Dsede el 11 de diciembre de 2006 Susanna Griso presenta el magazine informativo 'Espejo público', cuya audiencia marca una tendencia ascendente. El programa, que cerró diciembre con una audiencia media del 13,7%, obtuvo en enero un 14,8% de cuota y acumula en febrero una audiencia media del 16,6%.
Con estos datos y en lo que llevamos de año 2007, 'Espejo público' ha logrado situarse por delante de 'La mirada crítica' de Telecinco. El pasado jueves 8 de febrero, el magazine de Antena 3 obtuvo casi la mitad de puntos más que la tertulia de Telecinco. El la franja de coincidencia, el programa de A3 promedió un 25,2%, mientras que el de T5 alcanzó un 14,8% de share.
En varias entrevistas afirmabas no sentirte atraída por el entretenimiento, ¿has cambiado de opinión?
Nosotros estamos haciendo un programa informativo. El hilo conductor es la información, tenemos una entrevista normalmente política, entrevistamos también a muchos autores, escritores, tenemos un debate, un cara a cara, y luego hay unas 20 conexiones de media por programa. Lo que prima es la información. El miércoles, por ejemplo, hubo una comparecencia del presidente Zapatero en el Senado, cortamos y estuvimos unos 40 minutos con esa comparecencia. Considero que sigo haciendo un programa informativo con algún elemento típico de entretenimiento. La frontera entre información y entretenimiento es a veces difusa. La información también pretende entretener.
Después de ocho años en informativos, das el salto a la franja matinal. ¿Qué te sedujo para aceptar la presentación de 'Espejo público'?
Es un programa muy rico, lo tiene todo. Tiene todos los elementos para que a un periodista le interese. Desde la entrevista, que es un género que me gusta, hasta las conexiones o incluso un espacio de humor con Aranguena. Yo siempre digo que es un caramelo.
¿Crees que le falta algo al programa?
Sinceramente, no. Como mucho tiempo, es lo único que a veces desearía. Son tantas las conexiones, las entrevista a hacer, los temas a tratar que a veces sí que desearía media hora más de programa.
Últimamente hay presentadores que no se sienten a gusto con los contenidos de sus programas. Si no me equivoco a ti te ocurre lo contrario, ¿se te nota contenta?
Yo estoy absolutamente encantada con los contenidos del programas, sobre todo, porque yo soy muy co-partícipe de esos contenidos. El programa es un espejo de la sociedad y en el fondo de los intereses de nuestra audiencia y de los nuestros. Nosotros tenemos un lema que es "lo que le interesa a usted, nos interesa a nosotros". Yo soy la primera que cuando creo que un tema pueda interesar porque genera controversia, polémica, suscita dudas, está bien que lo tratemos. No tengo ninguna queja, todo lo contrario. No tengo ninguna queja. Me hago responsable de todo lo que se emite.
El programa debutó el 11 de diciembre tímidamente. Hoy, sin embargo, gracias a 'Espejo público' Antena 3 logra liderar la franja matinal. ¿Cómo lo lleva el equipo?
Se habla mucho de los contenidos, de lo que se emite. ¿Qué hay detrás de 'Espejo público'?
El trabajo de un equipo muy extenso con mucha experiencia. El equipo de 'EP' lleva 10 años en la cadena y tienen una agenda muy buena, muchos contactos y eso se nota. Cuando un personaje es noticia no tardamos mucho en tenerlo en plató. Es un equipo importantísimo que me gustaría que se viese. Es un programa que tiene muchos recursos económicos y humanos por detrás. El equipo cuenta con 30 personas, además de toda la redacción de los servicios informativos que también está a nuestro servicio para lo que nos haga falta.
