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La semana pasada en 'Anatomía de Grey' vivimos uno de los episodios más emotivos de toda la temporada. April y Jackson por fin afrontaron la decisión más complicada de toda su vida mientras que Meredith optó por marcharse a visitar a su marido. En este nuevo capítulo titulado "The Great Pretender" conoceremos qué tal le fue a la doctora Grey por Washington DC.
Cuando el miedo nos detiene
Meredith ha regresado de su fin de semana y Pierce y Callie quieren saber qué tal le ha ido. Sin embargo, la doctora Grey esquiva todas las preguntas, sin duda alguna, no quiere hablar de lo sucedido con Derek en Whashington DC, ¿tan mal habrá ido o simplemente no quiere alardear?, ¿han vuelto a discutir y han finalizado el matrimonio para siempre?Una conversación entre Maggie y Meredith nos descubre que la doctora Grey ha estado mintiendo a sus compañeros. Aunque hizo una maleta repleta de lencería y se marchó con muchísimas ganas de pasar una estupenda velada con su esposo, la realidad es que nunca llegó a encontrarse con su marido puesto que el propio Derek se puso en contacto con Pierce para preguntarle por su mujer.
Maggie le confiesa a su medio hermana que odia mentir y lo hizo por ella porque a pesar de todo quiere que sepa que puede contar con su apoyo, pero necesita saber el motivo por el que se ha visto obligada a contar una mentira. Finalmente Meredith le cuenta la verdad, llegó al aeropuerto pero a la hora de embarcar se quedó paralizada viendo cómo el avión despegaba y pasó todo el fin de semana sola en un hotel.
Pero no queda ahí la cosa, Meredith no puede reprimirse más y le confiesa también a Karev lo que hizo. No solo no cogió el avión que le llevaría al lado de su marido y se quedó sola en un hotel, sino que disfrutó siendo ella misma durante tres días, sin tener que preocuparse por ser médico, madre o esposa. No sabe que va a pasar con su matrimonio pero sí sabe que, en estos momentos, no quiere estar con él. ¿Estamos ante el final definitivo de la relación Grey-Shepherd?
Disfrutar de la vida
La apasionante vida sexual de sus compañeros provoca que Callie comience a replantearse su aburrida vida. Desde que rompió con Arizona y no tiene la compañía de Mark, la doctora Torres pasa las noches cuidando de la pequeña Sofía o viendo la televisión tirada en el sofá pero, ¿por qué no salir a divertirse? Dispuesta a no perder más el tiempo, Callie decide salir de fiesta y lanzarse a bailar con un desconocido. ¿Habrá terminado la noche por todo lo alto?
Mientras tanto, Robbins sobrevive compartiendo piso con Alex y algunos residentes pero la convivencia resulta complicada sobre todo si se topa con Jo y ésta le roba su turno en la ducha y, sin ningún reparo, se desviste delante de ella. Este grandísimo problema lo traslada a una conversación con Amelia mientras someten a la doctora Herman a otra de las pruebas para comprobar el avance del tumor. Lo que Arizona no esperaba es que Herman fuera a disfrutar tanto con su historia.
Robbins intenta que Alex consiga que Jo vaya más tapadita por la casa, ya que tiene que convivir con residentes, por lo menos que haya un mínimo de civismo. La que parece encantada por esta situación es la doctora Herman, que una vez más disfruta viendo cómo Arizona mete la pata y se pone en un aprieto ella misma. Además, parece gustarle que Robbins sea una sobona de residentes, aspecto que desconocía. No obstante, le echa en cara que en su día fuera tan hipócrita por haberle reprochado a ella sus encuentros con Graham. ¡Vaya dos se han juntado!
Aceptar la realidad
Bailey, su marido y su cuñado Curtis han acudido al bosque para esparcir las cenizas de su padre en el lugar donde solían acampar cuando eran pequeños. La ceremonia se desarrolla en un ambiente agradable e incluso divertido hasta que Curtis se empieza a sentir mal y se desmaya cayendo ladera abajo. Rápidamente le trasladan al hospital, Ben acaba de perder a su padre y no puede perder también a su hermano.
A pesar de que el propio Curtis asegura que se encuentra bien, una primera exploración y el resultado de los análisis determinan que algo no marcha adecuadamente. Finalmente un TAC revela que el bazo está excesivamente inflamado por lo que la doctora Grey le intervendrá y lo extirpará, sin embargo, ¿por qué ha llegado a esa situación? Todo parece indicar que Curtis ingiere algún tipo de estupefaciente.
