Una de las mayores lacras de la sociedad a nivel global es la violencia. Y, lamentablemente, una de las más extendidas es la violencia de género. Hace unos días, todos los espectadores de un concurso de la televisión rusa asistieron a un espectáculo bochornoso y deningrante.
Los hechos ocurrieron mientras los participantes tocaban un coche y el que más tiempo aguantará en contacto con el automóvil se lo llevaría como premio. Diversos hombres y mujeres pugnaban por él usando todo tipo de tretas para conseguirlo. Antes de dicha que el agresor la golpease, le había tocado el culo mientras ella le intentaba apartar la mano.
En una de estas triquiñuelas, una de las mujeres se quita unos de sus zapatos y se lo pasa por la cara a otro de los concursantes. Tras esta acción, el hombre decidió agarrar del cuello a la mujer olvidándose por completo del concurso y una vez tirada en el suelo, éste le propinó de forma absolutamente salvaje un puñetazo (minuto 05:10).
Ninguno de sus compañeros reaccionó y el presentador tardó varios segundos en intervenir
Tras el ataque, la mujer quedó tendida en el suelo llorando y ensangrentada mientras el hombre volvió al coche y se reclinó en el capó, con aparente normalidad. En ningún momento ninguno de los concursantes se movió de su sitio, intentó repeler el ataque o actuó en consecuencia a los hechos.
Pasados unos segundos, el presentador apareció en escena para consolar a la mujer mientras se repetía a cámara lenta el momento de la agresión. Tras esto, los servicios sanitarios entraron para socorrer a la participante mientras las repeticiones a cámara lenta no cesaban.
Pasados varios minutos, el agresor abandonó el plató de televisión sin mostrar ningún tipo de arrepentimiento y con una mueca de superioridad insultante. Al finalizar el vídeo, se muestra una entrevista posterior con el hombre en la que parece que no se arrepiente de la brutal agresión.
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Recordamos que el número para denunciar violencia de género es el 016, donde se ofrece información y asesoramiento jurídico. Es gratuito y no deja rastro en la factura del teléfono.