Este viernes Antena 3 emitió el tercer programa de 'Los viernes al show', al que acudieron el Paco León, el cantante David Bustamante y el reportero Jordi Évole dispuestos a divertirse y a dejarse llevar por las "locuras" de Manel Fuentes y Arturo Valls.
Bustamante se enfundó en un body negro, calzó unos tacones y bailó la célebre coreografía de Beyonce de "Single Ladies" junto a Fuentes y Valls. El público se quedó con la boca abierta ante la precisión con la que realizaron el famoso baile. Antes, los tres protagonistas no dudaron en cambiarse en el plató detrás de unos paneles. Para dejar el listón bien alto, un cuerpo de baile realizó la coreografía antes que ellos, que se arrancaron y afrontaron el reto sin pensárselo.
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Además, tras la entrevista el cantante se tuvo que enfrentarse a un reto de lo más peculiar: hipnotizar a un bogavante, algo que Bustamante decía que aprendió de pequeño. Bustamante cogió un bogavante y, tras acariciarlo y cantarlo, consiguió dejarlo inmóvil.
Pero la cosa no quedó ahí: el cántabro también se sumó a la parodia de la actualidad y se enfundó un disfraz de Raphael junto a Manel Fuentes, mientras que Arturo Valls parece que le ha cogido gusto a eso de imitar a Shakira y se disfrazó de la colombiana para versionar el Dare (La, La, La).
Por su parte, el actor y director Paco León se lanzó a parodiar dos personajes a la vez: Isabel Pantoja y Conchita Wurst. Paco cantó sobre la corrupción en España en una surrealista y divertida versión de "Hoy quiero confesar", enfundado en un traje de flamenca versión presidiaria.
Jordi Évole visitó a Juan Carlos y Sofía
El periodista catalán Jordi Évole aprovechó su presencia en el programa para vistiar la casa de los reyes Juan Carlos y doña Sofía y para solicitar una entrevista con su hijo el rey Felipe VI. Antes de darle el permiso, los reyes le han preguntado qué preguntas le haría, a lo que el periodista ha respondido que cómo se encuentra su cuñado. Además, los Borbones le han propuesto un juego a Jordi, ser rey por un día.
También hubo tiempo para hablar de la figura de la Princesa Sofía en el museo de Cera, comparando la fotografía real con una del muñeco y tapándola corriendo. "¡La tapo que me asusto!", gritaba un Arturo Valls-Sofía.
