Virginia Yagüe: "Sería muy factible estudiar una adaptación televisiva de "La última princesa del Pacífico'"

Virginia Yagüe

Ambientada en hechos reales, y documentada minuciosamente, "La última princesa del Pacífico" narra el camino hacia la madurez de Carlota Díaz de la Fuente, la protagonista de esta evocadora historia; una mujer de origen español que creció en la colonia más lejana y olvidada del imperio español.

Su inocente adolescencia, rodeada de su afición por la fotografía y los viajes que realizaba junto a su padre, se ve truncada cuando cumple su mayoría de edad. Se casa con su gran amigo de la infancia, Felipe, en 1896, que es justamente cuando comienza a despuntar las alarmas de una posible revolución a favor de la independencia de la metrópoli española.

Esta historia de superación, de amor apasionado, de lucha contra el destino, de celos, intrigas y misterios, en un marco repleto de exotismo y voluptuosidad: la colonia española de Filipinas, desemboca en el dramático asedio que vivirá Manila y que concluirá con la pérdida definitiva de la colonia, que será entregada a Estados Unidos.

La escritora ha reconocido que le encantaría que esta novela de la editorial Planeta fuera adaptada a la televisión. Interpretar el papel de Carlota, asegura Yagüe, sería un gran reto para cualquier actriz por el arco de evolución que va experimentando el personaje.

Cuéntanos, ¿cómo nace esta novela? ¿Cómo surge la idea para escribir "La última princesa del Pacífico"?

Realmente es un encargo de la editora, de Raquel Isbert, del grupo Planeta. Estaba escribiendo con ella un libro anterior que, por distintas razones, se fue dilatando el proceso y me coincidió con una de las series que estaba escribiendo y lo fuimos dejando. Entonces, puso esta otra posibilidad encima de la mesa, que tiene el trasfondo de Filipinas y el entorno colonial y, a partir de ahí, empezamos el proceso de trabajo y yo me embarqué en la documentación.

Primero 'La Señora', luego 'La República', después 'Amar en tiempos revueltos' y ahora esta novela basada también en la historia de España. ¿Qué tiene la historia de nuestro país que te inspira tanto?

Me parece una forma fascinante de abordar la ficción. Por un lado, la ficción histórica lo que tiene es que nos permite cierta distancia sobre los acontecimientos pero también, al ser nuestra o tener vínculos directos con esa historia, permite asumirla como algo nuestro. Es muy agradecida en ese sentido. No nos remite a una realidad que vivimos y con la que convivimos, tenemos esa distancia por un lado y, por otro, tenemos vínculos afectivos con esa historia, bien sea por experiencias propias, familiares, por relatos compartidos...

Evidentemente la documentación ha sido cosa tuya. ¿Cómo ha sido el proceso? ¿Existe la suficiente información para un relato de estas características?

Muy largo y muy intenso. Yo no tenía mucha información sobre Filipinas, manejaba la información histórica que tenemos todos: el desastre del 98, las losas heroicas sobre los últimos de Filipinas y poco más. Me llevó casi un año el periodo de documentación para tener realmente una consciencia y una información suficiente para abordar la historia que se propone en la novela.

Además de ser una novela histórica, también tiene aventura, romance, misterio... ¿Qué la hace diferente a otras que tienen características similares?

Por otro lado, me fascinaba contar la historia porque me gustan mucho las historias que tienen como protagonista a mujeres fuertes o que están en crecimiento y ese crecimiento les lleva a la fortaleza. Me resultaba muy interesante contar la historia de esa mujer fuerte que se va a ir descubriendo a sí misma y que a la vez se siente más filipina que española en una tierra que va a dejar de ser colonia de España. Esta misma paradoja que se incluía en la historia me parecía muy atractiva y es el elemento diferencial con respecto a otras propuestas.

Libro "La última princesa del Pacífico"

Yo creo que eso es un motor para los que narramos y contamos historias. Si fueran personajes dóciles o que no se adelantan, no tendrían conflicto con su época. Para nosotros, como narradores, es esencial el conflicto. Por eso son mujeres que se enfrentan a la situación, de las se adelantan, que rompen esquemas y que, también, son fuertes, es decir, que pelean por ese nuevo status.

Me parece que esto es muy atractivo y ese atractivo se duplica en el caso de las mujeres. Las mujeres en distintas épocas históricas han pasado por situaciones muy complicadas y realmente se han constituido en pioneras muy contrastadas. Han tenido que derribar muchos obstáculos para llegar donde han llegado y eso es muy interesante narrativamente .

Yo creo que sí. Exigiría una adaptación correcta porque el planteamiento no deja de ser el de una novela y tiene la libertad de ese planteamiento. Lógicamente, no hay parámetros de producción, es un planteamiento muy libre como debe ser en cualquier novela.

Muchos guionistas cuando escriben novelas lo hacen pensando en posibles adaptaciones de sus obras. ¿Ha sido el caso o en el momento de escritura ni te lo has planteado?

