Los resultados de las elecciones del pasado 24 de mayo parece que traen consigo un cambio en el panorama nacional. En la Comunidad Valenciana, en concreto, la irrupción de Compromís y Partit Socialista del País Valencià parece que dibujará un nuevo panorama sobre todo en lo que a los medios de comunicación valencianos respecta.
El partido de Ximo Puig y la coalición de Mónica Oltra se postulan para ponerse al frente de la Generalitat. Ambos apuestan en sus líneas de gobierno por la reapertura de Canal 9, tal y como vienen reivindicando desde el momento de su cierre en 2013.
Reapertura sin fecha, pero cuanto antes
Según informa Las Provincias, la formación socialista ha marcado la meta de que la nueva televisión emita a partir del próximo 9 de octubre, coincidiendo con el Día de la Comunitat Valenciana. Desde Compromís no señalan una fecha concreta, pero hacen referencia a su deseo de que la reapertura de Canal 9 se dé lo antes posible.
Estos últimos, además, apuntan a varios problemas que hay que solventar primero: por un lado, se debe detener el proceso de disolución; y, por otro, se deben levantar las denuncias que el sindicato CGT y los socialistas valencianos interpusieron ante la Audiencia Nacional y ante el Constitucional a causa del cierre de Radiotelevisión Valenciana en noviembre de 2013.
A este respecto el número dos de la coalición de Les Cortas por Valencia, Enric Morera, se muestra confiado en que el PSPV quite la denuncia interpuesta y dice que intentarán convencer al sindicato "para que haga lo mismo con la demanda colectiva que presentó contra el ERE".
Imagen de una de las últimas emisiones de Canal 9 antes de ser clausurada
Una plantilla de empleados sostenible
La nueva RTVV se levantará sobre los cimientos de la empresa original, en declaraciones de Ximo Puig, para lo que pedirán a la Generalitat que se solventen posibilidades donde se garantice una pronta vuelta del servicio público.
Morera marca como primer objetivo el freno del proceso de liquidación, aspecto que ya había reclamado el comité de empresa de RTVV. En este caso, los dos partidos convienen en que el medio de comunicación ha de ser viable económicamente y la plantilla de 1.800 empleados a la que se llegó durante el gobierno de Alberto Fabra es insostenible. El ideario de Compromís se centra en una plantilla de algo menos de mil empleados, pactada con el comité de empresa y adquiriendo el compromiso de respetar los derechos de los empleados despedidos.
En su campaña electoral Puig incidió en la creación de una plantilla reducida a "bastante menos de la mitad" para la nueva etapa de RTVV. El PSPV se decanta por un modelo de televisión pública independiente, siguiendo el patrón de TVE en la época de Rodríguez Zapatero, ya que "fue una de las más independientes de Europa", según el secretario general de los socialistas valencianos.
Mónica Oltra, de Compromís, con una camiseta donde denuncia la manipulación de Canal 9
De gestión pública
Compromís y PSPV coinciden también en que la gestión del nuevo medio de comunicación ha de ser pública y que su funcionamiento ha de desembocar, de igual manera, en el auge de las empresas audiovisuales de Valencia y en el fomento del valenciano.
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