Tras el sorprendente final del episodio anterior, 'Anatomía de Grey' regresa con un tercer capítulo repleto de emoción, tensión y confesiones. La serie protagonizada por Ellen Pompeo y Patrick Dempsey, que alcanza ya su undécima temporada con el respaldo de sus fieles seguidores, continúa deleitándonos con nuevos casos médicos y muchas sorpresas. A continuación, el análisis del tercer episodio titulado "Got to Be Real".
Meredith y los fantasmas del pasado
El capítulo comienza con una Meredith desesperada y desahogándose sentimentalmente con Alex mientras éste se da una ducha. Aunque el joven no le hace mucho caso, reacciona ante la impactante noticia de que Maggie podría ser la hermana de Meredith. Mientras tanto, Jo escucha detrás de la puerta bastante celosa. Sabe que tienen una amistad como de hermanos pero no llega a entenderlo.
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Karev, en su papel de suplente de Cristina, le aconseja a Meredith que pregunte a Webber, es la única persona viva que debe saber si es verdad que Maggie es su hermana, pero la doctora Grey no acepta la idea de que Webber lo sepa y no le haya dicho nada. Como siempre, la solución a la que recurre Meredith es el alcohol y, mientras Karev repasa su defensa, no duda en empinar el codo haciendo como que le escucha pero, como tiene afán de protagonismo, es Karev a quien le toca atender las penas de su amiga, que le confiesa que Derek no sabe nada acerca de Maggie porque después de haber abandonado el gran proyecto sigue sin perdonar a Shepherd.
Con la ayuda de Karev utilizan los informes privados del hospital para ver la ficha de Maggie y comprobar su fecha de nacimiento. Poco a poco Meredith empieza a cuadrar en su mente todos los datos, en esa época fue cuando su madre intentó suicidarse. Indagando en los archivos y en el historial médico descubren que cuando Ellis Grey ingresó en el hospital después del intento de suicidio estaba embarazada pero ella no lo sabía.
Tras confirmar lo que se venía temiendo, Meredith le pide a Webber que acuda a casa de Karev para mantener una conversación. Webber admite conocer la verdad acerca de Maggie por lo que Meredith le reprocha que no le haya dicho nada a ella y mucho menos que no haya sido capaz de confesarle la verdad a Maggie, pero él no tiene la culpa, él lo intenta y lo que más le hubiera gustado en la vida habría sido haber podido cuidar y ver crecer a su hija, pero Ellis Grey le arrebató esa posibilidad.
Tras desahogarse con Meredtih, Webber decide ir a hablar con Maggie que, con sólo mencionarle que conocía muy bien a Ellis Grey, deduce que él es su padre pero no entiende por qué ha esperado tanto tiempo a decírselo. ¿Será demasiado tarde para Webber? ¿Habrá perdido para siempre la posibilidad de tener una hija? ¿Reaccionará Maggie y le pedirá disculpas por su actitud?
Una emotiva y comprometedora visita
El doctor Owen Hunt acude junto a la doctora Callie Torres a hacer una visita a los veteranos de guerra. Ella ya le ha advertido de que no puede acaparar más trabajo con todos los cambios que se avecinan en su familia. Aún así, Owen le ruega que le acompañe, sólo quiere presentarle a una persona. Pero el jefe de cirugía se guarda un as bajo la manga, sabe que la especialista en ortopedia no va a poder negarse a ayudar a los héroes de la nación.
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Owen presenta a Callie a Jeff, un hombre que perdió una de sus piernas durante un servicio militar y con el que han probado diferentes piernas ortopédicas, pero ninguna como la diseñada por la doctora Torres. Aunque disgustada por la emboscada de Hunt y la cantidad de tarea que tiene por delante, accede a incorporar en su investigación al hombre (qué le va a hacer la pobre si es un trozo de pan).
Tras una prueba, Callie advierte que Jeff no puede participar en su estudio, la pierna robótica no funcionará. Owen no le deja que le cuente la verdad a Jeff y entre ambos se arma una gran discusión. El jefe de cirugía le ordena que ponga una solución de inmediato pero Torres le recrimina que él es su jefe en cirugía pero ella es quien pone el dinero para financiar su estudio y que por su culpa, por haberle dado esperanzas, ahora le toca a ella romper los sueños de Jeff de poder volver a andar sin problemas.
Avery alertado por las quejas, acude a Callie para sermonearle, sin embargo, una brillante idea suya hará posible que Jeff pueda participar en el estudio de Torres. Además, Jackson tendrá la oportunidad de dejar apartada su aburrida vida como director para poder retomar la medicina, su verdadera pasión.
Owen acude a disculparse con Callie y le abre su corazón, él sólo quiere sentir que algo está bien. Desde que se fue Cristina siente un gran vacío dentro, a pesar de que sabe que ella está bien y es feliz y se alegra por ello, no puede dejar de sentir que sus sueños se han roto, que Cristina lo era todo para él, ella era su familia y ahora no tiene a nadie y no quiere volver al a oscuridad de la guerra. Callie volverá a dar su brazo a torcer y aceptará iniciar junto a Owen y Avery un nuevo proyecto con los veteranos de guerra.