Aunque Ben no se da cuenta, Miranda, mucho más avispada, se ha percatado de ciertas peculiaridades que le hacen pensar que Curt no es un drogadicto sino que, en realidad, toma medicamentos para cambiar de sexo. Dispuesta a averiguar la verdad, Bailey conversa con su cuñado pero de repente el hombre empieza a sentirse mal y a escupir sangre.
Ante la insistencia de Ben de que su hermano se está drogando, Miranda no tiene más remedio que contarle la verdad a su marido. Ben reacciona incrédulo ante la noticia, tanto que llega a pensar que es una broma. Sin embargo, Bailey pocas veces bromea y menos con un asunto tan serio... Ben va a tener que afrontarlo y hablar con su hermano cara a cara.
A pesar de todo, Ben no acepta que su hermano de repente quiera ser mujer, ¿por qué no le ha dicho nada si desde los cinco años se siente atrapado en otro cuerpo? No sólo le cabrea que quiera cambiar de sexo, lo que realmente le molesta es que haya tardado 25 años en contarle la verdad, que nunca se haya atrevido a decirle lo más importante de su vida cuando él se lo ha contado absolutamente todo. Siente que ha vivido en una mentira y le va a resultar complicado perdonar a su hermano y aceptar su cambio.
Aunque la verdad duela
Al hospital es trasladada una chica que se ha caído escaleras abajo después de que su novio le pidiera matrimonio. Antes de hacerle más pruebas, la joven confiesa que finge desmayarse porque no sabe cómo deshacerse de su chico sin romperle el corazón. Su novio es un joven muy amable, muy atento y muy cariñoso, vamos un buenazo, sin embargo, todo lo que tiene de bueno lo tiene de pegajoso, pesado y aburrido.
Ante la imposibilidad de la chica de confesarle la verdad a su novio, Callie intercede por ella y le cuenta la verdad al chico. Su novia finge los desmayos porque no soporta que siempre esté encima de ella, así que más vale que la deje y encuentre a otra chica que de verdad aprecie y se merezca el cariño y el esfuerzo que demuestra. Más vale una verdad que duela que una mentira que ilusione.
Tropezando con la misma piedra
Catherine y Richard han vuelto a conectar. Tras los últimos acontecimientos, la mamá de Jackson necesitaba del apoyo de alguien y quién mejor que Webber. Richard le recuerda que su hijo y su nuera pidieron distancia pero Catherine no puede evitar estar pendiente y preocupada por ellos. Menos mal que tiene a Richard para ejercer de "poli malo" y controlar sus impulsos de madre excesivamente protectora.
Después de los buenos días que han pasado de nuevo juntos, Catherine no se quiere marchar todavía y le pide a Webber que le deje ayudarle en la operación, eso les dará más tiempo juntos. Tras una conversación, Richard le echa en cara que se haya tomado el fin de semana como un divertimento con el que ocupar la mente y no pensar en el dolor y sufrimiento de su hijo. La relación no va a ningún lado, ambos son incapaces de olvidar los asuntos turbios del pasado que tanto daño les hacen. Si no consiguen pasar página nunca podrán estar juntos.
Conclusiones
Una de las cosas que siempre me ha gustado de esta serie es la capacidad de conjugar perfectamente el drama con el sarcasmo o la ironía. A pesar de encontrarnos con una trama dura como la de la doctora Herman (no olvidemos que padece un tumor que probablemente le arrebate la vida si la complicadísima operación no funciona), siempre tenemos un contrapunto como, en este caso, el particular humor de la propia doctora Herman o la relación entre Robbins y Jo. Está claro que, al mal tiempo, buena cara.
Y no nos olvidemos del amor, en esta serie siempre hay espacio para ello y Amelia empieza a mostrar cierto cariño por Hunt, sobre todo cuando es incapaz de disimular los celos al enterarse de que Herman le tira los tejos a Owen. Dispuesta a no dejar pasar el que puede que sea su último tren, la doctora Shepherd se acerca a la caravana de Hunt y, por fin, ocurrió lo que se veía venir episodios atrás, Amelia y Owen se funden en un apasionado beso.
En el próximo episodio...
El siguiente episodio de 'Anatomía de Grey' se titula "Staring at the end". En este capítulo los médicos del hospital se fascinan con el caso de la doctora Herman cuando Amelia da una conferencia que detalla los entresijos de la cirugía. Mientras tanto, Arizona y Herman siguen trabajando sobre la cantidad de casos que están tratando de completar antes de la gran cirugía.
