FormulaTV.com en 'Supervivientes 2015': recorrido por los Cayos, ensayos de la gala...

Diecinueve horas, tres vuelos y tres horas de coche después, FormulaTV.com ha llegado hasta la ciudad de San Pedro de Sula, en Honduras, hasta donde se ha trasladado para vivir desde dentro la experiencia de 'Supervivientes 2015', y experimentar de primera mano cómo se prepara y se lleva a cabo uno de los programas más complejos y espectaculares de la televisión en el mundo.

El viaje comenzaba el mediodía de este jueves 9 de abril en Madrid, de donde salíamos con destino a Guatemala, para allí coger un vuelo que nos llevaría a El Salvador y, desde ahí, otro a San Pedro de Sula (Honduras), donde se encuentra el hotel en el que se hospedan todos los miembros del equipo; un macro complejo con bungalows y villas que se convierte en el hogar de las 140 personas trasladadas a trabajar hasta allí. En plena escala nos llegaba la noticia del aplazamiento del estreno, algo que nos caía como un jarro de agua fría ya que una de las previsiones era poder vivir desde dentro la gala inaugural.

Sin embargo, tanto esta pequeña decepción como el jetlag y el cansancio del viaje (tras el cual apenas habíamos podido dormir unas horas ya que hay que sumarle que aquí a las 5 de la mañana es completamente de día y no hay persianas) se nos pasaban en cuanto nos uníamos al resto del equipo en su traslado a la zona de los cayos; un archipiélago de pequeñas islas paradisiacas en cuyas playas de arena blanca vivirán los concursantes del reality, y en la que la productora ha montado un despliegue técnico y personal espectacular.

Recorrido por los Cayos

Este primer día hemos pasado la jornada con el resto de los trabajadores del programa, yendo con ellos en los traslados y acompañándoles en su trabajo para poder vivir y conocer de primera mano cómo lo realizan. Por ello, untados hasta arriba de protección solar factor 50 y el antimosquitos más potente que había en la farmacia (ambas cosas imprescindibles), a primera hora de la mañana nos subíamos junto a cuarenta de estos trabajadores a una de las barcas que les lleva y les trae al embarcadero situado en la playa del hotel.

Hasta llegar a Cayos Cochinos nos esperaba un viaje de 40 minutos en los que abandonamos una playa espectacular para, a medida que va finalizando el viaje, ir adentrándote en unas aún más impresionantes y que te van dando la bienvenida a Cayo Menor, una de las islas más grandes de Cayos Cochinos, donde el programa tiene montado todo un auténtico centro de operaciones y en el que están tanto la Palapa que hace las funciones de plató, como el control de realización, los materiales técnicos...

Durante la mañana, y mientras el equipo desembarcaba y se ponía en marcha, hemos tenido la suerte de poder recorrer en barco todas las playas e islas en las que se irá desarrollando el programa. Localizaciones que van desde islas como Cayo Timón, de apenas unos doscientos metros y en los que sólo hay una palmera, a playas como Cabeza de León, en pleno Cayo Menor, en la que los concursantes pueden adentrarse libremente en las vastas profundidades de la isla. Recorrer el archipiélago ha sido una experiencia completamente inolvidable, y hacerlo además acompañado de Pedro Juan Rivera, el productor ejecutivo del programa, ha sido ya un privilegio. Y es que de su mano hemos podido adentrarnos en todas estas playas totalmente desiertas y conocer cómo y cuándo las usará el programa, además de recorrerlas con el recuerdo de haberlas visto en ediciones anteriores y la increíble sensación de estar ahora recorriéndolas en persona.

Tras este viaje único, nos hemos vuelto a reenganchar a la rutina del equipo del programa, pudiendo asisitir a una reunión de escaleta y a ensayos con Lara Álvarezz. La cantidad de elementos que incluye este programa y las grandes complejidades que éstos conllevan, hacen que sea prácticamente imposible poder abarcar todos sus trabajos a la vez, y es que mientras Lara graba unas telepromociones aprovechando un parón del ensayo, otro grupo se encarga de ir dando forma al juego semanal, mientras otros tantos van dando forma a lo que vendrá por la tarde.

La isla de Chachahuate y su tribu de Garífunas

A mediodía nos han trasladado hasta la isla de Chachahuate, a pocos minutos (en barca, cómo no) de Cayo Menor. Sin duda, y pese a todo lo disfrutado y visto hasta el momento, el poder conocerla ha sido una de las experiencia más curiosas y enriquecedoras de cuantas podamos tener en estos días que vamos a pasar aquí en Honduras. Y es que en esta diminuta isla habitan solamente 140 personas, todas ellas miembros de la tribu Garífuna. Un grupito de cabañas de madera rodeadas de arena blanca y pequeñas barcas de pesca nos recibía a nuestra llegada.

La isla también forma parte de las localizaciones que emplea el reality, por lo que sus habitantes reciben con brazos abiertos y se vuelcan con todo lo que tenga que ver con él; algo que hemos podido comprender cuando hemos tenido la oportunidad de hablar ellos durante el almuerzo que nos han ofrecido (y que nos han pescado en el momento), ya que el reality ha revolucionado sus vidas y les ha dado trabajo y una visibilidad que hasta entonces no tenían. Pese a lo poco con lo que viven, su energía positiva, su actitud calmada y su amabilidad han conseguido darnos el último empujón para lo que nos quedaba de día (recordemos que el jetlag, pese a la efusividad y la emoción del primer momento del día, cuando apenas has dormido y llevas todo el día al sol, algo se iba notando ya...).

Tras la comida en Chachahuate y los últimos ensayos en Cayo Menor, a las 17:30 todos los miembros del equipo han embarcado de vuelta hacia el hotel en un viaje de una hora (a la vuelta el baco atraca siempre en otro puerto) en el que hemos podido ir viendo atardecer desde el medio del mar hasta que el sol ya se ocultaba por completo. A nuestra llegada al muelle, un bus nos esperaba para trasladarnos al hotel, donde tras otra hora de viaje por carretera (algo bastante más peligroso que los viajes en barco teniendo en cuenta cómo conducen aquí y cómo son las carreteras) se reunían una última vez para cerrar los asuntos de producción del día siguiente y repasar el plan del día antes de irse a cenar.

Un trabajo duro y una actitud admirable

Y es que si algo saco en claro de este primer día en 'Superiviventes 2015' es que, pese a que el entorno sea paradisiaco y las vistas no puedan ser mejores, el trabajo que relizan los 140 mienbros del equipo del programa es bastante duro. A la distancia con su casa y su familia durante todos estos meses se suman unas jornadas de grabación largas que, además, siempre empiezan y acaban con largos trayectos tanto por mar como por carretera.

Sin embargo, al igual que nos está pasando a nostros (en menor proporción, lógicamente, ya que estaremos unos días), las ganas con las que se unen al proyecto y el entusiasmo con el que trabajan sabiendo que están viviendo una experiencia inolvidable e irrepetible, hacen que todos trabajen con una una motivación contagiosa y admirable. Además, les une una sensación de unidad de grupo pocas veces vistas en cualquier otro rodaje o producción. Y es que, durante estos tres meses, se convierten en sus compañeros de trabajo, sus amigos y su familia, con todo lo que ello supone.