Realmente cuando me planteé la novela, me la plantee como una novela y no había un parámetro de producción como cuando abordamos una historia para lo audiovisual. Pero sí que es verdad que de alguna manera yo creo que los guionistas conseguimos tener una visión más cercana a lo audiovisual. Estamos acostumbrados a generar historias que son fácilmente visuales, entonces en este sentido yo creo que lo tenemos presente de una forma natural e integrada en nuestra propia forma de narrar y de contar lo visual. Yo creo que esta novela tiene muchos momentos muy visuales.

Espero que sí. Yo he recibido ya buenas críticas en este sentido e interés por parte de determinada gente que se está acercando a la novela y se acerca con esa visión. Todavía falta por concretarse porque la novela lleva muy poquito tiempo a la venta. Yo creo que la fuerza del grupo hace que el camino sea más fácil.

Parece que ahora están de moda las miniseries. En caso de que "La última princesa del Pacífico" se adaptase, la trama del libro ¿la ves mejor para una miniserie o para una serie de una o varias temporadas?

Imagínate que de repente te dicen que la novela cobra vida. ¿Qué actores se te vienen a la cabeza para interpretar a los personajes?

Tengo que reconocer que soy malísima para hacer los castings, sobre todo, porque trabajo mucho con los personajes y tengo muy claros los personajes pero no suelo ponerles cara. Tengo muchos compañeros que trabajan así y realizan sus castings ideales y yo cuando he propuesto las historias me he quedado siempre en el terreno del personaje, el control y el perfil del personaje. Suelo ser muy respetuosa y espero a que llegue el equipo para empezar a bucear en una propuesta de casting.

Sí que sé como es Carlota. Habría que adecuar una posible actriz que encarnara a ese personaje con fuerza y realizara ese recorrido. Hay muchas actrices que me gustarían y en las cenas que realizo últimamente con los amigos me proponen castings según van leyendo la novela. Yo creo que aquí tenemos afortunadamente un plantel de actores y actrices estupendo y habría que analizaro. Lo difícil es encontrar una actriz que encarne al personaje con la evolución que tiene. Carlota empieza siendo una niña muy inocente y hace un recorrido de madurez y eso es complicado a la hora de buscar un perfil. Aunque, por otro lado, es lo más bonito como reto para un actor o una actriz. Ese arco de evolución tan marcado hace que tengas que tener a una joven ingenua de arranque para tener luego a una mujer que se enfrenta a un asedio, que da a luz en medio de una guerra y que se sobrepone a todo ese terror. No es nada fácil.

No es el primer libro que escribes, ya que hace unos años debutaste con "El marqués", que está basado en un personaje de 'La Señora'. ¿Por qué pensaste que merecía la pena ahondar en la vida del marqués Castro?

Cuando se propuso la idea de hacer la novela, había dos personajes que a mí me parecía que tenían potencia suficiente para contar una historia potente. Gonzalo de Castro, que era el marqués, tenía una historia de un pasado turbio, oscuro, un secreto... y esto era un movilizador de historia. Me parecía muy apetitoso. La del marqués era una historia muy evidente para poder novelar, muy interesante. Pero había otro personaje que me interesó mucho siempre y que tenía pendiente, que era Vicenta, esa ama de llaves siempre fiel a la familia. Me parecía que tenía una gran historia detrás. Esta fue la historia que nunca se abordó y no se convirtió en novela.

Adriana Ugarte y Roberto Enríquez son los señores de Castro en 'La Señora'

Tanto 'La Señora' como 'La República' eran series semanales, sin embargo, 'Amar en tiempos revueltos' era diaria. Como guionista, ¿te supone mayor esfuerzo o una dificultad añadida que una ficción sea diaria en lugar de semanal?

Son formatos muy distintos. El formato semanal tiene unos arcos distintos, los tiempos de capítulo son distintos también, los planteamientos de historia cambian mucho en función del formato... Yo creo que cualquier guionista profesional se plantea los formatos como son, de una forma muy profesional y con unos códigos muy concretos para abordarlos. Cada formato exige una forma de trabajo y un planteamiento de historias y de arco distintos.

Ahora, el formato diario a mí me apasiona. Yo lo he trabajado muchísimo, no solo en 'Amar en tiempos revueltos', porque he hecho muchísimas series diarias y me parece un gran formato y, sobre todo, un gran formato a desarrollar. Creo que tiene muchísimas posibilidades para ir sacando detalles y matices sobre ese formato. Me interesa mucho y me siento muy cómoda trabajándolo. Son fórmulas de trabajo distintas, no te diré cuál es mejor y cuál es peor porque no creo que sean ni mejor ni peor.

¿Qué consideras lo más difícil a la hora de escribir guiones para televisión?

