La decisión del gobierno de reestructurar el reparo de los derechos televisvos ha creado una gran polémica en torno al mundo del fútbol. Primero fueron los jugadores y ahora es la Federación la que arremete contra la nueva decisión del gobierno amenazando con paralizar la liga.
Este miércoles se produjo una reunión, presidida por Ángel María Villar, de la Federación Española de Fútbol a petición de la AFE para tratar el tema en profundidad. En este encuentro se ha convocado una huelga a partir del día 16 de mayo si el gobierno no toma cartas en el asunto.Ante este hecho, la Liga de Fútbol profesional ha emitido un comunicado explicando a través de 7 puntos su visión de los hechos. En dicho comunicado, se convoca una Asamblea General Extraordinaria a los clubes y SAD afiliados. También explica que han tomado acciones legales para que la huelga no se lleve a cabo, además de añadir que el nuevo Real Decreto-ley ayudará al fútbol español para mejorar su imagen y que los futbolistas de todas las categorías salgan beneficiados.
Villar, presidente de la Federación española de Fútbol
Para finalizar con su indignación, la Federación ha explicado que el Gobierno no les ha tenido en cuenta a la hora de realizar ninguna decisión y que no se les envió ningún borrador. Con esta situación, el gobierno debe actuar si no quiere que no se realice ninguna jornada de liga partir del día 16 de mayo.
Sólo los clubes están de acuerdo con el nuevo reparto
El Real Decreto-ley establece un reparto mucho más equitativo de los derechos por parte de los clubes, que son prácticamente los únicos que están de acuerdo con la nueva regulación. Los clubes profesionales de fútbol se reparten el 92% de los ingresos, siendo el 90% de estos para la primera división y el 10% para la segunda categoría.
Sin embargo, hay numerosos detalles dentro de la nueva legislación que crispan a otras entidades del mundo del fútbol. Entre ellos se encuentran la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles), donde tanto futbolistas como la propia entidad no se muestran de acuerdo con la nueva ley. El principal motivo es la escasa cifra que va a parar a la asociación, muy por debajo del 3% que esperaban conseguir. A esto se suman cambios fiscales que afectan a los futbolistas, como el pago directo a los jugadores sin representantes.
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