Tras trece capítulos, el circo de los horrores de 'American Horror Story' ha echado el cierre. La cuarta temporada, en ocasiones repetitiva y falta de esos personajes profundos que tanto nos conquistaron en años anteriores, ha llegado a su fin con el capítulo titulado "Curtain Call".
Masacre en el circo
Se nota que es el último, así que los guionistas no están para perder el tiempo. Tras haber estado bajo el amparo de Elsa Mars y haber sido vendidos durante muy poco tiempo a Chester Creb, los miembros del freak show han ido a caer a manos de Dandy Mott. Cada cual, peor. El joven desequilibrado mental, al descubrir que no se ha vendido ninguna entrada para el espectáculo del primer día, entra en cólera, por lo que los integrantes de relleno del circo (los que no aparecen en la cabecera de la serie) deciden abandonar el gabinete de curiosidades de Dandy, pues no están dispuestos a tolerar la actitud del nuevo hombre al mando, que les culpa de todo.
Dandy Mott y su pistola de balas infinitas
Un Dandy preparado para la función, con maquillaje, de punta en blanco y pistola (de balas infinitas, como las de los videojuegos) en mano, el dueño del circo va matando uno a uno a todos los freaks secundarios. Los primeros en caer son Paul y Penny, pero luego caen Suzy, Amazon Eve y Barbara, entre otros. En definitiva, sólo quedan con vida Desiree (escondida tras la cama de su caravana), Jimmy (andaba perdido por el bosque) y las siamesas Dot y Bette (pues son el objeto de deseo del joven).
Ya de noche, el joven, que llevaba varios días fuera debido a sus manos, descubre que Elsa ha abandonado el circo. ¿Este chico vive en una burbuja o qué? Pero ahí no acaba la cosa, sino que dentro de la carpa principal descubre un reguero de cuerpos muertos, sus compañeros de función. Allí se encuentra con Desiree, que ante una situación como ésta, no tiene mejor idea que tocar al joven por la espalda para meterle un susto.
Dandy y Bette contraen matrimonio
Ya han pasado los días y Dandy y Bette se disponen a contraer matrimonio en una ceremonia que tiene lugar en la sala de juegos de villa Mott y a la que no faltan peluches como testigos y, por supuesto, Dot, que no puede despegarse de su hermana. Tras darse el sí quiero, descubrimos que todo ha sido un gran trabajo interpretativo de Bette, quien compinchada con Dot, Jimmy y Desiree, está dispuesta a acabar con su marido. Para ello, una Desiree convertida en nueva criada (¿en serio con la de visitas que hizo Dandy al circo de Elsa nunca se encontró con Desiree?) droga al millonario, que cae dormido, no sin antes recibir un tiro en el brazo.
Boda de Dandy y Bette, en villa Mott
Dandy muere imitando a Houdini por obligación
Al despertar, Dandy se encuentra en calzoncillos blancos, esposado dentro de un tanque. A pesar de que Dandy tenía intención de interpretar temas de Cole Porter, en su primera y última función, en un pase privado para Dot, Bette, Jimmy y Desiree, acaba imitando por obligación, y con un fatídico desenlace, a Houdini en su popular número de la cámara de tortura china. Tras un discurso de Desi, que lo califica de "mayor freak de todos", Jimmy le da al agua y, ante la atenta mirada de los cuatro espectadores, con palomitas incluidas, el mejor personaje de 'American Horror Story: Freak Show' muere ahogado. Una lástima, porque yo quería ver cantar a Finn Wittrock. "Ese chico es una estrella".
El camino de Elsa hacia lo más alto de la televisión
Al margen de la historia del circo, "Curtain Call" también nos muestra la historia de Elsa en Hollywood. En el décimo capítulo, gracias a una revista que encontraba Pepper en el manicomio, descubrimos que la alemana acabaría convertida en toda una estrella, pero ahora nos han explicado todos los detalles de su entrada en el mundillo de la televisión. Tras insistir mucho en World Broadcasting Network y protagonizar un incidente en las oficinas de la cadena, la señoritaa Mars da con Michael Beck (David Burtka), vicepresidente del departo de casting, con quien comparte orígenes germanos.
Elsa Mars junto a su marido Michael Beck
Ya en 1960, Elsa Mars es toda una estrella de la televisión. Gracias a su programa 'The Elsa Mars Hour', ha conseguido tres premios Emmy (como curiosidad, es el mismo número de premios Emmy que tiene en su haber Jessica Lange) y acaba de recibir una estrella en el paseo de la fama de Hollywood. Casada con Michael, quien además se ha convertido en su representante, frente a las cámaras muestra una vida perfecta. Seamos sinceros, ¿de verdad una mujer de 65 años había tenido oportunidad de comenzar su carrera televisiva a esa edad en los años 50? A duras penas lo conseguirá en la época en la que vivimos, así que en esos años en las que los personajes femeninos, siempre a las órdenes de sus maridos, sólo eran un buen cuerpo, habría sido imposible.
Pero de puertas adentro, la aventura televisiva de Elsa Mars no es tan bonita como imaginó. ¿La gota que colma el vaso? Tener que actuar en Halloween. A pesar de que su programa se emite en directo los viernes, la cadena ha decidido ofrecer un programa especial el 31 de octubre, que cae en lunes, porque sí. Todo muy casual, como ya nos tienen acostumbrados, en 'American Horror Story'. Recordemos que los freaks no actúan en Halloween porque si lo hacen, se les aparece Edward Mordrake, por lo que la estrella se opone rotundamente a trabajar esa noche.
