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Poco a poco se nota que empieza a llegar el momento de clímax de la temporada, ya que en este episodio 'Scandal' nos demostró que todas las piezas que han ido esparciendo a lo largo de la temporada pueden unirse y formar algo mucho más grande.
Jake, Fitz y Olivia: un trío no demasiado unido
El final del anterior episodio ya prometía una reunión entre este trío de personajes con muchas cosas en común. En "The Last Supper" parece que Olivia, Jake y Fitz se unen con el único propósito de derrocar al Comandante, Rowan Pope. Para ello trazarán un plan perfecto que acabará resultando no ser tan efectivo, porque el Comandante siempre va un paso por delante.
Rowan y Olivia descubren sus cartas en este episodio
Esta trama empieza a ser interesante, sobre todo porque es evidente que algo va a pasar en el último episodio antes del parón navideño. "The Last Supper" acaba de una forma con el monólogo de Rowan Pope que hace evidente que la situación no se puede tensar más: Es él o el resto, Olivia ya no cuenta con su apoyo y ahora comienza el juego sucio. Gran final de episodio.
La relación entre Olivia y Fitz: ¿todavía es posible?
En 'Scandal' todos sabemos que el tiempo se para cuando Olivia y Fitz se unen; parece que sus escenas duran siglos, entre miradas, caricias y frases intensas, pero hacía bastante tiempo que no vivíamos una situación tan directa como la que se vive en "The Last Supper": Fitz se enfrenta a Olivia y la acorrala para que le diga si todavía hay opciones entre ellos. El Presidente quema sus cartuchos y sale victorioso, porque aunque Olivia quiera negarlo -y quiera irse con el pánfilo de Jake-, es evidente que la atracción que siente por el líder del mundo libre no la siente por nadie.
Olivia y Fitz se muestran muy atraídos el uno por el otro
Es interesante como Rowan Pope en "The Last Supper" le hace abrir los ojos a Olivia: Esos dos hombres solo luchan por ella como trofeo y como si de una pelea de gallos se tratase. Pero ella en vez de ser pasiva ante esas situaciones decide tomar el control de la situación y domar a los gallitos. Lo que no consiga Olivia Pope no lo conseguirá nadie.
El atentado y una nueva alianza en contra del Presidente
El Vicepresidente Andrew Nichols sufre en este episodio un intento de atentado con un coche bomba, y ya sabemos que en las series de Shonda, cuando ocurre una situación extrema, los personajes se vuelven locos, y en 'Scandal' no iba a ser menos: Mellie decide acostarse con Nichols después de que este se salvase del atentado, pero sin ningún tipo de lógica, simplemente porque los guionistas se pasan las semanas encerrados intentando crear situaciones para que odiemos a Mellie Grant. Delirante.
Por otro lado, por fin vemos hacia donde va el "Caso Caitlin" en este episodio: Tras ayudar a la Lizzie Bear -interpretada por una excelente Portia de Rossi-, en un caso personal, Olivia descubre que es ella quien está espiando a Cyrus con un chico de compañía, así que decide poner su casa bajo vigilancia.
Allí descubrirán, como suele pasar en 'Scandal', que nunca se puede estar tranquilo: Lizzie Bear tiene una aventura con el Vicepresidente Nichols y ambos se encuentran con el mismo agente que asesinó a Caitlin y su amiga por las fotos de Olivia. Todo parece indicar que nos encontramos ante una nueva conspiración para derrocar el gobierno de Fitz Grant, y puede que incluso el ataque terrorista sea obra de ellos, en "The Last Supper" no nos revelan mucho más.
¿Qué pasará en el final de invierno de 'Scandal'?
Lo que está claro es que 'Scandal' es una serie que aunque parece que va dando tumbos, siempre tiene un rumbo fijo, y en este caso está claro que el punto álgido de todas las tramas se resolverá en el próximo episodio, el último antes del parón navideño. Ahora sí, la cosa está que arde.