Quizás el ritmo de trabajo. Adecuar los equipos a ese ritmo, encontrar una sintonía entre el proyecto que se pone sobre la mesa y las demandas de la cadena, que siempre es importante. Tienes que garantizar que los equipos están trabajando todos a favor y no se disgreguen en el sentido de que cada uno monte la batalla por su lado y al final quede un proyecto que se ha compuesto de intenciones distintas. Generar estas sinergías es complicado.

Guion tiene que ser un equipo más y tiene que ser una parte esencial en esa maquinaria y tiene que trabajar a favor siempre de la historia que se está planteando y con una conciencia muy plena de cómo se va a establecer la producción para poder asumir todos los cambios.

Ya eres escritora, creadora de series, guionista... ¿Te atreverás a dirigir alguno de tus proyectos?

No, yo no soy directora ni lo quiero ser. Tengo mucho respeto y admiración por la dirección, tengo grandes amigos y amigas directores y directoras y respeto muchísimo su trabajo. De forma natural yo soy escritora. Soy de esa cuerda que planteaba Rafael de Azcona, realmente esa vocación nuestra está en la narrativa y yo creo que está bien. Yo ahí me siento muy a gusto, creo que lo hago bien y es donde debo estar. Si habláramos, por ejemplo, de otros matices como la producción ejecutiva de contenidos para garantizar las sinergías y que todo vaya en línea y sea adecuado con el proyecto que se está poniendo sobre la mesa, pues esto sí me parece más interesante. La producción ejecutiva me parece una forma muy creativa y práctica para ejercer el control. La dirección es otro ámbito creativo al que no aspiro.

TVE dice que estrenará la segunda temporada de 'La República' el próximo año, cuando la primera entrega acabó en 2011. ¿Qué te parece el trato que ha hecho la cadena a la serie?

Yo creo que es una pena que cualquier tipo de ficción se quede en el cajón y no se emita. Me parece que las ficciones precisamente se realizan para ser exhibidas. Entiendo que las razones son múltiples aunque yo desconozco por qué no se ha emitido antes esa continuación de la serie. Me parece estupendo que la saquen de ese cajón y que se exhiba y la disfrutaré mucho. Yo no estaba involucrada en esta segunda parte, solo me responsabilizo de la primera, pero la disfrutaré como disfruto todas las ficciones nacionales. Creo que todos los que estamos vinculados a la creación de ficciones en este país celebramos siempre el arranque de una nueva ficción.

Imagen capitular de 'La República'

¿Crees que la segunda temporada tendrá la misma acogida por parte del público después de tanto tiempo? El reto es complicadísimo...

Es un reto porque arrancar una segunda temporada con tanta diferencia implica retomar el vínculo con los personajes. Es distinto. El espectador se siente alejado y frío y es razonable porque ha pasado mucho tiempo. Yo no sé si en la estrategia de nueva emisión entrará, que me parecería lógico porque ha pasado demasiado tiempo, recuperar de alguna manera la primera temporada y luego arrancar con la segunda. Supongo que en la idea de TVE de recuperar esta serie está el hacer un buen dato.

Dices que disfrutas mucho las ficciones nacionales. ¿Qué te parecen las series que se emiten actualmente y que están ambientadas en otras épocas sobre el pasado de España?

Buenas. Además, yo creo que se ha ido evolucionando. Creo que hemos pasado unos años de pioneros, en ese sentido, e ingenuos pero ahora ya estamos en una consolidación de esa industria. Creo que las propuestas de ficción están ganando en madurez, calidad y son muy elogiables, sobre todo, cuando eres también muy consciente de todos los condicionantes que se abordan tanto presupuestarios como otras dificultades.

Yo soy muy admiradora. Siempre valoro mucho el trabajo de los equipos de las distintas productoras. Creo que ahí también hay una evolución del trabajo de las productoras en relación con los clientes, que son las cadenas. Los equipos ejecutivos de ficción por parte de las cadenas cada vez son más estupendos, entienden la realidad de la ficción, buscan proyectos claros para sus parrillas y para su público potencial y creo que ahí se está consolidando una industria mayor y mejor.

Para acabar, ¿qué otros proyectos tienes en mente de cara al futuro?

Ahora mismo estamos trabajando en Shine Iberia, yo pertenezco al departamento de ficción. Lo último que tenemos sobre la mesa es una TV movie estupenda que hemos hecho con Nacho Faerna a la cabeza. Es 'Prim, el asesinato de la calle del Turco' y aborda la muerte de Prim. La película ya está terminada y suponemos que el estreno en TVE será este año porque es el bicentenario de la muerte, con lo cual sería interesante que se estrenara dentro de este 2014.

Lo que sí creo es que es un trabajo espectacular y es muy impresionante. Esto es lo más inmediato, luego nos estamos moviendo con un montón de proyectos. Yo creo que todos muy interesantes, de perfiles de ficciones muy distintas, en distintos formatos, tonos, géneros... Intentando realmente asentar un nivel de calidad que sea consistente, notable y que responda a lo que entendemos en esta productora y, en concreto, Nacho Faerna y yo misma como una ficción de calidad.