Netflix ha anunciado hoy a bombo y platillo su desembarco en un nuevo país, aunque bastante siginificativo: Cuba. La compañía de contenidos y streaming estadounidense opera desde hoy mismo en la isla apenas semanas después de que Barack Obama anunciara un proceso para normalizar las relaciones con el país.
El gigante del streaming comienza de esta forma a operar antes en la dictadura castrista que en la democracia española, donde todavía se lo sigue pensando tras varios intentos de entrada a lo largo de los últimos meses.Los ciudadanos cubanos podrán disfrutar de una selección de contenidos entre los que se encuentran las series originales de la plataforma, 'House of Cards', 'Orange is the New Black' o 'Marco Polo' entre otras muchas.
Anuncio de la llegada de Netflix a Cuba
"Cuba tiene a grandes directores de cine y una robusta cultura artística y un día esperamos poder traer su talento a nuestra audiencia global de 57 millones de usuarios", ha asegurado Reed Hastings, CEO de la compañía, refiriéndose a este inesperado lanzamiento.
No es oro todo lo que reluce
La llegada de Netflix a Cuba es sorprendente pero hay que rascar tras el boato inicial para ver la realidad del servicio en aquel país. Y es que Netflix estará disponible para sólo unos pocos cubanos. En primer lugar, será necesario tener una conexión a internet medianamente rápida para disfrutar del servicio, algo aún no demasiado extendido en Cuba.
Además, Netflix sólo estará disponible "para aquellos cubanos que dispongan acceso a medios de pago internacionales". Un servicio al que sólo podrán acceder las clases altas. Y es que, aunque el servicio tendrá un precio de 8 dólares, igual que en Estados Unidos, esos 8 dólares son un tercio del salario medio mensual en Cuba.
Sea como fuere, Netflix espera que el desarrollo de internet despegue rápidamente en Cuba tras el final del bloqueo de Estados Unidos y se aseguran una posición predoimante en el mercado.
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