Como ocurrió a principios de milenio cuando el dominio aplastante de la televisión abierta tradicional fue derrocado por la aparición de las cintas VHS y las televisiones de pago, una nueva amenaza impulsada por las nuevas tecnologías ha aparecido. Se trata de las retransmisiones vía streaming por internet, un avance que puede cambiar la manera y la forma en que se entiende y se consume televisión.
Una de las empresas más exitosas en este área es Netflix. Respecto a esta batalla con la televisión convencional se refirió el pasado lunes su director ejecutivo Reed Hastings en Mexico, según recoge Hollywood Reporter. "La televisión tradicional dejara de existir en 2030", sentenciaba el directivo, afirmando que la situación actual se asemeja a "cuando los caballos fueron reemplazados por los automóviles".
CEO de Netflix, Reed Hastings
"Estamos tratando de llegar a un mercado que sea totalmente global"
No es la primera vez que el director de la plataforma de streaming norteamericana vaticina el fin de la televisión. Desde hace años lleva dando previsiones funestas sobre el futuro de la industria. En 2011 dijo que la evolución tecnológica provocaría el cierre de 2.030 cadenas de televisión en todo el mundo, en 2012 desacreditó a los potentes compañías de televisión americanas y a los productos que elaboraban y en 2013 publicó un informe detallado en el que defendía que la televisión lineal no sobreviviría una década más.
La expansión de Netflix en el extranjero sigue avanzando. La compañía está trabajando para garantizar la concesión de licencias globales de los contenido que ofrecen, ya que en la actualidad los espectadores norteamericanos tienen acceso a un catálogo mucho más amplio que los usuarios del resto del planeta. "Estamos tratando de llegar a un mercado que sea totalmente global, en el que usted puede conseguir cualquier cosa, en cualquier lugar" comentaba el director ejecutivo.
Netflix: Una plataforma global de contenidos en streaming
El servicio de vídeo bajo demanda, que goza de gran popularidad en Estados Unidos, inició a principios de septiembre su su expansión europea con el lanzamiento en Alemania, Austria, Suiza, Francia, Bélgica y Luxemburgo. Hasta la fecha, el servicio ya estaba disponible en Reino Unido e Irlanda, los Países Bajos y Escandinavia. Además, se espera que su expansión se abarque toda Europa en 2015 cuando llegue a otros países como España.
A principios de noviembre, Netflix anunció que había iniciado su primera incursión en Australia y Nueva Zelanda. Un movimiento que se puede interpretar como el primer paso para el despliegue de la plataforma en Asia, siendo Japón el próximo mercado al que la compañía quiere expandirse. Respecto a estos movimientos, Hastings dijo que no hay planes concretos todavía para Asia.
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América Latina fue el primer mercado en el que se introdujeron. Después de tres años en la región, el gigante de servicios de streaming tiene más de 5 millones de usuarios. Este incremento del potencial americano más la entrada en los mercados europeas y australianos ha reportado unos beneficios mundiales de 53 millones de dólares.