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El productor de televisión estadounidense del famoso reality show 'Survivor' ('Supervivientes'), Bruce Beresford-Redman, fue condenado el pasado jueves a 12 años de cárcel por el juez Víctor Manuel Echeverría Tun por el asesinato de su mujer, Mónica Burgos, según comunica Deadline.
Cancún fue el escenario de este lamentable suceso hace cuatro años, cuando la pareja se encontraba alojada en uno de los hoteles de la ciudad mexicana. Según los medios locales, el cuerpo de la brasileña fue encontrado en las inmediaciones del hotel, con evidentes signos de estrangulamiento. Ciertos testigos declaran que, momentos antes, habían escuchado discutir a la pareja.El exproductor de 'Survivor' ha permanecido fugado de la Justicia. Tras un proceso de extradición, Beresford fue formalmente detenido el pasado 8 de enero de 2012, y metido entre rejas el día 15 de febrero acusado de un delito de homicidio. Su abogado anunció que recurrirá la sentencia.
Bruce Beresford-Redman
La familia de la fallecida emitió una declaración a través de Alison Triessl, su abogada: "Han pasado casi cinco años desde que perdieron a su amada hermana. No pasa un día en que no la extrañemos terriblemente y nada la devolverá a la vida, pero ahora pueden decir que finalmente recibió la justicia que merecía".
El juicio penal de Beresford-Redman
Stephen Jaffe, portavoz de los abogados de Beresford-Redman, indicaron que el abogado del acusado hablaría de una apelación el viernes. García Torres, el fiscal del estado de Quintana Roo, por su parte, mostró su decepción por la sentencia del exproductor: "Queríamos la sentencia máxima. Pedimos que fuera encarcelado 50 años por asesinato", se quejó el fiscal.
Bruce defendió su inocencia, pero en 2011 un tribunal de Estados Unidos confirmó su extradición y en 2012 fue extraditado a México. Una vez allí, un juez ordenó que el acusado fuera juzgado por asesinato. Los testigos afirmaron que escucharon una acalorada pelea la noche en la que Burgos desapareció y, los abogados de Beresford-Redman, se defendieron diciendo que los ruidos provenían del volumen alto de un vídeo. El acusado se entregó a las autoridades en Los Ángeles, tras una orden de arresto emitida en México.