Guerra de Shepherds
A Amelia le molesta que su hermano Derek intervenga en sus casos médicos sin consultarle, sobre todo porque él ya no es el jefe de neurocirugía, sino que la pequeña de los Shepherd es la encargada de esa sección del hospital. Aunque Derek jamás vaya a reconocerlo, compite con su hermana y no admite que ella sea su jefa y mucho menos que ella sea mejor que él, su currículum le da mil vueltas y nunca logrará superarle.
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Amelia descubre que su hermano le ha robado una importante operación y cuando entra a quirófano Derek ya está manos a la obra pero, desgraciadamente, no pueden hacer nada por salvar la vida del hombre. Cansada de la actitud prepotente de su hermano, Amelia le recrimina a Derek que quiera ser el rey del hospital por haber rechazado ser la mano derecha del presidente. Pero el guapo cirujano le confiesa que él no refutó el proyecto, fue Meredith quien declinó la oferta y él se vio acorralado, obligado a decidir entre su familia o la oportunidad de oro para consolidar su vida profesional.
Bailey vs Karev: último asalto
Ha llegado el día en el que Bailey y Karev tienen que defender su puesto en la junta. La doctora Bailey va de sobrada mientras que el doctor Karev se muestra desconfiado a pesar de que parece que cuenta con el apoyo de la gente. Aunque Edwards le advierte a Bailey de que debería repasar con ella su defensa y de que Karev cuenta con el soporte sentimental de muchos de los miembros de la junta (recordemos que Meredith le trata como un hermano y Derek está casado con Meredtih, por lo que tendría dos votos, además es el pupilo de Arizona y ésta está casada con Callie, lo que supondría dos votos más y también es un gran amigo de Avery, por lo que lo tendría todo a su favor). Pero Bailey rechaza su ofrecimiento, ella no tiene miedo de nada y mucho menos de Karev.
Por el contrario, Karev sí que está asustado, le aterra no conseguir ese trabajo, él ansía hacer algo más en su vida, Yang confió en él y el propio Alex cree que puede aportar cosas importantes a la junta. Lleva esforzándose desde hace muchos años para que el hospital prospere y ha conseguido casos únicos. Pero puede que todo eso no sea suficiente para la junta, cosa que preocupa a Karev.
Finalmente y tras exponer sus casos delante de una junta un tanto mermada por las distintas situaciones personales de cada uno, Bailey consigue el ansiado puesto. Ella ha sido la escogida para formar parte del equipo directivo del hospital. ¿Estará a la altura del cargo? ¿Karev echara en cara a Meredith que no le haya ayudado y que le haya hecho perder el tiempo? ¿Se alejará Karev del hospital y de sus amigos? ¿Afectara este asunto a su relación con Jo?
Caso médico
Si en el capítulo anterior teníamos multitud de casos médicos, en esta ocasión sólo son una mera excusa para priorizar la relación entre los médicos. El único caso médico al que se le otorga mayor importancia es el de un hombre que llega al hospital con una gran rama de árbol atravesada en el tórax, causando bastante expectación entre los facultativos (buenísimo el momento de Bailey haciéndose un selfie después de reñir a los demás).
Los encargados de tratar a este paciente son Webber, Bailey y Maggie, entre los tres operan al hombre para quitarle la rama atravesada. Aunque en un principio no pinta bien la cosa por la magnitud del problema, el doctor Webber saca a relucir sus años de experiencia, asombrado a la "novata" Pierce. Esta intervención sirve a Webber para ver que Maggie se parece mucho a él y reafirmar su idea de que es su hija.
Conclusiones
Si la semana pasada teníamos un capítulo monótono, en "Got to be real" hemos tenido tramas para todos los gustos: desde rivalidad entre hermanos, emotivos casos con héroes de guerra, revelaciones del pasado y confesiones profundas hasta problemas entre las parejas más importantes del Grey + Sloan Memorial Hospital.
Admito que en un principio empezaba la temporada con serias dudas. Personalmente, la décima temporada de Anatomía de Grey me pareció una de las más flojas y desde entonces la serie había perdido un poco de interés para mi gusto. Sin embargo, he de reconocer que esta nueva tanda de episodios y las nuevas tramas me están sorprendiendo gratamente. Aunque sea un tanto reiterativo los problemas entre Callie y Arizona, tengo ganas de saber cómo va a avanzar la cosa entre ellas, ¿podrá Arizona compaginar su beca con su familia?, ¿perdonará Callie a Arizona por sus eternas dudas? Y aunque muchos queramos ver felices a Meredith y Derek, esta falta de confianza entre ambos y la sensación de "calzonazos" de Shepherd podría dar mucho juego en la relación, no sé si hasta el punto de terminar con ella pero ya veremos con lo que nos sorprenden.
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En el próximo episodio...
El cuarto capítulo de la temporada 11 recibe el título de "Only Mama Knows" ("Solo mamá sabe") y está centrado en el personaje de Ellis Grey y sus secretos del pasado que saldrán a la luz cuando Meredith revise viejos vídeos y lea los diarios de su madre. Mientras tanto, Maggie sorprenderá al hospital con un anuncio inesperado; Alex conseguirá nuevas responsabilidades y Callie centrará su atención y esfuerzo en el proyecto con veteranos de la armada americana.