Participó en la segunda edición de '¿Quién quiere casarse con mi hijo?' y consiguió un récord difícil de superar, el de la pareja menos duradera de todas las que se han formado. Isidoro, el vendedor ambulante, se marchó con la que iba a ser su futura esposa, Natalia, a Bilbao y duraron 7 días.
Tres años han pasado desde eso y ahora él reflexiona: "Fue culpa mía, ella es una buena chica, pero sinceramente es difícil llevar una relación cuando se empieza con bolos, eventos, viajes etc". En su día se planteaba ser tronista de 'Mujeres y hombres y viceversa', a pesar de esto él ha conseguido formar una pareja y lleva con ella año y medio.
Su trabajo actual es de búsqueda de nuevas caras para programa de televisión junto a una agencia. Reconoce que, a diferencia de a otros, a él no le ha supuesto un problema haber participado en un reality para desarrollar su trabajo actualmente. De hecho a él le ha ayudado porque ha podido continuar en el mismo sector.
El motivo de su cambio físico
En el programa de Cuatro se mostraba fibrado, pero ahora ha aumentado considerablemente su cuerpo. Desde hace un año y 8 meses decidió cambiar su rutina y comenzar a trabajar para potenciar sus músculos, quería romper con la monotonía.
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A pesar de ser más deportista ahora y no tener problema en volver a embarcarse en un reality tras su paso por el programa de Luján Argüelles, tiene claro que hay uno que la parecería muy difícil participar, 'Supervivientes: "No puedo estar sin chocolate es mi debilidad".