Massimo Dolcefino, el amor de Elsa, se muere
Ese mismo día, en casa, se reúne tras muchos años con Massimo Dolcefino, el amor de su vida. Elsa le propone fugarse a Italia, pero el italiano que le volvió a dar sentido a su vida al proporcionarle piernas tiene una mala noticia que darle: se muere de cáncer. Penoso el flashback que recrea su historia de hace 30 años en el que él está igual que ahora y ella, con un pelucón rubio platino mal puesto, no oculta ni las arrugas de sus manos mediante maquillaje.
Edward Mordrake apuñala a Elsa Mars en su programa
Tras la amarga noticia, una ebria Elsa se reúne con su marido y con el presidente de la cadena, quienes le informan de que hay una película snuff protagonizada por ella que está a punto de ver la luz. Sí, la misma en la que le serraron las piernas. Además, el responsable de WBN le comunica que, rastreando en su vida, ha descubierto que, antes de su carrera televisiva, fue dueña de un circo de los horrores y que, misteriosamente, todos sus integrantes fueron asesinados. Sin nada por lo que seguir viviendo y con una vida que en los próximos días va a ser destruida por completo, la alemana cambia de opinión y decide trabajar en Halloween para que así Edward Mordrake acabe con ella y no tener que rendir cuentas con nadie.
Sarah Paulson, la única que termina viva en las cuatro temporadas
En el programa especial en directo de Halloween, Mars abre interpretando el tema "Heroes" de David Bowie, el mismo cantante de "Life on Mars", lanzado originalmente en 1977. ¿Os imagináis un disco de Jessica Lange versionando a David Bowie? Yo pagaría por ello si hiciera falta. Sea como sea, el número musical sirve para mostrarnos qué ha sido de los freaks supervivientes. Desiree, ahora de clase bien, ha continuado su relación con su querido y ahora es madre de dos hijos, a pesar de que yo tengo serias dudas de que a sus cincuenta largos siga pudiendo concebir. La relación entre Jimmy (¿alguien me explica por qué la policía dejó de buscarlo?) y Dot ha salido adelante. Las siamesas, encintas, viven junto al joven en una casa que, imagino, pagaron con la fortuna de Dandy que, tras su muerte, fue a parar a su esposa Bette. Todos ellos miran a través de la televisión la actuación de la que, ocho años atrás, fue su dueña. Así, una vez más, por cuarto año consecutivo, Sarah Paulson consigue terminar la temporada viva, siendo la única intérprete de la serie en conseguirlo.
Jimmy Darling junto a unas embarazadas Dot y Bette
Edward Mordrake visita a Elsa y la envía a un circo especial
Quien acude a ver a Elsa en persona, con su típico humo verde y acompañado de Twisty, es Edward Mordrake. La alemana le ruega al aristócrata del siglo XIX con una cara en el cogote que se la lleve, para así poner fin a su vida. Ante las pantallas de todo Estados Unidos Elsa muere, pero Mordrake cree que su lugar no es convertirse en su acompañante, sino en el gabinete de curiosidades de Elsa, junto a todos los miembros muertos. Allí se reencuentra con Ma Petite, Paul, Penny, Suzy, Amazon Eve, Meep, Barbara y Ethel, a quien ella misma mató. A diferencia de Fiona Goode, que el año pasado tuvo que pagar por todos sus pecados y fue derechita al infierno, la vida de Elsa Mars tras su muerte es muy diferente: a ella le ha tocado un mundo en el que parece que todo está perdonado y en el que seguirá cantando su "Life on Mars" en un bucle infinito. "Las estrellas nunca pagan".
Balance de la temporada
Si me habéis leído regularmente, ya sabéis cuál es mi opinión sobre 'American Horror Story: Freak Show'. La cuarta temporada se encuentra a años luz en cuanto a calidad de las primeras temporadas, "Murder House" y "Asylum", de las que yo soy muy fan. Parece que Ryan Murphy, Brad Falchuk y el resto del equipo de guionistas de la serie han agotado las historias que contar y, más allá de un tema recurrente en la serie como es el de las relaciones entre padres e hijos, la temporada que iba a ser "la más terrorífica hasta la fecha" se ha limitado a tratar la aceptación en la sociedad (tema también visto en "Asylum" o "Coven") y el camino hacia el éxito y la fama (asunto que miedo, lo que se dice miedo, no da).
Jessica Lange en su escena final de 'American Horror Story'
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Espero y confío en que la quinta temporada de 'American Horror Story' cuente con un guion más trabajado. Está bien poner tanto esfuerzo en el apartado técnico y tirar de guiños a tiempos pasados (como las conexiones con "Asylum") y de actrices oscarizadas, pero hay que contar una buena historia. En cuanto a Jessica Lange, ha sido un placer poder disfrutar de ella en una serie durante cuatro años y desearía poder seguirla viendo el año que viene, pero estaría bien que si finalmente acaba volviendo, no vuelva a interpretar a la fumadora malvada un tanto desequilibrada que, en función de la temporada, acaba de una forma u otra.