Llegamos a Antena 3 a las cinco y pico de la mañana. A las 6 ya tenemos programada una reunión donde acabamos de revisar la escaleta, los contenidos y luego yo ya me maquillo y me peino, me visto y durante ese rato aprovecho para leer los periódicos, preparar los contenidos, las entrevistas. Y a las nueva ya arrancamos. Es un programa con mucho ritmo. Yo diría incluso más radiofónico que televisivo, porque está todo abierto, los invitados entran a veces al plató tal y como llegan a la tele. A mi me gusta esa sensación de improvisación, a pesar de que haya muchas horas de trabajo por detrás. 'Espejo público' es un programa muy vivo, muy fresco, muy ágil y muy pegado a la actualidad.
¿Te resulta más fácil conciliar la vida personal y la laboral ahora que estás fuera de los informativos?
A las nueve de la mañana arranca 'Espejo público'. ¿Te gusta empezar con los datos de audiencia del día anterior o es algo que no os obsesiona?
En estos 3 meses de andadura ¿habéis llegado a modificar o eliminar contenidos porque veías que no terminaban de funcionar?
Sí, nosotros eso lo teníamos muy claro. Sabíamos que habría cosas para pulir y también que habría colaboradores que se caerían. Yo estoy muy satisfecha con la deriva que ha cogido porque cada vez es más informativo. Ya desde un primer momento nació como un programa informativo, pero es que con el tiempo todavía lo es más. Hemos primado la información sobre lo que antes llamabas entretenimiento.
Un programa así requiere tiempo porque las mañanas son difíciles y los hábitos están muy asentados y cualquier movimiento es lento. En ese sentido, teníamos claro que esa ventana a la información tenía que estar abierta durante mucho tiempo para poder apreciar resultados. Los resultados los hemos apreciado muy rápido. Jamás pensé que en 3 meses fuésemos a tener una progresión tan positiva.
¿Es 'Espejo público' el programa que estabas esperando?
¿Cómo te llega la propuesta para ponerte al frente de 'Espejo público'?
Llegó de improvisto. Yo sabía que se estaban haciendo pruebas y que se estaba buscando a una persona, pero no pensé que fuesen a pensar en mí. Pensaron en mí, ellos lo tenían muy claro y me convencieron rápidamente.
Si fueras la directora de RTVE ¿hubieses permitido la entrevista a José María García?
Sí. Yo creo ahí que los directivos han pecado de un exceso de celo porque en el fondo lo que dijo José María García no es muy distinto de lo que dijo, por ejemplo, cuando vino hace tres meses al programa de Andreu Buenafuente. El error de partida es tener una persona como García, que todos conocemos, y luego censurarle.
Si en un determinado momento te planteasen llevar el polígrafo al programa, ¿qué pasaría?
Nadie me lo plantearía. El polígrafo pertenece a un formato muy distinto al que yo estoy haciendo. No hay ningún directivo que se le ocurriese esa idea.
Y si la propuesta hubiese sido para presentar un magazine de tarde, ¿te hubieras sentido atraída igualmente?
No hubiesen pensado en mí. No tengo ese perfil, y lo digo con todo el respeto a los compañeros que presentan magazines de tarde.
En algunas entrevistas dudabas de que lo tuyo fuesen las cámaras, ¿sigues todavía con esa idea?
Cuando una empieza a estudiar periodismo tiene una idea a priori de lo que quiere hacer y yo siempre pensé que trabajaría en prensa escrita que era donde yo me sentía más cómoda. Me gustaba escribir. Ya en la facultad hubo oportunidad de hacer radio, empecé a trabajar en Cataluña Radio y eso ya me llevó a la televisión. Y de un día para otro me vi presentando un informativo. Yo fui la primera sorprendida. Yo quería ser corresponsal o enviada especial, pero siempre trabajando en prensa.
¿Cómo llevas la popularidad?
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Con mucha normalidad, siempre lo he llevado así. No me ha molestado nada y mis amigos lo saben. Al revés, la gente suele ser muy cariñosa. Yo creo que los presentadores de informativos marcamos, sin querer, cierta distancia y la gente la respeta.