Àlex Casademunt vive un auténtico calvario desde el pasado mes de febrero. Al menos, así es como describe el extriunfito la situación por la que atraviesa actualmente, después de que fuera detenido junto a Lucía Sánchez Santos ('Mujeres y hombres y viceversa') por una pelea.
Al parecer, el cantante y la expretendienta del programa que conduce Emma García mantenían entonces una relación sentimental que se vio truncada por este suceso. Ahora, varios meses después, el juez ha finalizado la instrucción y no ha considerado archivar la demanda, puesto que ve indicios de criminalidad en ambas partes.
Lucía Sánchez y Álex Casademunt
Por un lado, los abogados de Lucía solicitan que se le imputen a él cuatro delitos, mientras que los de Casademunt piden un total de doce para su expareja, a quien acusa de haber atentado contra su imagen. Tras conocer esta noticia, el cantante continúa defendiendo su inocencia: "Soy inocente, el proceso aún está en periodo de instrucción, así que estoy tranquilo. Confío en la justicia de mi país", ha reconocido en declaraciones a Vanitatis.
El conflicto se generó por una supuesta infidelidad
Según apuntan varias informaciones, Sánchez acudió al domicilio de Álex, en el distrito de San Blas, con el fin de darle una sorpresa. Pero, contra todo pronóstico, fue ella la sorprendida cuando encontró a Casademunt junto a otra mujer.
La Policía arrestó a los dos protagonistas de la trifulca por agresión mutua
En un arrebato de rabia, la exparticipante de 'Mujeres y hombres y viceversa' comenzó a pegar, arañar y a recriminar la conducta de su entonces pareja. Casademunt le pidió que se fuera de su casa y empezó, de igual manera, a atacar contra ella.
Mientras que Sánchez repetía que eran novios, el cantante negaba cualquier relación más allá que la de haber mantenido en ocasiones relaciones sexuales. Tras esto, la Policía Nacional acudió al lugar de los hechos y arrestó a los dos protagonistas de la trifulca acusándoles de agresión mutua, desencadenando posteriormente en un presunto delito de lesiones en el ámbito familiar.
Los dos presentaron el correspondiente parte de lesiones en el que se advertía de distintas magulladuras así como arañazos múltiples. Tras tomarles declaración, fueron puestos en libertad quedando a la espera de un juicio rápido.
