"Born again", el sexto capítulo de la tercera temporada de 'Vikings' se ha centrado casi exclusivamente en el conflicto religioso entre los paganos y los cristianos; además hemos asistido a un trágico desenlace acompañado de un impactante final, aunque el recorrido a lo largo de los 42 minutos de duración haya sido en términos generales uno de los más decepcionantes de este 2015.
Veamos que novedades tenemos después de haber visto el 3x06.
Athelstan, la despedida
La continua lucha religiosa sucedida a lo largo de todas las temporadas de 'Vikings' vive un capítulo definitivo en este "Born again". Athelstan, ese sacerdote tímido e inquieto que fue introducido casi al comienzo de la serie (en el 1x02) y que con el paso del tiempo se convirtió en consejero y amigo personal de Ragnar, padece una revelación definitiva en forma de mensaje divino, y entiende que la llamada de su Dios es una realidad, así que decide abandonar para siempre esa dualidad en la que se movía entre la devoción por el cristianismo y el respeto por los dioses paganos (prácticamente se había convertido en una figura apaciguadora y de entente entre los dos grupos).
Al final de la recap recuperaremos la trama de Athelstan, que desembocará en ese "volver a nacer" que el capítulo lleva por título.
Vikings 3x06
París y su conquista
Ya veíamos en el 3x05 que el nuevo objetivo de Ragnar y los vikingos es el territorio de Francia, y más concretamente su principal ciudad, París. El diseño del ataque a la ciudad es explicado por Athelstan gracias a sus conocimientos de la zona, ya que en el pasado tuvo la oportunidad de visitarla. El religioso habla de París como una ciudad inexpugnable, imponente y que representa una evidente evolución en cuanto al modo de vida tradicional de esta etapa histórica; su control supondría por tanto para los vikingos un gran paso para su consolidación como pueblo y como fuerza predominante en la Europa continental.
Este nuevo proyecto colma las ansias de grandeza de Ragnar, que tras su regreso a Kattegat después de la conquista de las tierras de Mercia ha visto como su vida familiar -la relación personal con Aslaug, Rollo y su hijo Björn- y su rol como líder -Floki y las veladas críticas hacia parte de su política de alianzas-, han sufrido cambios con los que no contaba antes de su marcha.
Las relaciones rotas en Wessex
El cruel ataque comandado por Aethelwul con la connivencia de su padre, el rey Ecbert, al poblado de vikingos instalados en las tierras de Wessex es revelado por un superviviente que consigue llegar a Kattegat, contándole a Ragnar todo lo sucedido. Pero no tan solo Ragnar habla con ese hombre, precisamente es Floki el que lo lleva delante del rey para que tenga conocimiento de esa historia. Sin duda alguna esta novedad beneficia a los intereses de Floki, que pretende torpedear la relación de interés propiciada por Ragnar desde hace tiempo con los cristianos, y ese mensaje de traición y muerte le confirma que sus malos augurios respecto a la verdadera naturaleza de esa "amistad" no se equivocaban.
En este momento entran en juego tres matices: Floki sabe que el acuerdo con los cristianos es un fracaso y que Ragnar no puede volver a fiarse del rey Ecbert. Por otro lado Lothbrok se culpa de esa situación, ya que aunque directamente no tenga nada que ver con la matanza, la confianza depositada en la palabra de Ecbert ha sido traicionada y ese entendimiento entre dos pueblos tan diferentes ya no vale nada; y tercera: Floki quiere venganza, y el elemento más cercano para aplicarla es Athelstan, al que siempre ha visto como un emisario del cristianismo, un infiltrado que espía los movimientos de los vikingos y al que considera que puede estar dentro de esa conspiración.
Ante tal situación, mezcla de una enorme presión y grandes dudas, Ragnar decide asesinar a esa granjero para ganar tiempo; quiere vengarse de Ecbert -y creemos que lo hará en los próximos episodios-, pero ahora su objetivo es la conquista de París, y ni nada ni nadie le detendrá ante ese nuevo horizonte, así que decide actuar cruelmente contra ese inocente personaje.
Vikings 3x06
Los incómodos acompañantes
La pasada semana veíamos en ""The usurper"" que el conde Kalf había renunciado en un primer momento a acompañar a Ragnar en la conquista de París, pero en este "Born again" el propio Kalf, junto con Erlendur (el hijo del rey Horik) y Torvi (la viuda del conde Borg), se convierten en aliados de esa campaña militar y unen sus fuerzas todos juntos en Kattegat. De la misma manera que sucede con el rey Ecbert, esta curiosa unión de fuerzas responde a una serie de intereses entre esas partes (Kalf, Erlendur y Torvi), que buscan la única manera de estar cerca de Ragnar para conseguir ejecutar su venganza tras los acontecimientos acaecidos en el pasado.
Vikings 3x06
Vikings 3x06
El castigo a Judith
Por orden del rey Ecbert, y para castigar la afrenta de Judith al quedarse embarazada de otro hombre, se dicta como sentencia que le sean arrancadas las orejas y la nariz en un acto público delante del pueblo de Wessex. La barbarie humana de los cristianos no deja atrás a los rituales de los paganos, y en ese sentido la dos religiones se asemejan. Antes de proceder con la aplicación de la pena el rey Ecbert le concede un último hilo de esperanza, y pide que revele la identidad del padre de su hijo para poder salvarse. Ella se niega en un primer momento, pero tras cortarle la primera oreja decide confesar.
Vikings 3x06
La revelación de Athelstan
Apuntábamos al inicio de esta recap que la visión divina de Athelstan le ha llevado a su esperado contacto con Dios, y que por tanto ya está preparado para ir a su lado en un viaje sin retorno. El sacrificio que ofrece Athelstan tras esa visión es llevado a cabo por Floki, que a su vez también recibe un mensaje por parte de los dioses nórdicos, y que no es otro que el momento de dar muerte al traidor ha llegado, en este caso Athelstan, una pareja que siempre había mantenido una lucha desde el punto de vista ideológico respecto a la profesión de las dos religiones, aunque Floki siempre se había mostrado mucho más beligerante que el sacerdote.
La despedida entre los dos amigos sí que impregna el momento de algo más de emotividad, y para honrar la memoria de Athelstan Ragnar se coloca en el cuello su colgante con la cruz cristiana. No estamos ante una conversión católica en el sentido estricto de la palabra, pero este "cambio religioso" supondrá sin duda un cambio en el desarrollo personal y psicológico de Ragnar; un antes y un después en su forma de entender la vida. De alguna manera ha abrazado la religión cristiana siendo el rey de los vikingos, así que algún tipo de consecuencia deberá tener este gesto dentro de la comunidad pagana, aunque tampoco debemos olvidar que se trata de un homenaje relacionado con la figura y la muerte de su amigo y confidente.
El 3x07
El intento de conquista de la ciudad de París es una realidad en la promo del próximo capítulo de 'Vikings', que lleva precisamente el nombre de la capital de Francia. La próxima semana "París".
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